Único

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Hoy era el día, Jeongin luego de pensarlo miles de veces durante los últimos días, estaba decidido. Se declararía a su hyung favorito, Chan. Hoy en el día 14 de febrero, día del amor y la amistad.

Planeó todo a detalle, en la fiesta que se llevaría a cabo en el edificio JYP, aprovecharía cualquier momento en el que el australiano se encontrase solo para acercarse a hablarle en privado, en una zona que ya sabía, nadie usaba la mayoría del tiempo. Le expresaría todos los lindos sentimientos que causaba en él desde tiempo atrás del debut.

¿Le importaba ser rechazado?

En un principio sí, se sentía inseguro de sí, le aterraba la idea de ser rechazado en su primer y única declaración de amor que pensaba hacer. Porque sí, quería, no, amaba al mayor más de lo que pensó, podía amar a alguien.

Simplemente le encantaba todo lo del mayor, su increíble personalidad lo cautivó desde un principio. Su sencillez, su honestidad, su amabilidad, lo responsable, lo tolerante  y atento que es, ¡Lo lindo que actúa algunas veces! Era el hombre perfecto ante sus ojos.

Fue así que su miedo despareció y tuvo confianza en sí mismo y en el australiano. Confiaba en que lo que sea que respondiese, no lo diría con intención de lastimarlo, sino por el  bien de los dos. Porque así es Chan.

Su relación con el mayor no era exactamente la más linda u afectuosa. Muy pocas veces era mimado, y si lo hacía, era en cámara, no en privado. Es el único hyung con el que menos se comunica. Hasta Minho es más comunicativo con él, y es de extrañarse.
Aunque, cuando recibe cariño de alguno cerca de donde está el líder, éste actúa de forma extraña e interrumpe la escena, luciendo molesto y alejándolo. Hecho que confunde al menor, se preocupa y termina disculpándose la mayoría del tiempo, sin importar de que haya hecho algo malo o no.

¿Y si es tratado así porque lo odia? ¿Y si cuando se confiese, el mayor se burla en su cara? ¿Y si se lo toma a juego? ¿Y si le deja de hablar?

Agitó la cabeza, tratando de alejar esos malos pensamientos. Sin darse cuenta, lágrimas amenazaban con salir pero las limpió, respirando lentamente para así tranquilizarse.

—Innie, debemos irnos—habló un alegre Jisung desde el marco de la puerta—¿Estás listo?—asintió frenéticamente sin mirarlo.

—Vamos que Channie nos espera—rió por el apodo—Por favor no le digas que lo llamé así, ¡Me matará!

Rió burlón y asintió finalmente.

—Está bien, no le diré.

[...]

—¡Pido ir junto a Innie en los asientos de atrás!—gritó Hyunjin, llamando la atención de todos. Le gustaba estar con su daeosang y mostrarle afecto.

—Lo siento Hyunjinnie, tú vas con Minnie adelante—respondió el líder forzando una sonrisa, celoso. Le molestaba un poco la cercanía de ellos dos—...yo iré con él.

—Yo quería ir con él—suspiró triste haciendo un adorable puchero.

El menor de todos sonrió por la ternura que emanaba el más alto. ¡Hyung es muy lindo! Pensó.

—Hyunjin-ah ama a Jeonginnie—canturreó Changbin a lo bajo, haciendo que el mencionado, se pusiera colorado.

—Déjalos, Binnie—defendió Minho quien sabía el enamoramiento del menor hacia el australiano.

El menor se mantenía callado sin decir palabra alguna, ¡Estaba apenado!
¿Qué pensaría su hyung de él al escuchar eso?

Lo miró y éste se mantenía serio, sin prestar atención a la situación, perdido en sus pensamientos.

Confession; ChanIn osDonde viven las historias. Descúbrelo ahora