Una pelea entre aldeanos y elfos, aquella aldea estaba ya en llamas debido a las flechas legendarias de los elfos. Su líder no era muy fuerte ya que sus poderes no estaban desarrollándose correctamente, estos estaban decididos en destruir una aldea que les fue mucho de molestia los últimos meses después de la coronación al hijo de los anteriores reyes yace fallecidos por una enfermedad incurable.
El rey peleaba con todos a quienes se les avecinara para matarlos sin piedad alguna, como un inmundo que lo traiciono y que nunca ha podido perdonar a ningún humano despreciable que ha estado a su paso. El rey no pudo predecir el ataque que se le iba a dar pero por un impulso un chico, un niño humano exactamente empezó a proteger al rey con su traje hecho de prendas viejas y usadas al igual que su casco con materiales comunes. Las personas alrededor miraron con sorpresa como el humano protegía al elfo. La batalla termino, los demás humanos habían muerto pero el elfo tenia en brazos al niño, un superviviente de aquella batalla de elfos y aldeanos.
—¡Rey elfo! ¿Se encuentra usted bien?— pregunto mientras al ver al niño en brazos del elfo.
—Vamos al reino, preparaos una habitación para el niño, tomara entrenamiento conmigo y Bebe al día siguiente lo mas temprano posible— ordeno el rey mientras se iba siendo seguido por los demás.
El día siguiente, no fue muy bueno con el niño ya que tomo un entrenamiento demasiado duro que para los elfos anteriores, el chico era muy malo en la arqueria, el chico era muy fuerte y eso el rey de los elfos lo sabia por eso el ponía todo su tiempo en entrenarlo con dureza y sin descanso alguno, bueno, solo uno de 15 minutos. El niño era algo especial, por algo los entrenamientos siempre fueron demasiado duros para el niño y los elfos se preocupaban por el rendimiento de Stan, el aldeano que se ha vuelto poco a poco mas fuerte.
El niño era solo eso, alguien inocente que lleno la vida del Rey de puras fantasías que algún día podrían ser realidad, a pesar de que algunas veces, al niño le gustaba cambiar de roles y comportarse como un familiar muy cercano.—Rey Elfo, ¿Usted tiene familia?— pregunto.
—Ellos murieron por una enfermedad mortal— respondió intentando ocultar su tristeza.
—No estés triste, mira, te voy a contar un bonito cuento que me contaba mi mami antes de que se fuera al cielo, acomódate muy bien en tu trono de hermosas flores— este asintió, acomodándose.
—Listo— dijo mientras el niño se preparaba para contar el cuento.
—Hace un tiempo indefinido, había un niño que le gustaba mucho las flores, siempre las miraba y la mayoría del tiempo permanecía admirándolas para plantar muchas mas flores pero un día ¡El enfermo por el hechizo de una persona malvada! A lo que el tiempo pasaban, las flores se marchitaban al ver como su dueño estaba cada vez peor pero la condición fue una común en los cuentos de princesas, tenia que conseguir el beso del amor verdadero no necesariamente tenia que ser una chica, si no que puede ser también un chico. Un chico rebelde entro al jardín por el reto de sus amigos pensando que el dueño seria alguien amargado pero era solo alguien de su edad que plantaba flores mientras que su tos se hacia peor con el paso de los minutos por lo que este lo veía cada día para ver que unos de esos pocos días el se rindiera a lo que el chico rebelde le dio el beso de amor verdadero sin importar los prejuicios futuros, después de eso vivieron felices por siempre— El rey elfo se dio cuento de que eran hombres los que se besaron pero su sueño le gano.
Kyle se quedo a dormir en su trono ese día, era un recuerdo muy gracioso que cada vez que lo hablaban después de los años, el elfo se moría de vergüenza y a Stan le gustaba ver a su rey sonreír ademas de contarle varios cuento que le llenaban de varias ilusiones, este chico se gano la confianza del rey de los elfos.
Al paso del tiempo el pequeño niño Stan Marsh, actualmente con quince años de edad es nombrado caballero del rey elfo, Kyle Broflovski. Después de entrenamiento demasiado duro, ha llegado al puesto casi mayor como co-líder de los guerreros y estará al mando, opinando, protegiendo a su rey y estar a su lado todo el tiempo posible.
El rey elfo hizo mucho por Stan a lo que igual Stan ha intentado hacerlo pero al final siempre Kyle lo protegía lo máximo posible, el era importante, se apreciaban mutuamente, un día, Stan hizo una promesa muy importante.—Su majestad— dijo un azabache.
—¿Que sucede?— le pregunto sin quitar su expresión relajada.
—Prometo protegerte — dijo sin pensarlo dos veces sacandole una pequeña sonrisa.
—No sabes lo que dices— dijo para luego volver a su posee.
Aunque el si sabia lo que decía ¿O no?
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Protect you. ↬ Style
Fantasy-Su majestad- Dijo un azabache. -¿Que sucede?- Le pregunto sin quitar su expresión relajada. -Prometo protegerte- Dijo sin pensarlo dos veces sacándole una pequeña sonrisa. -No sabes lo que dices- Dijo para luego volver a su posee. Aunque el si...