Quieres ser mi novia?

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Rachel y Kurt habían cultivado una gran amistad con la rubia además le  estaban muy agradecidos  ya que había logrado que la Santana arrogante, fría, agresiva y mal humorada se convirtiera en una persona totalmente diferente, llena de alegría, llena de nuevos sueños, ilusiones, en fin Santana ahora estaba llena de vida.

Durante 7 meses Tiffany se dedicó a conquistar a la morena con sus detalles, con sus locuras, con su forma de ver la vida, la rubia jamás había sido una persona romántica pero Santana había roto sus esquemas no importaba donde estuviera o que tan ocupada se encontrara, siempre tenía tiempo para pensar en su hermosa morena y en cómo sorprenderla, y así fue como entre cajas de chocolates, flores, cartas de amor, salidas al cine, al parque de diversiones, a bailar entre otras cosas pudo hacer suyo el corazón de Santana.

FLASH BACK

Luego de un largo día de estudio Santana se sentía muy cansada y tenía una jaqueca terrible, así que decidió tomar unas pastillas para dormir, lo único que quería era descansar; antes de cerrar sus ojos tomó su celular para revisar su mensaje de buenas noches que a diario le mandaba su rubia, una vez lo revisó simplemente  cerró sus ojos y durmió.

Eran las 4 de la mañana aproximadamente cuando Rachel y Kurt entraron gritando a la habitación de Santana y sin darle tiempo a nada la sacaron de su cama, la morena no entendía nada además no podía hacer gran cosa ya que gracias a las pastillas que había tomado todavía estaba un poco adormilada. Kurt se encargó se sacar a Santana de la casa  y meterla en el auto mientras que Rachel cargaba la pequeña maleta que metió en la cajuela del auto.

Los rayos de sol comenzaron a molestar a Santana provocando que esta se levantara, se sorprendió cuando se vió  en el asiento del auto, con pijama, la verdad es que no recordaba casi nada de lo ocurrido la noche anterior pero su sorpresa fue más grande cuando al bajarse del automóvil se encontró en la playa  y a Tiffany a un lado del carro.

S: qué hacemos aquí -preguntó confundida-

T: hola hermosa, veo que despertaste –dijo con toda la naturalidad posible-

S: así es, pero que hacemos aquí –dijo curiosa- es otra de tus locuras –decía sonriendo –

T:  si, talvez sea una locura más .decía sonriendo- por cierto me encanta tu pijama de ositos –dijo haciendo sonrojar a Santana-

S: mm este gracias –dijo avergonzada totalmente-  y Kurt y Rachel?

T: de seguro estarán aún durmiendo en New York, ellos no vinieron solo me ayudaron para traerte aquí.

S: desde cuando estas aquí afuera?

T: desde hace una hora, estaba adentro observándote dormir, por cierto te ves hermosa durmiendo, haces unos gestos tan adorables, hubiera querido quedarme allí hasta que despertases pero quería pensar en ciertas cosas –dijo mientras miraba al mar –

S: en que cosas, si se puede saber?

T: cosas hermosa solo cosas, ahora vamos al hotel, tenemos que desempacar, es solo un fin de semana así que tenemos que disfrutarlo al máximo

S: hotel? No traje efectivo Tiffy –decía apenada-

T: ohhh no no, no te preocupes está todo arreglado, esto lo pagará mi primer sueldo –decía emocionada- ahora vamos

Santana estaba encantada, amaba las escapadas que la rubia planeaba y como siempre solo se había dispuesto a disfrutarla.

T: Tenemos muchas cosas que hacer este fin de semana, pero hay algo especial por lo que te traje aquí

S: que cosas, cuéntame Tiffy 

T: ya lo verás, ahora primero tenemos que desayunar princesa – dijo mientras habría la puerta de la habitación que había alquilado para ese fin de semana, la habitación no era de lujo pero si era hermosa, estaba en el 6 piso y  tenía grandes ventanas con vista al mar.

Los años pasan, la gente cambiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora