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— Mirá, está será la casa que tendremos los dos así podremos adoptar a los perros, gatos, aves o cualquier animal que quieras para cuidarlo entré los dos, seremos una familia muy feliz ¿Lo sabés no? — Su sonrisa se notaba entre sus mejillas y en su rosado labio con los ojos más brillantes y sinceros que alguien podría tener—

—Namjoon ¿Acaso podremos ser felices? ¿Que pensaran los chicos? ¿Y si en realidad sólo será un sueño? —

— ¿Tienes miedo entonces? —

— Es más que eso, no quiero perderte y mucho menos fingir que no te necesito — lo tome de sus mejillas, acariciando cada parte de su rostro sin apartar mi mirada—

—Luchare por ti, por cada momento y cada sueño de los dos — Tomo mis mejillas para besarme lentamente, sujetando con fuerza mi cabeza — siempre...—dijo entre besos — siempre...

Ese sueño era lo que siempre tenía en mente, cada mañana y noche que estaba en el hospital sin imaginarme el por qué seguía pensando en el sabiendo que no le importa en lo absoluto.

Pero esa mañana fue distinta al estar en la mansión del hermano de Namjoon, sentía la soledad absoluta en cada pasillo, en cada recamaras y ventana.

La soledad y frialdad entre las paredes eran de alguna manera incierta pues al mismo tiempo provocaba el despreció individual por esa casa.

—Sigo sin entenderte —Retrocedi un poco al escuchar los pasos de él—

—No tienes que hacerlo, sólo tienes que ayudarme a destruirlo, el hizo eso contigo, no tengas compasión—

— ¿Nunca amaste?—

—Me lo arrebató ¿Quieres saberlo?—

—No claramente...

— Cuándo teníamos quince años conocimos al mismo tiempo a una chica de la escuela, pero en realidad fui yo el que comenzó una amistad con esa chica, pero después de tanto tiempo de amistad pensó que siempre fuí Namjoon, así que cuando ella se le declaró a el todo se derrumbó, la rechazo por el simple hecho de que acepto ser homosexual —Tomo un sorbo de vino— Aquél hijo de perra arruinó a mi único amor después de que ella se quitará la vida —Mordio su labio— eso quería hacer contigo, pero eso le quita la emoción

—No es correcto, eso lo sé —Me senté en el sillón de la sala—

—Solo tienes que enamorarlo de nuevo, hacerle sentir que sigues estando tras su hermoso amor de novela —Se sentó enfrente mío —

— ¿Me matarás si no lo hago? —

—Algo peor, quizá tus amigos paguen en especial Jungkook —

—No te metas con ellos —susurré —

—Yo no me metí con ellos, al contrario el vino a mi en busca de la mejor droga sintética del país —

—No, te equivocas Jungkook jamás haría eso, jamás, aparte los chicos...—

— Los chicos se separaron después de que te internaras en el hospital, Yoongi y Jimin se separaron por qué el chico pálido golpeó a su chico perfecto, Jungkook al escuchar eso quizo golpearlo, después de tanto estar con Jimin el jamás le dió una oportunidad con el así que decidió el camino de la drogadicción — Susurró— ser el señor del  pecado en este mundo ayuda —

La sala estaba en un silenció total, aún no podía creerlo, el pequeño jungkook metido en drogas por un amor imposible, Yoongi golpeando a Jimin no cabía en mi mente, jamás lo haría.

—Jungkook me debe mucho dinero, si no colaboras el morirá en cualquier momento —

—Lo haré sólo por él, no se merece nada de esto, ya sufrió demasiado ¿En dónde está en estos momentos? —

— Con Namjoon, mi hermano cómo siempre siendo el ángel de todos ellos — saco un cigarrillo de su bolso— y también el estorbo para algunos, pero ya está el trato, inicias mañana regresando a tu casa — se levantó sin decir más, dejándome solo en la sala, con la oscuridad total de la noche —.

A la mañana siguiente la chica de limpieza me despertó desde temprano .

—Buenos días joven, por favor levántese el joven amo lo está esperando en el auto, sus cosas están en el auto ¿Quiere algo de desayunar?—

— Para nada, estoy bien —dije desolado— iré al auto, gracias por su amabilidad —Hice una reverencia para después retirarme de la sala y subirme al auto—

Era mentira, el no estaba en el auto, solo estaba el chófer a mi lado, sacando el auto del pasillo principal para manejar deprisa a Seúl, el trataba de hacerme plática pero yo solamente asentía con delicadeza, aún no sabía que tenía que hacer si de nuevo miraba a Namjoon, en realidad aún lo amaba, aún deseaba que sus manos pasarán por mi cuerpo y mi rostro, su aroma y su esencia me habían hecho tanta falta.

—Es aquí —Dijo el chófer estacionándose — sus cosas las dejaré en su departamento, esperemos que todo salga de acuerdo al plan, por favor no haga una locura como llamar a la policía o decirle al joven Namjoon de esto, no queremos que suceda una masacre—

— No te preocupes, no diré nada, todo saldrá de acuerdo al plan —

— Exelente jovencito, bajé y que todo salga bien — Asentí al bajarme del auto y enseguida arrancó con gran velocidad—

— Es el momento, carajo — susurré caminando hacia la puerta, quedándome pasmado por más de diez minutos decidí tocar — Jum...— Espere por varios minutos y nadie abría la puerta, así que volví a tocar con mucha más fuerza —

— ¡Un momento, por favor! — Era su voz, sabía que era su voz —

Trague saliva esperando a que el abriera, tardo un poco pero al abrir la puerta me miró de arriba a abajo —Jin...— Dijo sorprendida y al mismo tiempo confundido — no sabía que vendrías, más bien no sabía que querías verme —

— ¿PUEDO PASAR? — dije firme,
Casi gritando —

— Claro claro, perdón si está un poco regado, solamente no eh podido estar por un gran tiempo, hasta hoy — Sonrió sin ninguna pena, sin ningún remordimiento —

— Tienes razón, tienes que limpiar más —

—Regrese de Busan, llegue después de ver a Jimin, el a tenido un poco de problemas en este tiempo —

—Entiendo — susurré dejando mi bolso en la mesa sin mirarlo —

— Yo, quería decirte...que yo en serio lo lamentó —

— ¿Que estás lamentando? —

— El simple hecho de perderte hace tiempo — se puso detrás mío

Gire mi cuerpo para mirarlo, el tenía su cabeza agachada sin mirarme.

—Levanta esa mirada—

—No puedo—

—Levantala —

—Jin — levantó su rostro para mirarme a las ojos —

— Yo...— antes de que dijera una palabra lo tome de las mejillas para besarlo, el continuo con el beso cada ves más intenso, me tomo de mis caderas y me subió a la mesa — ¿Q-ue carajos haces? — Namjoon sorprendido me miraba con lujuria y al mismo tiempo remordimiento

—Quiero que me cojas, házme el amor como nunca antes...— Lamí su cuello —

— ¿Por qué lo haría? — dijo exitado —

—Por qué me deseás, por qué quieres darme tan duro como yo quiero, por qué me amas, por qué me extrañas—

"El dolor de tu gemir " (Segunda Temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora