Casi Casadas - Albalia - Natalba - OT 2018

Casi secuestradas

Marta, María, Natalia y Alba estaban en el salón ya listas para la supuesta fiesta de celebración de prometidas que les iba a organizar Marta. Natalia estaba embobada mirando a Alba que llevaba un vestido de tirantes y el pelo mojado hacia atrás. No pudo evitar soltar tras estar un rato mirándola: ¡Estás impresionante! a lo que su rubia le contestó: Gracias baby.

Marta estaba inquieta en el salón dando patadas al suelo y repitiendo una frase:

- Hey, Vamonoh todoh hey, everybody uh, uh, Día 8 de diciembre de 2018  a las 8h.

- Pero ¿qué haces Mary? ¿estás bien? - preguntó preocupada Alba.

- Animando el cotarro para lo que se viene. -contestó la morena sin parar de dar taconazos.

Llamaron a la puerta y Natalia fue a abrir pues como pasase otro segundo al lado de Alba con como estaba vestida le daba un chungo.

Al abrir la puerta se encontró a Miki.

- ¿Buscas a Alba? - preguntó la alta

- Sí .. no.. bueno... - respondió el chico. - Es que he visto una furgoneta extraña..

- Mira no me cuentes tu vida. Toma el puto tapón- respondió la de Pamplona y le cerró la puerta en la cara. Natalia volvió al salón como si nada.

- ¿Quién era? - preguntó la rubia

- No había nadie- contestó seria la morena mientras la miraba fijamente. 

- Oye pues últimamente llama mucha gente a casa y siempre dices que no hay nadie. - comentó la rubia.

- Suelen ser testigos de Jehová vendiendo polvorones. - mintió Natalia

- ¡Pero que dices?- Alba se empezó a reír. - Eso no tiene sentido nena. Mientes fatal.

El timbre volvió a sonar. Natalia que se había picado porque no sabía mentir le mandó a Alba a que fuese a abrir.

Unas personas encapuchadas agarraron a Alba y la sacaron en volandas por la puerta. Natalia se levantó a ver que pasaba pues había oído patadas y no eran las patadas voladoras de Marta pues esta seguía en el salón.

A ella también le agarraron y se la llevaron aunque con más dificultad puesto que se puso a morder a su atacante y a girar sobre sí misma para que no la agarraran. Parecía que bailaba ballet con la persona atacante.

Tanto Natalia como Alba intentaron luchar pero las ataron de pies y manos  y les pusieron un esparadrapo en la boca para que no gritaran. Las metieron en una furgoneta  y arrancaron. 

Alba y Natalia se miraban queriendo decirse de todo pero no pudiendo decir nada. Natalia quería decirle antes de morir que realmente se quería casar con ella de verdad y que la amaba. Al no poder hacerlo se emocionó y enterró su cabeza en el cuello de Alba. La rubia le cogió las manos y empezó a acariciarselas con dificultad pues tenía las muñecas atadas.

Finalmente, abrieron las puertas del coche. Una mujer con chaqueta de cuero y un casco de moto les sacó. Natalia a pesar de las lágrimas seguía intentando morder a su secuestradora así que la chica de la ropa de cuero las tumbó  a las dos en el suelo de gravilla.

-Pues ya estaría. Vamos a morir  - pensó Alba.

La mujer se quitó el casco y unos rizos castaños salieron dejando al descubierto a Julia.

- ¿Qué os creéis sirenas ahí en el suelo moviendo las piernas atadas? - dijo Julia con voz grave y de loca.

Natalia hizo la croqueta y agarrando a Julia intentó tirarla al suelo.