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─ Joder, solo deja terminar al menos una jodida canción, Irene

─ Es que no encuentro alguna canción que me guste realmente y como salimos tan apresurados no pude comprar algún disco en la tienda ─ chasqueo los dientes y se sentó mejor dejando al fin una canción random que para lo peor parecía música de los cincuenta o una mierda así

─ ¿Salimos apresurados por mi culpa? Tu dijiste que ya tenías mucho calor y que era hora de irse de aquí, ni siquiera disfrutamos de la playa ─ rodee los ojos y puse la mano fuera del vehículo en un intento de relajarme

Después del desayuno la niña "me molesta todo a mi alrededor" dijo que era muy tarde y que ya era hora de irnos a otro lugar, mi plan era quedarnos ahí hasta que acabaran los días, el clima era perfecto, había un buen ambiente y claro, una refrescante playa

Pero como era obvio junto a Irene lo cómodo y tranquilo para mí no era una opción

─ Pensé que el plan era ir de ciudad en ciudad ─ dijo de forma obvia y suspire ─ Por cierto, descubrí el nombre de esta ciudad, es un nombre extraño pero en la forma en la que lo pronunciaban era algo difícil

─ Si, lo escuche antes ─ bostecé, aún estaba cansado ─ Oh ¿Ya llamaste a tus padres o a tu hermano?

─ No, aun no lo eh hecho y no quiero hacerlo. Solo llegare después de estos días y ya

¿Qué?

─ ¿Quieres decir que solo llegaras después de estar fuera varios días? ─ Aturdido por tal "imprudencia" de señorita perfecta me hizo dudar si lo que había escuchado era cierto ─ ¿Esta bien eso? Digo, es normal en la gente como yo pero ¿No se preocuparan? O... algo peor, podrían mandar a buscarte o algo peor, llamar a la policía a por ti ─ Joder, está loca si piensa que solo se quedaran así tan de repente

─ Solo les mandare un mensaje que estoy bien y que regresare en unos días, prefiero no decirles a mentir

─ Bien, creo que estaba bien... pero aun creo que estaría mejor que alguien cercano a ti lo supiera. Digo, por si acaso, ¿no tienes a alguien en quien confiar? Por ejemplo tu madre o alguna amiga de la infancia, eso

Hubo un pequeño silencio, voltee rápidamente a verla pero no pude ver bien su rostro porque lo tenía volteado hacia la ventana, carraspee un poco confuso, tal vez no me ha escucho bien

─ Mi madre murió en el parto y ya te había dicho que no tengo amigas

Cuando termino no pude hacer otra cosa que apretar el volante, eso sí que no me lo esperaba

Por un momento quise pegarme por gran estupidez que dije pero la verdad no tenía idea, de haberlo tomado en cuenta no hubiera dudado en quedarme callado

Aun así me sentía mal, por más que mi madre fuera un dolor de huevos muchas veces ella ayudo a mi crianza y me apoyo siempre

Por un momento sonreí sin ganas, lo más seguro es que si se diera lo cuenta lo que hago ahora estaría muy decepcionada... Estaba consiente que de lo que quiero lograr no es la mejor de las ideas pero estaba seguro que no le iba a hacer daño a alguien, era cierto que esto había tomado varios giros inesperados pero mi objetivo aún seguía claro...

─ Lo siento mucho, Irene ─ solté y a pesar de lo que pensaba, tome su mano libre apretándola fuerte por un momento, no sabía si eso ayudaría mucho pero fue en lo primero que mi cuerpo reacciono

Realmente lo sentía y no solo por eso, por todo.

─ No tienes por qué, Sean. Está bien, no tengo ningún recuerdo de mi madre así que estoy bien, no fue algo que me hiciera falta ─ sentí su mirada y cuando la voltee le devolví una sonrisa forzada ─ ¿Qué hay de ti? ¿Tienes algún hermano? O... ¿al menos tus padres saben que estas aquí?

¡Adiós, reputación!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora