My little flower 2 {Jimin y tú}

Capítulo 33.

El ruido de un metal cayendo al suelo me despierta obligándome a pegar un brinco. Entreabro lo ojos y observo la habitación entera a oscuras y a Yoongi completamente dormido boca arriba. Me desperezo un poco y vuelvo a hincar la cabeza en la almohada totalmente a gusto.

-¡No está, _________ se ha ido!. -gritan desde abajo.

El jaleo recorre toda la planta baja hasta que varias pisadas en las escaleras de madera adivinan que estan tras la puerta cerrada.
La perilla se va girando lenta y silenciosamente mientras yo vuelvo a hacer la croqueta en la cama intentando buscar una postura con la que conciliar mejor el sueño.

Últimamente estaba más cansada de lo normal y necesitaba más horas de sueño.

Se apoyan en los pies de la cama hasta que alguien cae en medio sobre nosotros dos despertando molestamente a Yoongi.

-Me habías asustado. -habla Jimin con la cara hundida en el colchón.

-Estabas más borracho que una cuba, y me eschaste de la cama. -hablo ronca con los ojos cerrados. -déjame dormir, por favor. -susurro poniéndome en posición fetal salvaguardando el calor.

-Park Jimin, por favor, vete a tu habitación. Aquí hay gente que intenta dormir. -escupe Suga dándole la espalda.

-Qué tacaños sois. -bufa levantándose.

-¡Buenos dias noona!. -entra asomando primero la cabeza. -¡Hola hyungs!. -se sienta a los pies de la cama abrazándose a las piernas de su hyung y mías.

Yoongi y yo abrimos la sábana del hueco del medio a la vez dándole acceso libre al maknae para que se meta en medio.
Una vez dentro, éste se tapa y se pone a dormir entre los dos.

-Oye, ¿para cuando el trío?. -pregunta el menor de los cuatro.

Los tres lo miramos bruscamente, y el que más Yoongi.

-¿Un qué?. -enarca las cejas el rapero.

-Cartas. El niño quiere jugar cartas. -le tapo la boca al menor mirando con los ojos afilados al culpable de la situación.

Todos desayunamos en sumo y sepulcral silencio. Las caritas lo dicen todo, unos con unas ojeras totalmente marcadas, otros comiendo a duras penas, y ya por último la pareja feliz que aseguran por sus auras,haber pasado una noche increíblemente buena.

Luego de esto está Yoongi, él rompe todos los cánones con una de esas pataditas estilo kung-fu panda que hace.

-Hoy es nuestro último dia aquí, ¿no?. -habla un Hoseok totalmente ronco.

-Mañana salimos a las seis de la mañana. Tengo ganas de quedarme otra semanita, ¿Ustedes no?. -Habla nuestro radiante Namjoon.

-No me importaría. -Habla el maknae. -Quiero montar en parapente y surfear.

-Yo quiero volver a Seúl. Me gusta viajar, pero que sea de relax y sin cámaras. - añade Taehyung.

-Yo tengo que volver. Unos hacen giras y rompen corazones, y otros estudiamos y rezamos por aprobar.

-Santa Papaya que duro eso. -habla Yoongi. -No estudies, hazte modelo o dí que te has liado con un futbolista.

-Ni se te ocurra eh. -Me mira Jin. Jimin clava su vista en mí, pero no dice nada.

Me llevo los dedos a la barbilla pensativa. -Modelo de ropa interior y trajes de baño estaría bien. -sonrío.

-¡No! ¡Sí!. -gritan Jimin, Jin y la mayoría de la vocal line.

-Joder, que es coña... -muerdo el donut.

-¿Y el plan para hoy es?. -Habla el silencioso Hoseok.

-Lo que os de la real gana. Yo me voy a la cama. -Habla Yoongi dejando el plato sobre la encimera y subiendo las escaleras.

-Yo me voy al acuario en mi cochazo.- se termina el zumo Kookie.

-Te acompaño. -habla TaeTae.

-¡Y yo!. -grito. -Jamás pisé uno.

-¿Ustedes chicos?. -pregunta omma jin.

El resto se alza de hombros.

-¡Let's go! -se levantan ambos y luego tironean de mí.

-¡Quitaros el pijama, gandules!.- vocifera Jin desde la cocina.

Uno a uno vamos corriendo hasta las habitaciones y nos cambiamos en menos de cinco minutos. Yo obvio echo más por darme un agua.

-¡Me pido copiloto!. -corro hasta el asiento.

Los tres nos sentamos y prende el maknae el motor.

-¡Esperadme!. -gritan afuera.

Jimin corre hasta nosotros y se sienta al lado de Kim Taehyung.

-Bienvenido.

-Cállate Jeon. -se pone bromista el cinturón.

-Vámonos.

-A la vuelta que conduzca _________. -habla Jimin con media sonrisa.

-Ni de coña.

Los dos menores nos miran.

-Mira Hyung, se parece a tí. -tironea de la ropa Kookie señalando un pez abisal.

El mayor no le echa cuenta y sigue observando tras los cristales el enorme paisaje marino que tiene frente suya.

Jimin toma mi mano cuidadosamente atrayéndome a él yendo ambos al mismo paso.

Antes de salir del acuario, nos metemos de cabeza en la tienda de recuerdos, y yo  fuí directa a los llaveros blanditos y los peluches.
Hay una gran variedad y el primero que llama mi atención es uno de una orca. Lo tomo siendo el último que quedaba y luego voy a ver llaveros.

Cojo uno con el nombre de la isla y con un tiburón subido en una tabla de surf y voy a pagar a la caja.

-Qué chulo noona.-se gira Tae una vez salgo de la tienda con la bolsita en la mano.

-¿Qué has comprado tú?. -me guardo los euros restantes en el monedero.

-Esta figura de dos peces payaso y un lápiz.

-¿Y tú Jeon?.-enarco una ceja.

-Un llavero con una manta raya para mis futuras llaves del coche, y dos llaveros para las de casa. -le dá uno a Tae. -luego mando a grabar los nombres.

-Gracias.

Jimin llega con una bolsa más pequeña que la nuestra.

-¿Nos vamos?. -observa el reloj.

Nos sentamos en una cafetería no muy lejana al auto y almorzamos en silencio.
Jimin saca la bolsa tras el postre y me tiende un llavero de una tortuguita de peluchite.

Yo le entrego el suyo.

Me mira ocultando entre sus parpados sus ojos y le devuelvo la sonrisa.

-Te toca conducir noona. -Habla Tae terminándose el perrito caliente.

Observo el volante horrorizada, no tenía pensado conducir tan pronto a pesar de haberme sacado el carnet de coche hace relativamente poco. Y menos un coche con el volante a la inversa.

-Si tenemos un accidente no me culpéis a mí, culpad al que está detrás mía. -apuñalo a Jimin con los ojos.

-Yo te ayudo noona. -pone Jeon bién el retrovisor.

Doy marcha atrás y salimos de la plaza de aparcamiendo donde habíamos aparcado en batería y con las manos vibrando entramos en carretera.

-Parece un pollito. -ríe Chim.

-Cierra el pico o te dejo ahí tirado Park.- pongo el intermitente entrando por la derecha.

-Luego toma esa rotonda, recto y entra en la paralela.

Sigo las indicaciones del menor hasta aparcar frente a nuestra pequeña casita dando un frenazo quemando rueda.

-Te doy un diez por ese epic ending.-Bromea Taehyung saliendo divertido del auto.

Salgo con las piernas aún temblando y cierro el coche una vez salen todos.