Scandal in the office *TERMINADA*

Capítulo 45

  Cuando llegó a Pacific Heights, una hora después, tenía la cabeza a punto de estallar.
Abrió con su llave y dio un portazo a su espalda.
Sólo tuvo que esperar unos segundos hasta que Siwon apareció en el arco que conducía a la parte trasera de la casa.

______ había supuesto que estaría en casa a esa hora, porque era sábado y no tenía que ir a trabajar. Además era el día que aprovechaba para dormir un poco más. Sin embargo, le pareció que tenía aspecto cansado.

-Eres un miserable, un maldito... -fue incapaz de seguir. La ira la había vuelto incoherente.

El la contempló un instante y después un lado de su boca se curvó hacia arriba con sorna.

-Bueno, tengo que reconocer que resultas refrescante -farfulló-. Tú pides el divorcio y resulta que yo soy el miserable y el maldito sinvergüenza.
-Gracias por ofrecerme la palabra adecuada. Aunque puede que «sinvergüenza» sea un término que se queda corto -cruzó los brazos-. ¿Qué me dices de «mentiroso»? O, espera... -descruzó los brazos y chasqueó los dedos, como si acabara de tener una súbita inspiración-, ¿qué me dices de «cazafortunas», «caza- herederas» o alguna de esas otras palabras que definirían a Donghae?
-No se te ocurra compararme con Donghae - Siwon frunció el ceño.
-Son tal para cual -contestó ella con dulzura.
-¿De qué estás hablando?
-Vamos, Siwon -repuso ella con impaciencia-. Mi padre me lo ha contado.
-¿Qué te ha contado?
-Que te ofreció una parte considerable de Tremont HI si te casabas conmigo. No te bastaba con que nuestro hijo... -casi se atragantó al decir la palabra- heredara la empresa, también querías una parte para ti, ¿no?

Hacía dos días, en un momento de cólera, le había sugerido que llegara a un acuerdo con su padre respecto a una participación en la empresa. No había tenido ni idea de que él ya se había ocupado de ese pequeño detalle.

El rostro de Siwon reflejó emociones diversas. Tardó un momento en contestar.

-Eso te ha molestado, ¿eh? -dijo con voz ecuánime.
-¿Tú que crees? -replicó ella-. ¿En qué te diferencias dé Donghae?
-¿En que yo no te he engañado? -ofreció él.
-Respuesta incorrecta -dijo ella, encolerizándose aún más por su irónica respuesta.
-¿Te ha molestado que pudieran haberme sobornado para que me casara contigo? Me pregunto por qué, aunque tengo una teoría.
-Seguro que es interesante -dijo ella con una risa amarga.

Pensó que golpearlo con una bandeja o clavarle un tenedor sería demasiado bueno para él. Sería mejor asarlo sobre la llama de una fondue...

Siwon asintió pensativo y se acercó a ella, aparentemente inconsciente de que vibraba de cólera.

-¿Quieres oír mi teoría? -preguntó.
-Me muero de ganas.
-Me quieres.
-Sí, claro -escupió ella, aunque se le había acelerado el pulso-, ¿Acaso las palabras «hipócrita», «mentiroso» y «cazafortunas» no significan nada para ti?
-Sí, pero todas esas cosas son como una gota en el océano, comparadas con el hecho de que me quieres y piensas que te he traicionado.
-Olvidas que lo sé todo sobre la traición -contestó ella con frialdad-. Es algo que ya no me impresiona.
-No amabas a Donghae. Pero a mí sí.

Ella se quedó sin respiración ante tanta arrogancia.

-¿Y si te dijera que nunca recibí un pago de tu padre? -preguntó él, escrutando su rostro.
-¿Qué?
-No recibí una participación en Tremont HI a cambio de casarme contigo -dijo él, mirándola a los ojos.
-Eso es imposible -ella se aferró a los datos que conocía-. Mi padre acaba de decirme que te ofreció acciones de Tremont HI.
-Que me las ofreció, sí. Que las acepté, no.