Drabbles≈ └KookV┘

└La curiosidad mato al Príncipe ⟨2⟩╮

— ¿Crees que satisfacera a nuestro jefe?–

— Parece inofensivo, sumiso... Tiene todas las cualidades que su ser debe tener, es aceptable.–

— Créanme, eh vivido con el bastante tiempo y es todo lo que necesitan–

— Confío en tu palabra.–

✿↔✿

—¡Tae!...– la puerta era tocada insistentemente despertando al que dormía dentro de ella. Sentándose en su cama prosigue a levantarse y proceder a abrír la puerta.

En ella, su hermana mayor estaba del otro lado con una mueca y en sus ojos destellando preocupación que trasmitió al ser del príncipe.

— ¿Que sucedió JiHyo?– pregunta con un tono cansado y preocupado al mismo tiempo.

— Ve a controlar a tu bestia– grita.

—¿YeonTannie?, Pero el es inofensivo.–

— Si con inofensivo te refieres que casi mata a nuestros padres, sí, el perro ese es inocente.–

Cansado aún por la anterior siesta, decide ir a buscar a su mascota; sala, cuarto, baño, techo, puerta principal. No estaba.

El foco imaginario se le predio y se fue a buscar en el jardín, encontrándose que gruñia a cierto lugar. Cuando hace un sonidito para que venga, su cachorro de tigre se posa enfrente de el todavía gruñendo a la nada.

—De seguro te ponen pastillas en la comida...– murmura pensativo por la actitud que tomaba su compañero.

Algo llama su atención, la flor... Aquella flor que había sacado del cuarto se encontraba siendo plantada en ese jardín. Por el momento cubría la mitad de este.

Irritado por todavía los gruñidos que soltaba su cachorro, lo manda adentro, de vuelta a su cuarto privado.

—¡Mamá! – llama entusiasmado una vez va al comedor. Recibiendo un sonido dando a entender que le escuchaba —¿Desde cuándo empezaron a plantar aquella flor?–

—¿Que flor?–

—Las que están afuera!–

Su madre, dejando los papeles que sostenía en sus manos, va a comprobar lo antes dicho por su hijo.

Da un aviso a sus guardias y manda a Tae al cuarto nuevamente, y desde su habitación ve como arrancan aquellas flores tan hermosas.

“Que desperdicio” piensa recargada en el marco de su ventana.

Horas pasan después de aquello y esa misma noche su madre le daba la grata noticia de que va a ser comprometido. Genial.

Pero eso no se queda ahí, ho no. Hizo un escándalo que sus gritos llegaron hasta los pasajes mas secretosos del castillo. El único que pudo calmarlo fue YeonTan al lamerle su mejilla.

Al final, lo rechazo. Pero, lo obligaron igualmente.

Por suerte le dieron tiempo de guardar sus pertenencias ya que, un largo mes tendría que convivir con sus prometidos. Y lo aprovechó para guardar aquella flor en una maleta puramente aparte, puesto que, no lo dejaría hay.

Según le informaron, sus pretendientes son; Park ChanYeol, Kim Jennie, Park BoGum, Kim MinGyu y Jeon JungKook. De los demás se había podido sacar más información, pero del último en especial, no había nada, simplemente su reino se había ofrecido.

—Llegamos, su alteza.–

—Esto es una mierda–
Pronunció antes de bajar sin antes rechazar a su sirviente de llevar sus equipajes. Adentrándose a la residencia que por el momento sería su "hogar".

Su humor antes alegre y gentil se estaba llendo por la borda.