Ella se mira al espejo, mira cada parte de su maldito cuerpo hasta ver esos ojos azules que tiene, están desesperados , con miedo y dolor, esperando el mínimo amor para aferrarse, estaba tan dañada, quería escapar de todo
Se puso una gran remera grande sobre su cuerpo, No podía seguir viendo a alguien que no reconocía, ella no era de llorar, ella sufría en silencio, no era de hablar , su mente lo hacía por ella al recordar todos los comentarios que le dedicaba su desagradable hermana mayor, el odio que le demostraba con tan sólo mirarla, el dolor que le provocaba a ella era terrible.
Su padre, ella no tenía ni idea de que hacer, estaba tan triste en la oscuridad, deseo no abrir los ojos jamas, pensó, que hace meses le decía a sus padre de ir a un psicólogo, lo necesitaba, más que nada en el mundo, quería ser escuchada, al menos una vez.
Sus ojeras decían lo mal que lo estaba pasando, gritaban ayuda , nadie vino y eso fue lo más aterrador ¿Dónde están mis amigos? ¿Dónde quedó mi sonrisa? ¿mi felicidad?
Ella estaba tan jodidamente... perdida