Que Complicado es el Amor

#7 Aclarando sentimientos...

Después de que Erza y el maestro salieran del gremio respectivamente, todos dentro de las instalaciones de Fairy Tail mostraba preocupación por aquel nombre que se mencionó "Leviatán", pues incluso el maestro mostraba miedo y preocupación por aquel nombre mas nadie lo detuvo para preguntarle pues se veía cansado, pues habría tiempo para que les cuente acerca de ese nombre.

Por las calles de Fiore caminaba una mujer de cabello rojos que cubrían su rostro para ocultar las lágrimas que salían sin parar. En una esquina de la calle fue detenida por una albina quien la conocía desde pequeña, quien la siguió preocupada por como salía del gremio.

-Erza somos amigas puedes contarm.... –Mira fue detenida por un abrazo que le proporciona la pelirroja-

-Mira soy una tonta, una estúpida... -susurraba en el hombre de Mira-

-No digas eso –la abrazaba y le acariciaba la espalda para que deje salir su tristeza- vallamos a un lugar donde me puedas contar lo que te paso Erza –dijo Mira, guiándola a Fairy Hills, al cuarto de la pelirroja-

Una vez llegaron al cuarto de Erza, esta tomo una ducha de agua fría para clamar su sentimientos, mientras tanto Mira la esperaba en su cama con un conjunto de cambio para ella, cuando acabo de ducharse mira le ofreció la toalla y su ropa de cambio, esta acepto y procedió a cercarse y a cambiarse.

-Ahora dime Erza que sucedió en la misión –la albina fue directo al grano-

-Pues veras Jellal, una vez que acabamos la misión y poner a salvo a Touka –ella alzo la mirada al techo con una sonrisa- el me invito a salir, y se porta amable conmigo pero, al final del día se me declaro –respondió mientras bajaba la mirada y ocultaba su rostro-

-Ara... Ara –decía la albina sorprendida- ¿pero acaso eso no es lo que esperabas? –cuestiono la albina sin dejar de ver a Erza- porque siempre velabas por él y lo cuidabas, deseando que solo vuelva a tu lado,-dijo está viendo a su amigarival de la infancia- o eso es lo que pudimos percibir todo el gremio cada vez que lo observabas –termino la albina pues de inmediato se le vino a la mente un pelirosa decaído- además cuando estabas en el grupo de Natsu te lo encontraste muchas veces, y compartieron momentos felices e incluso cuando llego al gremio se la pasaban coqueteando, todos pensábamos que eras ya novia de Jellal (causando un dolor en el corazón de Natsu) –declaro Mira a su vez pensando en Natsu para ella misma-

-Bueno ese es el problema Mira... –dijo está recordando lo que paso- sabes mira yo siempre quise a Jellal, desde que nos conocimos en la esclavitud, sin embargo cuando nos enfrentamos en la isla del cielo mis emociones se convirtieron en miedo y temor –dijo esta mientras recordaba cómo era golpeada por Jellal- pero debo admitir que aún me gustaba ¿porque? pues no me podía olvidar los bellos momentos que pasamos en medio de la esclavitud –dijo esta mientras mostraba una mirada de tristeza pero con una sonrisa de nostalgia- luego me entere que él había sido engañado eso genero mi confianza otra vez en él, por eso yo quería que el cambiara a la senda de la luz, no me gustaba verlo sufrir ni que se culpara por toda lo que hizo mientras estaba con las vendas del engaño–sonríe al recordarlo- cuando nos encontrábamos veía que el cambiaba para bien eso me generaba felicidad, por eso me la pasaba conversando quería saber sus aventuras al lado de sus amigos, me emocionaba lo alegre que sonaba cuando me narraba lo nuevo que había aprendido y a quienes ayudaba –El tono de Erza cambio a uno más triste- Cuando yo le iba a dar mi primer beso en aquel atardecer antes de los juegos, él me rechazo diciéndome que tenía novia, no te negare que me dolía a pesar de que me haya mentido, pero aún me gustaba, aun cuando me salvo de Acnología, pero cuando se me acercaba me di cuenta que me gustaba, mas ya no con la misma intensidad, yo deseaba que el cambiara -sonrió- pero sabes Mira, el siempre estuvo en todos los momentos que Jellal me decepciono -sin que lo notara dejaba caer lagrimas- incluso estuvo dispuesto a enfrentarse al ejercito imperial para que yo fuera feliz, pues el entendía mis sentimientos por Jellal.