Capítulo 21

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Kyoko se despertó en la cama de Ren con un ligero dolor de cabeza y preguntándose como había llegado ahí, lo último que recordaba era que habían ido al restaurante y después nada...

Miro a su alrededor, tratando de encontrar a su novio; lo encontró acostado a su lado y sin camisa, su rostro se sonrojo terriblemente pensado en lo que pudieron estar haciendo la noche anterior y se calló de la cama. Lo que despertó a Ren.

—¿Te encuentras bien? —le preguntó al verla frotarse el trasero, se sentó sobre la cama para ver a su desorientada novia que trataba de descifrar lo que estaba pasando.

Kyoko se le quedó viendo, hacia mucho tiempo que no tenía la oportunidad de ver el cuerpo de Ren sin camisa y le seguía pareciendo fantástico, se sonrojó de nuevo y asintió energicamente.

—¿Recuerdas algo de lo sucedido ayer? —Ren bajo de la cama y la chica descubrió que tenía el pantalón de la piyama puesto, lo que la tranquilizo un poco.

—No realmente, es un poco difuso —admitió ella.

—Entonces creo que tendré que preguntarlo de nuevo —Ren tomó la pequeña caja y se sentó en el suelo junto a Kyoko, ella miró con interés el pequeño paquete que sostenía entre sus manos—no es así como pensaba hacerlo, pero supongo que lo único que realmente importa es la respuesta.

Aunque no lo parecía Ren estaba muerto por los nervios y le costó abrir la caja para enseñarle el anillo una vez más.

—Kyoko Mogami ¿Quieres casarte conmigo? —preguntó.

La chica no podía responder, solo se quedó paralizada viendo la joya que relucía dentro de su caja.

Los dos minutos que tardo en reaccionar fueron los más largos del mundo para la pareja, pero finalmente ella rompió en llanto y asintió rápidamente.

—Si, si quiero —murmuró, tratando de evitar que las lágrimas siguieran fluyendo.

Ren sonrió ampliamente y colocó el anillo en el dedo de Kyoko para después abrazarla y fuertemente.

—No tienes idea de lo feliz que me has hecho —la estrecho y ella también lo abrazó.

Se quedaron abrazados durante un buen rato hasta que Yashiro llamó para decir que iría por ellos, se apresuraron en alistarse.

quince minutos después Yashiro estaba de pie en la puerta vigilando su reloj y toco el timbre para que Ren le abriera lentamente, de alguna manera había logrado ducharse y vestirse lo suficientemente rápido para que Kyoko tuviera tiempo de arreglarse.

—Buenos días Ren ¿Qué tal te fue anoche? —le preguntó, antes de entrar en el departamento.

—No fue como esperaba —le explicó, justo en el momento en que ella entraba a la sala, vistiendo algo distinto a la noche anterior, porque un mes atrás había llevado algo de su ropa al departamento para poder cambiarse si se quedaba a dormir ahí.

—¡Kyoko-chan! —la saludó y su atención se desvió al anillo que descansaba en su dedo anular y una enorme sonrisa se dibujo sobre su rostro, dejando salir su lado fangirl y gritó por la emoción —¡Felicidades! —exclamó y la chica le sonrió a manera de respuesta, aún no se acostumbraba al peso del anillo en su mano.

Yashiro no pudo dejar de sonreír mientras los llevaba a LME porque tenían una junta para un nuevo papel que interpretarían como co protagonistas, porque desde que su relación se había hecho pública muchos de sus trabajos, fueran de modelaje o actuación los hacían juntos porque los fans consideraban que eran una pareja adorable.

—Yashiro, creo que no es necesario decir que por ahora debemos ser discretos y necesitamos de tu ayuda para lograr que nuestro compromiso no sea devorado por los medios, aunque creo que el presidente nos devorara vivos en cuanto lo descubra —le dijo Ren, que se había sentado al lado de Kyoko.
—No es necesario que me lo recuerdes y esperemos que ninguna foto se filtre, no queremos un escándalo o alboroto debido al anillo de compromiso —respondió el manager con total tranquilidad.

—¿Debo quitarme el anillo? —preguntó Kyoko un poco alarmada pero su novio negó lentamente.

—No deberías, a menos que debas filmación hoy no debería haber ningún problema.

Yashiro sonrió un poco al ver que el rostro de la chica se relajaba y hacía girar la sortija en su dedo, como si no quisiera apartarse de ella nunca.

—De acuerdo...


Por la tarde.

Kyoko había quedado de ir a almorzar con Kanae ese día y como ambas tenían la tarde libre fueron a un centro comercial. Por mucho que les pesara a ambas aun no tenían la popularidad para ser reconocidas en público.

Kanae había visto la sortija en cuanto su amiga apareció y se sintió un poco celosa por ella porque la joya era hermosa y obviamente personalizada a los gustos de ella. Ciertamente era hermosa y demostraba cuan bien la conocía su pareja.

—Disculpa el retraso —le dijo ella y Kanae no le dio una respuesta porque seguía viendo la sortija de su amiga.

—¿Joyería nueva? —preguntó y Kyoko sonrió y le enseñó el anillo.

—Si, fue un "regalo" de Tsuruga-san —hizo énfasis en la palabra regalo y Kane comprendió que se trataba de un secreto por el momento. 

—Es muy hermosa, se nota que ese chico te conoce muy bien.

Fueron a un café y se sentaron en una sección apartada pata hablar tranquilamente.

—Cuéntame cómo fue —pidió Kanae y Kyoko se sonrojo bastante.

—Fuimos a cenar pero creo que me embriague y me llevó a su departamento —dijo recordando la noche anterior y se sintió algo torpe— por la mañana me desperté usando una de sus camisas...

Kanae no podía imaginarse una escena donde ese hombre se aprovechara de su amiga, así que no dijo nada y siguió escuchando.

—Y por la mañana cuando desperté me lo obsequio y fue el momento más feliz de toda mi vida.

—Me alegro por ti.

Charlaron sobre más cosas y después de pagar la cuenta Kyoko tomó la mano de Kanae y la hizo detenerse en seco.

—Moku-san, sé que es demasiado pronto pero me encantaría pedirte que fueras mi dama —el corazón de Kanae se aceleró y sus mejillas hirvieron. Aunque sabía que ella no tenía otras amigas además de Kimiko y ella no se esperaba que de pronto le pidiera aquello.

—Yo... —el nudo en su garganta se deshizo de golpe al ver los ojos castaños de aquella chica ruidosa a la que tanto aprecio le tenía— me encantaría.

Secretos del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora