Narra *****:
Me tuve que sentar fuera de la oficina mientras mi jefe hablaba con el chef egocéntrico, odiaba estar en esta situación, me sentía como niño esperando a ser regañado por el director de su escuela.
De repente entró la secretaria y se sentó en su escritorio, comenzó a meterme conversación, puesto que yo ya había hablado con ella pero de forma externa al trabajo.
Le conté la situación
- como odio a los familiares que no saben seguir instrucciones, pero también te pasaste con esa reacción. - dijo ella
- se supone que debo dejar que me traten mal solo por el alto nivel de ego de ese hombre?
- se supone que debes respetarlos
- yo entrego lo que se me da, respecto por respeto, odio por odio, no hay mejor ley de vida - dije haciendo un gesto con las manos
- y ahora quién es la egocéntrica?
- silencio- miré en dirección a la puerta y ambas quedamos calladas.
En ese momento mi jefe abrió la puerta y me pidió que pasara
La oficina era espaciosas y con gran vista, todo muy ordenado. Tenía un computador en el escritorio, atrás del escritorio había una gran ventana que permitía ver en dirección a la calle.
Frente al escritorio se encontraban dos sillas, de las cuales, una estaba ocupada por el chef egocéntrico.
- por favor tome asiento- seguí su orden y comenzó a hablar-
.
.
.No podía creer lo que estaba pasando
Como odio a ese sujeto
Yo no fui la responsable de lo ocurrido!
Y termino "castigada" yo...
Aunque al menos, él no se veía muy feliz con lo que al final pasó... Ninguno de nosotros dos está contento con la conclusión final...
Salí de la oficina de mi jefe a paso veloz, mi cara reflejaba la enorme molestia y rabia que sentía en ese momento, la secretaria nisiquiera me intento detener para preguntarme que era lo que había pasado, asumo que mi cara reflejaba todo.
Sin siquiera esperar al chef egocéntrico o a mi jefe, me dirigí a la sala de descanso.
A medida iba caminando hacia la sala de descanso, podía ver cómo la gente me miraba asustada al ver mi cara, si que debo tener una cara de demonio en este momento.
Entre a la sala de espera y me encontré ni más ni menos con el doctor Andrés Roberts.
- Te despidieron?- dijo al tiró al mirarme, no le respondí, solo me dirigí al lugar en donde guardaba mis cosas- te despidieron? - volvió a insistir
- si que me tienes fe - le dije sarcásticamente sin voltear a verlo mientras guardaba mis cosas
- no es eso, solo que tu cara muestra que te despidieron
-bueno, para tu desgracia y para la mía, ni me despidieron, AUNQUE HUBIERA PREFERIDO ESO! - me puse a gritar de rabia y a golpear mi bolso, para luego al calmarme y sentarme
Andrés me quedo mirando un momento
-no pensé que siguieras asiendo berrinches a esta edad...
-no son berrinches- dije mirándolo mal
- entonces qué es lo acaba de pasar?
- un desahogo de rabia porque no lo podré hacer después.
- entonces... Cuál fue el castigo que te han impuesto? - pregunto tal escuchar mi afirmación.
Narra Shinomiya:
NO ES NO! NO QUIERO! ELLA NO!!!
ME NIEGO ROTUNDAMENTE!!
COMO ES POSIBLE QUE YO! ESTANDO PAGANDO PARA QUE CUIDEN A MI MADRE, HAYA TERMINADO EN ESTA SITUACIÓN?!
Bien... Debo calmarme.... Tengo que hablar con mi madre para que ella esté enterada de la situación
Y además... No la quiero alterar.
Me dirigí al baño para mojarme la cara para poder estar más tranquilo.
Me mire al espejo e intente manejar más mi cara para que se viera como si nada me molestaría ... Algo difícil cuando estás indignado.
Salí del baño y me dirigí a la habitación en donde se encontraba mi madre, pero antes de entrar me encontré a la doctorcita con sus cosas llegando a la puerta de la habitación de mi madre
Nos quedamos mirando por un momento en silencio, su cara de rabia no la lograba ocultar.
Debo admitir que la chica no es fea, es más, es bastante atractiva, pero es bastante insoportable, su actitud... No de qué es, pero me molesta, es como si todo en su vida fuera fácil y este hubiera sido su primer problema, detesto a la gente así, que tiene todo en bandeja de plata.
Seguíamos en silencio mirandonos, no sabría decir cuál de los dos tenía más cara de rabia, hasta que ella interrumpió
- creo, que si va a tener que pasar esto ahora, deberíamos comportarnos como los adultos que somos y no generar más discusiones, por el bien de su madre. - dijo con calma, pero su cara de estar deseando decir otra cosa no la lograba ocultar
- Yo no le hago caso a niñitas que juegan a ser doctoras- le dije y la provoque, ví como su cara y ojos deseaban mi muerte, pero no dijo nada para defenderse, en cambio dijo otra cosa
-bueno, Entonces si será así, quisiera informarle que yo haré mi trabajo, y si usted se llega a entrometer me encargaré de hacerle la vida imposible
ME ESTABA AMENAZANDO LA PENDEJA?!
QUE MIERDA SE CREE?!
Mi rabia aumento, más al ver la sonrisa en su rostro después de decirme esas palabras.
Le iba a responder, le iba a gritar, hasta que de repente vi la puerta del cuarto de mi madre abrirse.
La atención de ambos se dirigió hacia la puerta con una gran sorpresa
- señora debería estar en reposo!- dijo la niña sujetando a mi madre para luego intentar volver a llevarla al interior de la habitación, a lo que también sujete a mi madre y la intente ayudar
-disculpe- dijo mi madre mientras la sentabamos y recostabamos en la cama- es que escuche gritos afuera de la habitación
Iba a decir algo, pero esa chica se me adelantó
-Señora, no se preocupe, usted debería descansar y no preocuparse por nada más
- Ay doctora, muchas gracias, pero no quiero que mi Kojiro este causando problemas, no sé si se haya dado cuenta pero es bastante insoportable a veces
No podía creer lo que estaba escuchando... Mi madre acababa de hablar mal de mi frente a esa enana?! Y la acaba de llamar doctora?!
Y más encima que esa mocosa se estaba riendo y conversando con mi madre!
Y lo peor! LO PEOR! Es que no podía decir nada! Para no alterar a mi madre!!
- No se preocupe señora, su hijo ya es adulto y debe ser responsable de sus acciones -dijo entre risas esa mocosa mientras hablaba con mi madre
Mi madre al menos estaba entretenido riendo, y yo... Bueno... Me sentía ridiculizado y enojado
- Pero doctora, porque está con un bolso? Paso algo? -pregunto de repente mi madre a lo que yo tomé atención a ver qué era lo que le respondía, listo para defenderme en cualquier caso.
-ah! El bolso, es que, bueno, ti desde ahora en adelante, seré su doctora privada, desde ahora solo cuidare de usted hasta que esté mejor.
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El chef y la Doctora (Kojiro Shinomiya- Shokugeki No Soma)
FanfictionLos mundos opuestos muchas veces se pueden unir, pero hay veces que no se separan #Esta historia contiene a los personajes y una parte específica de Shokugeki no Soma, pero después, la historia sigue otra realidad.