Mellizos Byun [ChanBaek]

Prólogo.

Baekhyun como todo muchacho común iba a la universidad en la cual estudiaba enfermería. Todos los días y durante sus años de estudio siempre se encontró rodeado de mujeres, pues por razones que desconocía era una profesión tomada mayormente por chicas y justamente entre todas ellas fue donde conoció a la futura madre de sus hijos.

Kim Hayun era una mujer hermosa y bastante aplicada, estudiaba enfermería al igual que Baekhyun, y gracias a una tutoría que impartía la alumna se dio su primer encuentro. Después de eso no tuvieron que pasar muchos meses para que iniciaran una relación. Se llevaban fantástico, se complementaban en sus estudios, se amaban mucho también, pero todo se empezó a desmoronar con la noticia de la llegada de un bebé.

Hayun era una chica muy estudiosa y como tal quería llegar muy alto; viajar, estudiar postgrados y futuros magíster, ser la directora de un gran hospital en un futuro brillante, y porque conocía sus metas se cuidaba demasiado. Ella era muy cuidadosa al tomar sus pastillas anticonceptivas, también durante sus relaciones sexuales siempre le exigía a Baekhyun el uso de condón, pero no supo cómo de igual manera había quedado embarazada.

De cierta forma el mundo se destruyó completamente para ella, así pensaba en ese entonces. Culpaba todos los días a Baekhyun, en cada momento le recriminaba sus culpas, excusas jamás le faltaron y durante ese tiempo el chico solo bajaba la cabeza creyendo y pensando que superarían esta prueba.

Al pasar de los meses Baekhyun notó que la situación parecía mejorar, sin embargo, Hayun seguía en su constante tristeza y cuando los dos fueron a aquel control con el obstetra, se les informó que no era un bebé sino dos, y allí fue donde la bomba explotó.

— ¡Dos Baekhyun! ¡Dos! ¡Dos! ¿Qué voy a hacer con dos hijos a los 20 años? Solo tengo 19 —lloraba la pelinegra—. ¿Qué pasará con mi futuro? ¿Con mis viajes? ¿Por qué a mí? —sollozaba desconsolada.

Baek no estaba mejor, él también era joven y ya tener dos hijos de una sola vez era algo que lo dejaba sin habla, pero él estaba dispuesto a salir a delante y dar todo por su futura familia. Las semanas pasaron y finalmente supieron que iban a ser dos niñitos, al chico le hacía mucha ilusión enseñarles las cosas que le gustaban a él, arrullarlos en sus brazos y ver sus primeros pasos.

Finalmente, el día del parto llegó, fue en la tarde de un 6 de marzo en la que nacieron los bebés Seojun y Seoeon. Se suponía que tendría que ser un día mágico, feliz, esperanzador y lleno de vida, pero lamentablemente no fue así. Hayun no mostró interés alguno en los bebes, no los quiso ver después del nacimiento, no les dio de amamantar, ni siquiera tocar logrando un total desapego. Después de eso los bebés vivieron con ella, pero era su abuela la que los arrullaba y daba de beber fórmula. Baekhyun iba a visitarlos todos los días para pasar más tiempo con ellos mientras la anciana observaba con tristeza y silencio como su hija se desligaba de los mellizos.

La chica a pesar de todo siguió estudiando, siguió aplicándose, por lo que consiguió una importantísima beca en el extranjero, además de la posibilidad de trabajar allá permanentemente. Baekhyun pensó que sería una gran oportunidad para ella y para todos trasladarse a un nuevo horizonte, se sintió capaz de dejar atrás a su familia por ella, pero fatal fue su reacción cuando la chica le dijo que había aceptado la beca y se iría sola. Su mundo se derrumbó, pensó en los bebés, en su destrozado corazón.

—Pensé que nos iríamos los cuatro, ¿qué te pasa Hayun? N-no es gracioso

—No me pasa nada y tampoco estoy jugando, te lo dije claramente, me gané una beca

— ¿Y tus hijos? —preguntó con dificultad.

—Los hijos se hacen de a dos, los cuidarás tú, para eso estás. Ya lo decidí, Baekhyun, pasé tanto tiempo postergándome por los demás que ya es hora de pensar en mí misma, así que cuando quieras te firmo la tuición