Secretos Mortales

Sinopsis

Es un viernes demasiado aburrido y no tengo ganas de levantarme de mi cama pero los rayos de sol entran por mi ventana, llegando e iluminando mi rostro haciéndome suspirar de aburrimiento, me levanto y voy directamente al baño para darme una ducha y así poder despertar un poco. Y, mientras me ducho les contaré algo sobre mí.

Mi nombre es Manuel Álvarez, pero todos mis amigos me dicen Manu de cariño. Tengo 17 años y soy de México, así es, mi querido México donde creen en la "llorona" pero no en un virus que está matando a millones de personas al rededor del planeta, en fin. Asistía a la preparatoria pero debido a la pandemia cancelaron las clases y desde ese momento mi vida ha sido un completo saco de aburrimiento, me gradué hace poco y déjenme decirles que casi toda mi vida soñaba con ese bello momento donde decenas de estudiantes vestidos con su toga y birrete al rededor de algún salón lujoso ,recibíamos discursos y palabras de éxito en nuestra vida para que jamás renunciáramos a nuestros sueños; y luego está ese momento que todo graduado desea tanto, así es, aventar su birrete al aire, marcando historia en su pequeño ser, pero no. No tuve ninguna ceremonia, ni tampoco palabras de ánimo de parte de mis maestros, y mucho menos un salón lujoso lleno de mis compañeros los cuales probablemente no vuelva a ver en mi vida, lo único que recibí fue un: Joven Manuel, usted a partir de ahora es un graduado y queda completamente fuera de cualquier actividad escolar que se pueda realizar, seguiremos en contacto con usted para la entrega de su certificado. Lo se, es deprimente ¿no creen? Pero bueno no hay nada que se pueda hacer. Mido 1.70cm y admito que me gustaría ser alguien alto pero provengo de familia con estatura promedio así que descartaré la idea que tendré hijos altos, a menos que me case con una chica mas alta que yo pero eso no creo que pueda suceder. Mi mejor amiga se llama Hanna, y vive en la casa de alado; yo tenia como unos 5 años cuando sus padres compraron la casa y como buen mexicano que soy, salí a ver quienes serían mis nuevos vecinos y entonces la vi, una pequeña niña de un metro caminando a la que sería su nueva casa, tomada de la mano de su mamá diciéndole que haría amiguitos nuevos y todo estaría bien, pero entonces ella corrió hacía mi y lo primero que dijo fue: tus pantalones son patéticos, y mi contestación fue: y tus ojos son de color popó. Y así comenzó nuestra linda y querida amistad, siempre hemos estado en las buenas y en las malas, como la vez en que su papá las dejó para irse a vivir con otra mujer más joven que su mamá, o la vez en que mi perrito Max murió, recuerdo que estuve dos semanas enteras llorando, así que ella venia todos los días a mi casa para animarme y siempre encontraba la manera de hacerme sonreír. Lo digo con total sinceridad y honestidad que siempre quiero estar con ella.

Salgo de la ducha enredado con una toalla al rededor de mi cadera y me dirijo a mi armario en busca de algo que ponerme, entonces una voz femenina me ataca por sorpresa.

–Joder Manu, si no fueras casi gay te juro que me lanzaría a ti y follariamos como gatos en celo.

Nada más y nada menos que la querida y antes mencionada Hanna, en persona.

–Te he advertido que si gustas pasar a mi casa eres completamente bienvenida, pero yo no uses la escalera del garaje para subir hasta a mi habitación por la parte de afuera, puedes lastimarte como la última vez - les contaré brevemente, se trataba de un viernes por la noche en el cual tengo mi tradición de ver películas hasta quedarme dormido, y en esa ocasión veía algo de terror, eran las 2 am cuando escuche un ruido extraño afuera, y como me cago de miedo decidí ignorarlo, entonces el ruido se hacía más y más fuerte hasta que vi una sombra afuera en el balcón de mi habitación, me arme de valor tome lo primero que tenía a la mano (el cual se trataba de un zapato) y se lo aventé directamente a la frente causándole una herida no muy grave pero si le cause un chichón.