El concierto estaba a punto de acabar, las fans no dejaban de gritar y los chicos aún bailando sobre el escenario lucían de lo más espectacular con aquellos trajes de diamantes que la luz al chocar en ellos mostraba un efecto demasiado deslumbrante. 2! 3! estaba apuntó de empezar cuando por fin la localice.
Aquella chica que un par de días anteriores me había escrito pidiéndome algo de lo más estúpido posible que una Sasaeng puede pedir, sin embargo era dinero y había ofrecido una buena cantidad de dinero por esa cosa tan especial.
Saque mi teléfono mientras le mandaba un mensaje:
"Te estoy viendo"
Al darse cuenta del mensaje comenzó a mirar en todas las direcciones, alce una mano y así me identificó. Asintió con la cabeza y camino hasta las últimas gradas del estadio. Yo la imite.
Al llegar a la parte más alta camine hacía ella, más de cerca pude ver que era más bajita que yo, lucia una enorme cabellera rubia y un cubrebocas tapaba sus labios sólo su pequeña nariz puntiaguda sobresalía de el.
Sin embargo yo iba más cubierta de lo normal, había ocultado como siempre mi cabello debajo de una peluca de un tono pelirrojo, llevaba gorra e iba con un vestido largo para que no sospechara, decidí ir lo más elegante posible.-Hey! Tienes un lindo estilo.- Señaló sin dejar de mirarme.
-Al grano.- Conteste mientras sacaba un par de calcetas- Aquí están.- Ella estiró sus manos y las tomó.
-¿Están lavadas? Si no lo están, mucho mejor.
-Que asco. Querida, están limpias.- Sacudi la cabeza sin dejar de mirarla.
-Aguanta.- Puso una mano a unos centímetros de mi cara.- ¿Cómo se que son de él?
-Cuando me contactaste me dijiste donde estaban. Exactamente de ahí las tome.
-Es imposible, llevo meses intentando entrar a su habitación pero siempre término en la policía.- Se quedó observandome de mala gana.-No es posible que tú en un día lo hayas conseguido pero de acuerdo voy a creer en ti. Toma.
-Oh Oh! No querida, no son sólo cincuenta dólares, te dije que eran sesenta.
-¿Qué? ¿Sesenta por unas simple calcetas.
-Bien.- Le jale la mano.- Damelas, apuesto que alguien pagará una mejor suma de dinero.
-Ya, ya, ya. Está bien.- De su otro bolso saco un puño de billetes mientras intentaba buscar un billete de diez.
-Ve el dinero que traes, querida y aún así no quieres pagar lo que es.
-Tengo otros negocios. No sólo contigo tengo tratos.- Exclamó casi gritando.
-Relajate. Ya, muevete que nos están mirando desde hace rato.- Y si, unas chicas que no estaban a más de metro metro nos observaban mientras susurraban entre ellas.
Aquella chica volvió a bajar a su lugar, en cambio yo salí del estadio asegurando que nadie me siguiera. Entre a unos baños, rápidamente me quite el vestido que por debajo traía una falda entallada con un saco y blusa blanca. Me retire la peluca mientras sacudia mi larga cabellera, doble todo metiendolo en mi bolso junto con los zapatos que llevaba en ese momento, doble la gorra y saque unos tacones, ya casi estaba lista, sólo faltaba un poco de labial. De pronto la puerta se abrió.
La chica con la que acaba de hacer negocios entró buscando por todos los baños. Me miró pero no hizo ningún gesto y prosiguió a salir de ahí. Suspire tomando rápidamente mis cosas. El concierto ya estaba finalizando.Corrí lo más rápido posible hasta llegar a la parte trasera del estadio, Jing Sung, me observo para después darme el paso para entrar a Stage.
-Rápido Soo Yeon!.- El resto del staff me hablaba.- Los chicos ya están terminando. Ya tienes todo listo?
-Si! Yo voy con ellos.- Volví a correr hasta llegar a la salida de emergencia.
De pronto vi a Jeon quien venía corriendo mientras se limpiaba el sudor. Detrás venía el resto de los chicos caminando a zancadas.
Al pasar SeokJin, quien aún daba fuertes bocandas de aire, los seguí por detrás, mientras cada uno comenzaba a subirse a la camioneta. A continuación yo subí en el asiento del copiloto.
-Listo, vámonos.- Me dirigí al conductor quien asintió.
El carro comenzó a moverse. Los chicos estaban agotados, Hoseok y Tae no dejaban de jugar mientras los demás seguía bebiendo agua como si no hubiera mañana.
-Bien hecho, chicos.- Me miraron a través del espejo e hicieron un pequeño corazón con sus dedos. A excepción de Tae quien seguía con la botella de agua sobre sus labios.
-Gracias, ¿Nos viste, cierto?.- Namjoon no me perdía de vista.
-Por supuesto que si.- Sonreí.- Fue uno de sus mejores conciertos.- Todos asintieron para continuar platicando entre ellos.Recordaba lo que había ocurrido hace unos minutos con aquella rubia, que se había atrevido a pagar una suma tan grande de dinero sin saber si realmente era auténtico lo que quería.
Si tan sólo supiera que la representante de Bangtan le había vendido aquel par de calcetas que alguna vez Jeon uso por lo cual se hizo aún más famoso, claro eran de Iron Man. Pero no sólo eso, ella no imaginaba que yo era la sasaeng más eufórica y desconocida de ellos. Todo escondido detrás de un buen personaje que ellos nunca imaginarán tener a su lado.
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Cuando una sasaeng se enamora. ♡ BTS - MinYoonGi.
FanfictionDe pronto te das cuenta que ya no es ganar dinero, ni obtener la mayor reputación dentro de los grupos, ni ser famosa entre las sasaengs si no que es solamente él estar a su lado. Pero mi trabajó es el dañarlo y vender todo de él, el único problema...