Parte 4.

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Baekhyun llegó a su casa sintiéndose la persona más sucia del planeta. El efecto de la pastilla que Chanyeol le había dado claramente ya había cesado hace algún tiempo y ahora lo que tenía encima era una sensación extraña en su cuerpo, pero que para él era más palpable en su parte baja. Justo ahí donde Chanyeol había ingresado algunas cosas.

Suspiró tomando asiento en el sofá de su casa y cerró sus ojos, recapitulando las cosas que habían pasado.

De alguna forma sentía un poco de vergüenza al recordar sus propias imágenes en aquella enorme pantalla, el Baekhyun de ese momento era totalmente diferente al que solía ser, pero en el acto había disfrutado en parte como Chanyeol había hecho las cosas sobre suyo.

Pero, independientemente de cómo se sentía en ese momento, lo que le seguía dando una ligera satisfacción es por la manera en que Chanyeol parecía querer comerlo con la mirada tan solo unos toques también. Saber que podía causar eso en un hombre tan guapo como lo era Chanyeol le daba algo así como orgullo, un orgullo que no estaba dispuesto a admitir en voz alta.

El hombre tenía una mirada demasiado potente, lo hacía sentirse aún mucho más pequeño a su lado. No sabía porqué, solo era un chico, alto, guapo, con demasiada imaginación para la perversión... Pensó.

—¿Qué estoy pensando? —preguntó para sí mismo sacudiendo su cabeza para liberar esos pensamientos que iban de aquí para allá en su cabeza.

Sabía que por su propio bien lo mejor era que tras unos cuantos espectáculos más, se aleje de ese trabajo y haga como si nada haya pasado. Desde un principio algo le decía que eso no era buena idea, pero ¿qué podía hacer?

Nadie quería darle trabajo por ser alguien demasiado joven, vivía solo y no tenía ninguna fuente de apoyo económico. El trabajo le urgió.

Aun así en sus tardes libres estaría tanteando algún lugar al que pueda recurrir en cuanto deje de presentarse en aquellos shows sexuales.

[...]

Chanyeol estaba confundido y ofuscado consigo mismo. No entendía las emociones en su cuerpo.

¿Qué demonios le había pasado?

Él jamás se había puesto erecto en situaciones así. Pero Baekhyun con una sola vez y sin llegar a tocarlo lo había puesto de esa manera, pero es que, joder.

De solo imaginar aquellos pequeños y finos labios en aquel miembro de plástico, era la imagen perfecta para hacerse una buena paja, imaginando que aquella boquita de verdad estaba entre sus piernas haciéndole una buena mamada, aumentando también la buena imagen del rojo y redondo culo de Baekhyun.

El chico había sido caliente por donde se le viera. Y no sólo a él le había encantado, sino a todo su público en general. Era demasiado satisfactorio pensar en las ganancias que el menor le iba a traer a sus negocios. Como era frecuentado por personas ricas, era normal recibir más dinero del que se pedía por los shows.

Chanyeol apretó la mano alrededor de su miembro y aumentó el ritmo que llevaba sobre este. La imagen mental de Baekhyun de nuevo en ese acto hacía presencia y por qué mentir.

También se estaba imaginando lo bien que sería tocar el culo de Baekhyun, pero sólo para él, tocarlo, masajearlo y hacer lo que a él se le venga en gana. Incluso imaginó en la agradable sensación que sería estar metiendo su miembro en el pequeño agujero del chico. Algo en su interior le decía que sería la misma gloria.

Con un último gruñido se corrió en su mano, manchandola con su esperma, había tratado de ser lo menos ruidoso posible, aunque la mayoría del personal a esas horas debió de irse.

Sexual Doll ||•ChanBaek•||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora