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6. Esta noche

-¿Por qué me siento malditamente bien cuando me tocas?!-

Sus ojos estaban mirándome desesperados. No sabia si era por el agarre en que lo tenia atrapado o por la maldita declaración que habia salido de su boca. Maldita si, porque en estos momentos mi cuerpo ardía. No entendía por que porque esas palabras me estaban afectando. No entendía como había pasado de buscar convencerlo o hasta obligarlo de que confíe en mí a querer empotrarlo contra la pared. Mi respiración estaba acelerándose y mi corazón ante ese pensamiento dió un vuelco tan grande que pensé que tenía que buscarlo en el piso. Porque asi se sintió como si se cayera de mi pecho.

-Déjame ir- murmuró ahora con su mirada hacia un costado y sus mejillas teñidas de rojo.

Que estaba haciendo? Que quería hacer? Y como si mi mente trajera involuntariamente las palabras de Heechul a mí lo escuche resonando en mi cabeza fuerte y claro TE GUSTA EL MONO.

No, no podía ser así. Mis manos fueron liberándolo y no dudo en irse. Dejándome parado con un montón de pensamientos y de momentos que no podía manejar Y entonces fue cuando me di cuenta de que en ningún instante me había planteado sus palabras realmente y tampoco planeaba hacerlo. No cuando estábamos en pleno comeback y a días de la cena de gala d la SM.

-Yesung! ¿Qué carajos pasa?- me preguntó Heechul una vez que entré en el estudio de nuevo.

-Nada-

-No se veía como nada cabezón- inquirió

-Déjalo Hee. Si no quiere hablar que no lo haga. Pero que este “problemita” entre tú y él no interfiera con nuestra agenda-

-No Leeteuk, no lo hará-

Cinco días después

POVS EUNHYUK

Realmente no tenía ni el más mínimo entusiasmo en ir a la cena. Desde ese día que no lo vi y no coincidí con él en ninguna grabación. No, no fue suerte. El manager decidió que después de lo ocurrido no era bueno estar juntos. Parecía que todos se habían dado cuenta que nuestra “amistad" estaba en franco descenso, si, directo al fracaso absoluto.¿Cómo podía haberle dicho eso?¿ En que carajo estaba pensado en el momento que decidí que era buena idea decirselo?! Me corregí, no estaba pensando. Ni siquiera sabía porque se lo había dicho ni para que. Su cara. Cuando lo había mirado exigiendo una respuesta fue de confusión, de no entender, esa cara que pone alguien que no siente eso que estas sintiendo. La recordaba como si solo hubiera sucedido hacía  un par de horas. ¿Cómo podía seguir en la banda así? Esa fue la pregunta que me rondó durante esos últimos días. Era un idiota y había dejado el estudio de grabación sin explicar nada a nadie. Calculé que él lo haría por mí en ese momento.

Me arreglé la vestimenta que la vestuarista había dejado para mí. Un traje rojo carmín con una camisa de gasa que dejaba poco o nada a la imaginación. Ya le había dicho mil veces que no queria mostrar mi cuerpo. No estaba en mi mejor forma. Me dispuse a elegir otra de mi propio guardarropas pero recordé que la ultima vez que hice aquello me estuvo siguiendo su asistente durante tres meses para vigilarme que aquello no se volviera a repetir. Y había sido un dolor en el culo tener que estar con una persona que te seguía hasta el baño.

Me terminé de poner todo sin obviar nada y esperé que me buscara Donghae para irnos juntos.
No demoró en venir nada. Estaba emocionado porque estaría toda la compañía completa y no paraba de decirme lo mucho que quería hablar con los demás grupos de chicas sin que sospecharan que estaba saliendo con alguna.

Al llegar enseguida nos llenaron de flashes y posamos como siempre. Había fans gritando Eunhae y me dio mucha gracia. Me hubiera sido mucho más sencillo si Donghae fuera el que me gustara…. Si también lo había asumido. Mi hyung me gustaba. Dios, todo era tan surreal.

-Vamos mono que nos están esperando adentro-

Apenas entramos un meitre nos acompaño hasta la mesa. Y lo vi desde lejos, hablando con Key. Estaba con un traje negro pero habría adelante en la camisa dejando ver su pecho trigueño apenas marcado y una corbata como la mia casi al borde de caerse así suelta. Tan…. No, ni quería pensarlo. Y de la nada antes dee llegar a la mesa sus ojos se dirigieron en mi dirección. No se si fue idea mia pero podría haber jurado que su pecho se agitaba por su respiración. No, debía estar bastante mal yo para pensar que mi presencia ni remotamente podía perturbarlo de esa manera.

-Uff pero mira como estas anchoa querida. Mataría a la vestuarista por a mi ponerme el azul y a vos dejarte con mi color favorito pero te sienta de maravilla. Mojaras varias bragas esta noche aunque tambien algún calzonci…

-HEECHUL! TE PUEDEN ESCUCHAR!- lo reprendió el líder

-Vamos que es verdad. No creo que nadie de esta mesa esté en desacuerdo-

No se si fue mi imaginación pero pareció como si lo hubiera mirado de soslayo a Yesung. No debía ser cosas mías.

Me senté y al rato comenzó todo. Los bailes los llamamientos honorífico. Lo de siempre. Mis ojos no querían mirarlo. Pero sentía que él no sacaba la vista de encima. Quise creer que estaba alucinando, pero al darme vuelta ahí estaba. Con su rostro innimutable y sus ojos leyendome el alma. Seguro quería explicaciones. Pero yo no quería hablar. Solo quería que olvidara todo.

Me levante para ir al baño agobiado por mi mente. Me lavé la cara con agua fría para tranquilizarme y decirme a mi mismo que esta noche tenía que darme cuenta que no podía seguir así. Pero entró alguien mientras divagaba y agarraba las toallitas de papel para secarme. Levante la vista al espejo y quedé petrificado. Ahí estaba mi hyung apollado contra la puerta del servicio.

-¿Qu..que haces acá?-

-Lo que tendría que haber hecho hace cinco días atrás.-

Sin mas avanzó hacia mí con pasos firmes y me tomó de la nuca acortando la distancia entre los dos. Sus labios me abordaron sin reparo alguno y yo no podía salir de mi asombro, y menos responderle correctamente sintiendo que mis piernas perdían fuerza. Su lengua pidió permiso para entrar pasando por sobre mis labios y cuando accedió enseguida la rozó con la mía. Fue como si una corriente de electricidad se disparara bajando directo a mi entrepierna. Me exploraba con tanta asiduidad que mi garganta provocó un suave e incontrolable gemido. Me devoraba y yo quería más, mi cuerpo afiebrado quería más, y como si lo hubiera dicho en voz alta su mano bajo hasta mi cintura haciendo que nuestros cuerpos se rozaran con ansias y desespero.
Se separó un segundo como buscando aire que yo también necesitaba, y susurrando en mi oído dijo:

-Me gusta tu camisa. Porque no solo se ve lo que quiero ver, sino que puedo tocar y que se sienta como si lo estuviera haciendo directo sobre tu piel.- y sin esperarlo pasó un dedo sobre uno de mis pezones que me hizo estremecer.- Ahora que lo pienso- siguió hablando sobre mi boca- siempre me pregunté a que sabría.- Y bajando su cabeza pasó su lengua sobre el mismo. Yo solo atiné a agarrarme de su pelo fuertemente permitiéndole que con la punta lamiera todo el contorno de mi ya húmedo pezón, y continuó luego torturando el otro acresentando los sonidos que salían sin control de mi boca. No supe cuando me encontraba gimiendo sobre la mesa de aquel baño tirándome hacia atrás dejándome hacer, sin importarme que entrara alguien. Pero la cordura volvió cuando sentimos un ruido y se separó de mí. Me baje deprisa y me dicuenta que tenia dos aureolas de saliva en mi camisa. Como pude me tapé y entró, acto seguido, un bailarín sin siquiera reparar en nosotros. Se acercó a mí y con su boca en mi oído dijo:
-No te cubras. Quiero que te vean húmedo por mí. Quiero que todos sepan que estas con alguien y que esta noche vas a correrte como nunca antes. Porque no voy a cometer el error del otro día. Voy a terminar lo que empezamos.-

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Perdón la demora pero no iba a subirlo hasta que estuviera mas o menos contenta con el desarrollo del capítulo.
Gracias por los comentarios y la paciencia!
Se les quiere ^^

Montse Hery