Me enamoré de la chica nerd #I

CAPÍTULO 54:Te quiere: Papá.

Dos semanas después...

-¿Segura que tu puedes sola? -le pregunto, decidimos que lo mejor seria que ella se quedase con su madre y ella sea quien la cuide mientras se recupera, aunque todo marcha excelente, además es lo que supongo ella necesitará cuando le den la noticia. En éstas ultimas semanas ha sido demasiado difícil darle explicaciones del porque su padre no ha ido a verla, pero los médicos dijeron que esperáramos a que ella esté nas recuperada, pero ahora será imposible negarle las cosas; le habíamos dicho que Bruce no había ido porque la empresa en el a que trabajaba lo había mandado a un viaje de negocios a Canadá y que se había estado comunicando con su madre para preguntar de su hija y que le mandaba demasiados saludos y besos; ésa era la excusa de todos los días....me sentía mal porque le estaba mintiendo y me dolía hacerlo.

-Si Max no soy una niña cariño tranquilo que tu también deberías guardar reposo.

No digo que ella exagera porque creo que si me la he pasado cuidándola como una niña pequeña, es solo que siento que es como como una bella estatua de vidrio que si la dejo caer temo que se rompa.

-Bien, solo recargarte en mi y no digo más- ella roda los ojos y yo aprovecho para darle un fugaz beso en la mejilla y eso provoca que sus mejillas se pongan coloradas.

La guío del coche hasta dentro de su casa, es extraño porque la penúltima vez que estuve aquí tuve que sacarla en brazos inconsistente, la segunda solo vine a escondidas por sus cosas y ahora la traigo del brazo sin ocultarme.

-Dijeron que papa estaría aquí ¿en donde está? -nos pregunta a los que veníamos con ella (Daniela, Will, Mackensey y yo).

Todos quedan en silencio sin saber que decir, en lo personal yo estaba completamente mudo, sin importar cuantas veces lo ensayé en mi mente haría no pudo decir palabra alguna.

-Hija...-toma aire -Cariño hay algo que te hemos estado ocultando desde el día de la operación.

-¿Qué pasa? ¿Qué es eso que no me han querido decir?- su voz ya era de desesperación.

-Es mejor que tu lo averigües -le interrumpo y saco del bolsillo de mi chaqueta el sobre con la carta que Bruce le había dado a Will y él me lo entregó a mi; se la entrego, ella se saga de mi agarre y se sienta en el sofá mas próximo que encuentra.

Emmy...

Querida hija mía:

Lo siento, lamento haberte provocado tanto sufrimiento durante demasiado tiempo, eso es algo que jamás me perdonaré. Si estás leyendo esto es porque ya han pasado días o incluso meses de tu operación, espero que todo halla salido como lo planearon, y Max esté contigo apoyándote.
Desde un mes atrás del día que supongo fue tu operación yo sabía que Max estaba dispuesto a quitarse la vida a cambio de la tuya, pero no quise decírtelo porque sabía que el era capaz de hacerlo y que tu no sobrevivirías a un mundo sin él, así que les di una nueva oportunidad, una nueva forma de ver la vida y una puerta al futuro, espero que sean felices.
Me hice los exámenes correspondientes y resultó que yo era compatible contigo así que yo era uno de los posibles donadores una vez muerto.

Recuerdame siempre. Yo siempre estaré contigo aunque tu no puedas verme, viviré en ti hasta que me olvides y espero que eso nunca suceda...cada que te toques el pecho y sientas tu corazón latir sabrás que tienes una parte de mi contigo que siempre te acompañará a donde quiera que vallas.
No te angusties nos veremos de nuevo pero no por ahora, yo te estaré esperando por siempre.
Cuida de tu madre y recuerdale que ella es el amor de mi vida y que algún día nos volveremos a ver.
No me odies por esto, velo como un acto de amor de un padre a la niña de sus ojos.

Te quiere:
Papá.

Siento las lágrimas escurrir por mis ojos un gran vacío por dentro y un nudo que no me permite ni sollozar.

Llevo mis manos a mi pecho y siento el corazón de mi padre latir dentro de mí.

-Te dejó esto- mi madre me extiende una delgada cadena de oro blanco que tenía una "B" de dije, era la que mi padre siempre traía en el cuello. La tomo y me la paso por la cabeza, es algo formal y nada femenina, me encanta -el también me dejó una nota a mí, ¿Quieres leerla?.

Asiento con la cabeza, realmente quiero saber que es lo que mi padre le escribió.

Pero en lugar de una hoja de papel como la mía me entrega una servilleta vieja.

Veo lo que esta escrito es con el puño y letra de mi padre pero se ve que la escribió hace mucho tiempo.

"No me importa si la muerte nos separa, porque yo te amaré en esta vida y en la siguiente por siempre."

-Ese fue el texto que leyó en nuestros votos matrimoniales. No sabía que lo había conservado después de tanto tiempo -ella quiebra a llorar, la abrazo y dejó que mis lágrimas fluyan.

El dolor que en éste momento siento no es nada comparado al que creí que sentiría meses atrás en caso de que mi padre muriera.

Éste es desgarrador y creo que jamás cambiará.