Y cuándo sus ojos se juntaron con los míos, me perdí en ellos. Quería gritarle que lo amaba. Que me había enamorado. Y por primera vez una promesa que no me dolerá romper.
Era unos días de esos tranquilos en la ciudad, sin mucho que hacer.. Iba caminó hacia el Instituto, caminando claro papá decía que hasta que tuviera treinta años me compraría un auto, cruel? Sí! Pero igual amaba caminar...... Hasta que lo ví entrar...al chico que ponía de cabeza todo mi puto mundo siempre sonriente, caminaba muy seguro en cambio yo ahí estaba toda embobada prácticamente dejando un charco de babas por toda la entrada del Colégio. Y pensaba en mi mala suerte porqué jamás el me hablaría o almenos me mirará, bueno eso fue hasta hoy...Entre a paso lento, no es que fuera una loca espiandolo... Bueno la verdad si, si que lo era.
Llegué hasta mi salón el aún no había entrado así que me senté en mi lugar de siempre y entonces el entró buscando su asiento y era justo el que estaba a mi lado -mierda pense- entonses se acercó y me pregunto:
-Hola; tu pusiste esta silla acá? O solo amaneció ahi por accidente? -me dijo mirándome a los ojos, maldita mirada tan penetrante pensé.
-ammm. Si yo la puse -mentí totalmente nerviosa porque no sabía cómo hiba a reaccionar
-oh!Esta bien, entonces aquí me sentare junto a tí-dijo con unas de sus sonrisas, de esas que contagian y entonces supe que estaba jodida.
*y así transcurrió el resto de la clase en ocasiones me tachaba mirándolo ese día no recuerdo una mierda de la clase creo que era física,no recuerdo muy bien,lo que si recuerdo es que el sonreía por mi o al menos eso quería creer.
Tocaron la campana qué indicaba la hora de salida y sí, hiba más que feliz porqué por fin el chico que he estado enamorada desde hace mucho me habló no se si es razón para estar tan feliz ,aunque para mi si que lo era.
Supongo querrán saber un poco de mi bueno mi nombre es Sofía...
Espero les guste, es la primera vez que escribo una historia.
