Otro punto de vista

18 de Agosto

Hace una calor terrible hoy, el sol me ciega cuando me despierto y necesito un momento de descanso para poder empezar el día, pero oigo que me llama mi mamá desde la cocina, voy corriendo a ver que quiere y al entrar allí está, esperándome con una gran sonrisa y la bandeja del desayuno en la mano, de verdad que no hay nadie mejor que ella en este mundo, la quiero de verdad.

Aunque hoy parece un poco inquieta, no se que le pasara, pero prefiero ver que hace, así que la sigo todo el tiempo y como siempre conmigo es amable y buena, asique dejo de preocuparme, simplemente se encontrara un poco mal, intentare estar cerca por si necesita algo.

Después de un rato de estar jugando, pasa a la habitación donde yo estoy y simplemente dice con una voz aguda y sin fuerza "nos vamos pequeño"

Y yo como siempre le digo que vale, porque me encanta acompañarla siempre que sale de casa. No tardamos mucho en llegar pero si en bajar del coche, sigo sin entender qué le pasa. Al fin bajamos y mucha gente le espera en la puerta del sitio, con caras tristes y lágrimas en los ojos, a mi apenas me miran ya que al ser pequeño todos me ignoran y solo están con ella.

Pasamos al sitio, un lugar bastante frío donde nunca había estado y una mujer entera de blanco se acerca y le dice que yo no puedo entrar, creo que soy muy pequeño o quizá sea un sitio privado donde solo pueden entrar los que se conocen, quien sabe, mi mama se gira y me dice "espérame aquí, no tardaré mucho lo prometo". Yo no contesto ya que me mata verla sonreír con la cara llena de lágrimas solo por tranquilizarme, asique le sonrío forzadamente y me quedo en el sitio.

Al cabo de un rato esperando al fin la veo caminando por el final de ese pasillo interminable, viene con mi papá, no me lo creo, llevaba tanto tiempo sin verlo que estaba muy preocupado, ambos vienen llamándome y yo no puedo esperar de la emoción así que salto a sus brazos y le abrazo, hacía tanto que quería hacerlo, jo, como le echaba de menos. Mi mama se mantiene distante pero feliz, al fin le veo sonreír de verdad y ya me quedo tranquilo al fin.

Estamos un rato, ellos hablan de sus cosas pero mientras me tiene entre sus brazos y yo asi ya estoy bien, no necesito nada más en ese momento.

Pero después tiene que volver, creo que algo malo le pasa y le están curando, por eso ha estado tanto tiempo fuera de casa, no quiero pensar nada malo, y ya que mama no me quiere preocupar nunca ni contarme nada simplemente espero que vuelva a casa cuando este mejor, cuento cada dia, y espero que sea pronto.  Y después de una fría despedida volvemos a casa. 

Pasan y pasan los dias, no soy alguien a quien le sea fácil despertarse, pero siempre después de un rato al despertarme lo primero que hago es correr escaleras abajo a ver si ya ha llegado mi papa, pero aun sigue en ese enorme y frío lugar. 

No entiendo nada, mamá cada día está más triste, hoy ni me ha despertado para desayunar juntos, imagino que será porque está preocupada pero no quiero verla asi, sea por lo que sea, me duele y no entiendo nada.

Hoy ha sido un dia genial, me he ido con mis primos al campo, hemos jugado toda la tarde, siempre acaban peleando y tengo que ser yo el que ponga orden, soy el mayor de todos y mi mama me mira orgullosa cada vez que hago que paren, eso me encanta. Nunca le quiero dar más problemas de los que tiene, ella me cuida como nadie.

De repente mi tía sale de la casa, ella es muy nerviosa, pero esta vez era algo exagerado hasta para ella lo nerviosa que estaba, llama a mi mamá y entran en la casa, todos nos quedamos mirando que pasa pero no dicen nada, entonces mi mama sale temblando, casi no se tiene en pie, no para de llorar y gritar, solo grita "no" todo el rato, es como si no quisiera que algo pasara, no sé qué le habrá dicho mi tía pero las dos están mal desde entonces.