City of Angels (Magcon)

Capítulo 3~

*Narra Hayley*

Al entrar inmediatamente nos tapamos los ojos, mi hermano y su asquerosa novia estaban a punto de tener relaciones.

En el sofá.

-BUSCAROS UN HOTEL -Grité.

Al darse cuenta de nuestra presencia, abrieron los ojos como platos para a continuación irse al piso de arriba.

-Que agradable tu hermano... -Dijo Sam que estaba aguantándose la risa. Nos miramos y a continuación estallamos en carcajadas.

-Sí, y...ESPERO QUE NO HAGAN NADA MIENTRAS QUE NOSOTRAS ESTAMOS AQUÍ -Dije gritando la última parte para que pudiera escucharme.

-Vamos a mi cuarto anda -Le dije a Sam, ella asintió y se dispuso a seguirme por las enormes escaleras que se encontraban en frente nuestra. Abrí la puerta de mi cuarto y entramos. Yo me senté en la silla de mi escritorio y Sam se sentó en el borde de la cama observando cada detalle de mi habitación lentamente.

-Me gusta tu habitación- Dijo sonriente.

-Gracias -Le sonreí de vuelta.

Mi habitación no era nada del otro mundo. Tenía las paredes moradas con muchos posters de mis bandas favoritas; 30 Seconds To Mars, Pierce the veil, Fall out boy... una gran ventana al lado derecho y un baño en el lado izquierdo.

Pasamos la tarde conociéndonos más.

-¿Tienes hambre? -Pregunté.

Cuando Sam iba a responder su móvil empezó a sonar, pude reconocer rápidamente "Sleepwalking" de Bring Me The Horizon como su melodía de llamada.

-¿Si?¿Theresa? -Respondió a su teléfono curiosa.

Estuvo hablando con esa tal Theresa mientras que yo traía algunos aperitivos. No se le veía muy conforme mientras hablaba.

-Pero Tess, ni siquiera se quiénes son esos chicos... de acuerdo... ¿Puedo traer a una amiga? -Prosiguió mirándome fijamente.

-Eh, espera, ¿Qué? -Exclamé confusa.

Acto seguido Sam se despidió, colgó la llamada y me miró con su mejor cara de cachorrito en apuros.

-¿A dónde debo ir? -Dije resentida.

A Sam se le formó una sonrisa en la cara y continuó.

-Pues veras... Una amiga mía, es decir, una de las dos que tengo, contando contigo, iba a ir a algo así como un ¿Maccon tour? ¿Magcan tour? ¿Magcon tour? Bueno algo así. El caso es que iba a ir con tres amigas pero dos han tenido problemas y no van a poder acudir por lo que... ¿Vienes? -Exclamó rogándome con la mirada.

-¿Magcon tour? ¿Qué es eso? -Dije confusa.

-Yo sinceramente no lo sé, pero ¡vamos!, ¡seguro que será divertido! -Respondió inocente.

A mala gana acepté por lo que resulta que este mismo sábado ya tenía planes. Sam me habló sobre su amiga Theresa, o como ella llamaba, "Tessa". Me contó que esta practicaba yoga y muchas veces había ido a visitarla y la había encontrado en poses realmente extrañas. El resto de la tarde nos la pasamos charlando y comiendo los aperitivos que había traído (y el resto de mi nevera) hasta que mi padre llegó y al rato Sam se tuvo que marchar.

*Narra Sam*

Mi despertador sonó como todas las mañanas a diferencia que hoy si llegaría al instituto a su hora (o al menos eso intentaría). Abrí mi armario y decidí ponerme una larga camiseta de nirvana y unos leggins rotos dado que hoy quedaría después de clases con Hayley y Tessa para comprar algo que usar mañana Sábado. No es que me apasione ir de compras, pero creo que si Tessa me llega a ver con una camiseta de AC/DC puede estar escupiendo en mi bebida durante meses y sinceramente, no me apetece eso. Cuando llegué al instituto me encontré a Hayley peleando con uno de los chicos más estúpidos del instituto.

-¿PERO DE QUÉ VAS IDIOTA? -Gritaba ella mientras el se agarraba sus partes en señal de que alguien había recibido un buen golpe ahí. 

-¡VUELVE A TOCARME Y TE PROMETO QUE TE DEJO SIN DESCENDENCIA! -Añadió esta.

-¿AH SI? ¿Y COMO LO HARÁS? -Continuó él.

Todos estábamos mirando aquel espectáculo algo extrañados hasta que Hayley gritó.

-¡COMO MEJOR SÉ HACERLO! -Y seguidamente le plantó otra patada en sus preciadas partes.

El chico se retorcía en el suelo mientras que la maldecía con palabras que era incapaz de distinguir. En ese momento Hayley me vio y con una sonrisa satisfactoria se acercó a mi.

-¿Puedo preguntarte que le has hecho a Chris? -Dije burlona.

Seguidamente me guiñó un ojo y ambas estallamos a carcajadas en dirección a clase de Arte. Esta era una de las pocas clases (por no decir la única) a las que, en mi opinión merecía la pena ir.

Hayley y yo salimos corriendo de nuestra última clase del día, Tecnología. (La cual el profesor se pasó toda la hora regañándonos). Nos dirigimos al centro comercial, donde nos esperaba Tessa con una gran sonrisa. Esta tenía una larga melena rubia, la cual le llegaba por la cintura y unos grandes ojos grises que impresionaban a primera vista. Presenté a Hayley y Tessa nos llevó a rastras a la primera tienda de una lista muy larga. Cuando íbamos por la décima tienda empecé a notar que mis piernas empezaban a flaquear, había estado toda la tarde probándome vestidos y al igual que Hayley que se encontraba tumbada en el suelo de esa tienda, ya no podía mas. En ese momento ví a Tessa traer dos vestidos. Uno blanco para mí y otro negro para Hayley. Al verlos Hayley se reincorporó realmente pálida (más de lo que era).

-Espera, en mi vida me he puesto un vestido. No voy a empezar a hacerlo ahora -Dijo asustada a lo que yo le di la razón.

Después de veinte minutos de suplicas y protestas salimos de la tienda bastante enfurruñadas y con bolsas en las manos. Al final quedamos en la condición de que nos lo pondríamos si a cambio nos dejaba llevar converses. No se como Tessa siempre podía salirse con la suya.

Tessa haciendo yoga en multimedia:33