Era el primer día de clases de Patricia, aunque no su primera vez en la escuela, ya que había pedido su cambio de turno en su escuela. Sin embargo se sentía nerviosa, pues tenia miedo a ser rechazada por sus nuevos compañeros. Cuando Patricia entro por primera vez a su nuevo salón, busco un asiento vació, el cual estaba cerca de una joven callada que estaba leyendo un libro, a Patricia le cayó muy bien y comenzó a platicar con ella.
Patricia: Hola, disculpa este es el salón X67
Joven: Si, ¿eres nueva?
Patricia: Si, me cambia de turno y estoy algo nerviosa
Joven: Que casualidad yo tambien
Patricia: ¿En serio? que bien, por lo menos ya no este sola
Joven: Pero ¿por que entraste hasta el viernes?¿tuviste problemas con tu cambio?
Patricia: Si, por la disponibilidad de horarios y ya estoy desfasada en cuanto a tareas y trabajos, ¿verdad?
Joven: Si algo, pero no te preocupes yo te voy a pasar la tarea y los ejercicios cuando termine la clase, ¿de acuerdo?
Patricia: Si, muchas gracias
Durante la clase la joven orientaba a Patricia en cuanto a los ejercicios que se tenían que realizar. Al finalizar la clase la joven se presento formalmente con Patricia:
Joven: Ya ni te dije mi nombre me llamo Rebeca
Patricia: Mucho gusto, yo tampoco te dije mi nombre es Patricia
Rebeca: También es un gusto, vayamos a comprar unas copias para la siguiente clase y algo de comer, ¿si?
Patricia: Vayamos
Cuando Patricia y Rebeca llegaron a la papelería se encontraron a algunos compañeros de su nuevo salón, los cuales fueron muy amables con ellas. Posteriormente las invitaron a desayunar, pues ya habían concluido las clases de ese día. Patricia se sintió muy feliz por su día, pues había encontrado una amiga y buenos compañeros.
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La moneda
Teen FictionEn el mundo existen dos tipos de monedas, unas nos traen beneficios si las sabemos administrar, pero existen otras que únicamente causan sufrimiento y confusión. En esta historia conocerás a Patricia, una joven que tuvo el des infortunio de encontr...