Corría con toda las fuerzas que tenía mientras escuchaba esa escalofriante risa tras de ella. Sus ojos estaban llenos de lágrimas y se regañaba a sí misma por ser tan estúpida y creer que podía contra alguien como Ivan.-¡Chingada madre!- Grito cuando noto que el ruso la había llevado a un callejón sin salido. Lágrimas se acumularon en sus ojos cuando sintió su perversa presencia tras de ella.
-Itzel, no hay lugar para esconderte- temblaba de pánico buscando algo con que defenderse, tomó una barra de madera que estaba tirada en el suelo y se volteo para encararlo. Nada, literalmente no había rastro del gigante platinado por ningún lado.
-¡¿Que?! - susurro con los ojos como platos y soltó el palo pero nada más bajo la guardia unos fuertes brazos la envolvieron desde atrás y una mano le tapó la boca.
-Seremos felices Itzel, muy felices- su voz sonaba alegre pero podía encontrar tintes depravados en ella.
Todo de volvió oscuro para la mexicana después de eso.
Ella era suya y ya nada ni nadie podría evitarlo.
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Espías, Acosadores, Asesinos Y Otros Locos.
Hayran KurguSi lo amas... JAMAS dejes que escape de ti.