No solía ir a fiestas muy seguido, no estaba acostumbrada, la chica había venido aquí ya que su mejor amiga le había insistido por semanas, no podía oponerse a la idea ya que el motivo de la celebración era por su cumpleaños.
Nayeon se divertía, a su manera, se había concentrado en ver a la gente que entraba y salía, gente que nunca había visto pasar ni por el campus, miraba a los individuos entrar e ir directo a la barra para beber. No sería sincera si dijera que se entretenía al hacerlo, pero no tenía nada más que hacer, no sabía como entablar conversaciones con gente ajena a su grupo ya que nunca le había interesado antes, y ahora tampoco era de su interés.
La joven coreana tenía 23 años y nunca había tenido una experiencia emocionante en su vida, además de estudiar medicina y ser la mejor alumna de su generación.
−¡Nayeon! ¡Ven pa' acá! ¿Que hací allá sola? −La aguda voz de la dueña de casa se había hecho notar por encima de la música que sonaba de fondo.
La castaña se levantó de su puesto y se acercó a Sana, quien estaba soltando carcajadas con las que al parecer eran sus compañeras de clases.
− ¿Que estabas haciendo ahí solita? − Sana le acercó un vaso, era obvio que haría beber a la mayor.
−Nada... Ya me quiero ir para mi casa. −Nayeon suspiró y se dejó caer a su asiento.
−Pero si hace poco empezó.−Sana tomo el brazo de la coreana y lo aferró a su persona.−No te vayas, quédate un ratito al menos.−La chica sabía cómo convencerla, Nayeon odiaba cuando la intentaba convencer mirándola, intentado ponerle caras similares a los animalitos más lindos del mundo.
Suspiró.
−Ya bueno. −La mayor rodó sus ojos.
Puso la pequeña copa entre sus labios y tomó un respiro antes de empinarse el líquido que llevaba.
Sabia horrible.
Suponía que los jóvenes beben este tipo de cosas para no estar excluidos del resto.
Nayeon se torturaba mentalmente, pensaba que se estaba envejeciendo a propósito, no podía permitirlo, la coreana era muy bonita para eso, o eso pensaba.
− ¡Dame otra! −Le exigió al barman que estaba cerca de aquella mesa.
− ¡Eso! −Sana se sumó a las intenciones de su amiga.
Nayeon ya no podía aguantar, realmente sentía que tenía un sabor horrible.
−Ah, ya no puedo más.−Dejó el vaso a un lado.
−Nayeon... Te tomaste uno y medio... ¿Que hablai?
−Ya, déjame si me dolió el estómago.
−Ya... − Sana la había quedado mirando poco convencida. − Me das un jugo de naranja por favor.−Se dirigió al chico quien servía los bebestibles.
Sana al recibirle el vaso al barman se lo acercó, sabía que a su amiga le gustaba.
−Gracias.−Tomó la bombilla y comenzó a tomar jugo.
−Eres graciosa Nayeonnie.−Sana comenzó a reírse de la nada, era obvio que se burlaba de la poca tolerancia al alcohol de su amiga.
No dijo ninguna palabra, solo se concentró en su jugo sin ver en estado en que su amiga había quedado.
−Ay... así es...−Sana seguía hablando con personas al azar que llegaban a su casa.
−¿Ya cuántos llevas?−La castaña se preocupó al ver que la japonesa se ladeaba de un lado a otro.

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ILLEGAL [NATZU]
FanfictionNayeon una chica universitaria de 23 años que creía que no encajaba con los jóvenes de su edad, decidida a evitarlo, sin querer, comete un grave error. -Natzu (Principal) -Modismos Latinos especialmente Chilenos. ONLY IBUUKIM