Brave Frontier ( La última esperanza)

ANEXO III Agua y Trueno renacen

Un hombre corría por el bosque, otros tres hombres le perseguían. La persona que estaba siendo perseguida sabia lo que había sucedido, pero no sabia que iba a suceder así.Exhausto y cansado, el hombre se tropezó con una rama que sobresalía del suelo.

"Justo ahora que ya no tengo poder suficiente como para luchar" pensó el hombre.

Los que le perseguían dijeron:

- Ya no tienes escapatoria, Lectro.

- No creas que va a ser fácil de derrotar a un héroe del Trueno- respondió Lectro, impasible

Después de haber dicho esto, de sus manos brotó una onda eléctrica que le robó todo el poder que le faltaba. Esta onda era tan fuerte que incineró a los tres perseguidores de golpe.

" Se nota que sigues manteniendo tu forma, ¿no Lectro?" dijo una voz en el interior de Lectro.

Automáticamente, el espíritu de Lectro se adentró en el lugar de donde provenía aquella voz

" No me provoques Eze" dijo Lectro.

" No me culpes, sólo es un cumplido"

"Antes, mientras me perseguían, te dije que me prestases parte de tu poder y no me hiciste caso"

"No es que te hubiese hecho caso, pero es que después de que usases mi Espada del Trueno me dejaste casi sin poder"

Lectro se quedó callado.

"No creas que vas a estar siempre conmigo" dijo Lectro después de un rato

"¿Que insinúas?"preguntó Eze

" ¿No te has enterado? Voy a tener una niña"

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- Ahora mismo vuelvo Zayla- dijo una mujer rubia que vestía una blusa dorada- Quiero que cuides de mi hijo. Ya sabes lo que pasa cuando se enfada.

-No hace falta que me lo digas,Elga- dijo la otra mujer que llevaba un vestido negro.

Ambas intercambiaron una sonrisa de complicidad.

Cinco minutos después, Elga se montó en su caballo y se fue al Bosque Sombrío. Una vez allí, fue hacia una casa de madera en la que entró y dijo:

- Merith, soy yo, Elga

No hubo respuesta.

-¿Merith?

Tampoco hubo respuesta alguna. De pronto, apareció una chica que aparentaba los 20 años

- Hola Elga- dijo la mujer

- Hola Merith

-¿Que es lo que quieres?

- Saber el futuro de mi hijo

- Ya te he dicho que no soy como mis hermanas. Soy la única que heredó los poderes de mi madre.

- Pero tienes algo que pueda decirlo

Merith quedó un rato pensativa y luego respondió:

- No muy lejos de aquí, hay un lago donde en medio de éste se alza un templo en medio del lago. No se ve a primera vista ya que necesitas ser o una criatura acuática o alguien que domine el elemento Agua.

- Muéstrame el camino

Cuando dijo eso, el bastón de Merith se iluminó y de él salió un haz de luz azul que le indicó el camino para llegar al lago

- Buena suerte, Elga- dijo Merith

- Hasta pronto- respondió Elga mientras espoleaba a su caballo. Luego, se perdieron en la oscuridad solamente iluminados por el haz de luz azul del bastón de Merith

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- Presiento que algo raro pasa en mi casa- dijo Lectro

"Lo que pasa es que has dejado a tu mujer sola y, con lo impulsiva y nerviosa que es, habrá ido al templo del lago para saber unas cuantas cosas sobre su hija" dijo Eze en su mente.

-¿ Cómo sabes...?

" Detecto en tu futura hija un aura sobrenatural. Mi consejo es que vayas con tu esposa"

- ¿ Qué crees que voy a hacer?- exclamó Lectro

Rápidamente se teletransportó al lago

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Elga entró en el templo, estaba dispuesta a asumir el futuro de su hija pero había algo en su interior que le decía que no. Avanzaba lentamente. De pronto, de la nada apareció un destello de luz que se disolvió al instante para ver al hombre que estaba dentro de el destello.

- Lectro...- susurró Elga

- No preguntes sobre el futuro de nuestra hija- respondió autoritariamente Lectro

- Pero quiero saber...

- Yo también, pero no de esta manera. Quiero que tengamos con nuestra hija una vida feliz, sin llenarnos de preocupaciones. Ya le preguntamos por nuestro hijo, Eze y nos asustó tanto que no quise acercarme a él. Al principio pensaba que sería real, pero luego decidí querer estar con el por lo menos hasta que se cumpla lo que dijo.

Ambos se miraron.

- Vale,- dijo Elga al fin- esta vez no consultaré nada.

Ya en su casa, Lectro preguntó a Eze(espiritú):

- Antes me has dicho que mi hija emana un aura sobrenatural, ¿ por qué?

"¿ Te acuerdas de la historia de los Seis Héroes?"

- De algo me acuerdo

"Pues bien, el aura que e percibido en tu hija es nada más y nada menos que el espíritu guerrero de Lexida"

- Vale...

Y se desmayó