365

1K 95 122
                                    

- ¿Qué defina amor dice? ¡pero de qué va el de Filosofía!

Raoul salía de su última clase algo más enfadado que de costumbre, era cascarrabias y eso lo sabían todos sus amigos, pero ese martes a las dos menos cuarto y cuarenta y siete segundos de la tarde estaba molesto, molesto por el ejercicio de reflexión que le habían mandando ¿Cómo iba a definir él, el amor?

- A ver tranquilízate, tampoco es para tanto -respondió Nerea quitándole importancia-

¿Y si a lo mejor Nerea tenia razón y no era para tanto?

Raoul era un chico muy intenso, para bien y para mal. Todo lo bueno le multiplicaba la felicidad por dos y por tanto todo lo malo le afectaba por dos. Cuando algo le dolía no lo solía esconder, era muy transparente.

- Puede ser, no sé Nerea. Y para colmo tenemos que entregarlo en viernes -bufó Raoul-

- Tienes tres días hijo.

El trabajo parecía sencillo, pero a la hora de la verdad no lo era. La definición de una palabra tan abstracta era muy complicada, y más si la explicación de amor tenía que ser propia, nada de Internet ni nada de libros, era obligatorio que fuera una definición propia. 

Esto no parecía afectarle mucho a Nerea, la amiga de Raoul. Se tomaba esa palabra como una palabra más, pero para Raoul no lo era.

- ¿Te vas a venir a mi casa después? -preguntó Nerea-

- Pues no se, tengo cosas que hacer.

- Va, vente que vamos a hacer creepes y ver Lemonade Mouth.

Raoul suspiró ante la oferta de su amiga, le vendría bien escapar un poco de la rutina y de su casa, pero tenía que ayudarle a su madre a pintar la habitación de música de su casa.

Al salir de su cuarto esta mañana se había encontrado el teclado, las guitarras y los altavoces en mitad del pasillo y eso solo significaba, limpieza y pintura.

Su madre se encargo de hacerle prometer que le ayudaría a pintar la habitación después de llegar de las clases.

- Viene Miriam -hizo una pausa- y Agoney.

Al escuchar el último nombre el rubor se extendía desde la punta de las orejas hasta llegar a sus pómulos, para después ocupar su rostro completo.

Agoney.

Otro de sus problemas.

Tanto Nerea como él eran amigos de Miriam y Agoney, se conocían desde pequeños, los cuatro eran del mismo barrio pero al empezar bachillerato sus caminos se separaron, Agoney y Miriam decidieron hacer ciencias y Raoul y Nerea letras puras.

No estaban en el mismo centro porque la modalidad de ciencias no estaba incluida en el instituto del pueblo, tenían que coger un bus todas las mañanas hasta la localidad de al lado en el que si había bachillerato de ciencias, por tanto se veían muy poco, solo los fines de semana y algunas tardes entre semana.

Raoul se llevaba muy bien con Miriam, era muy protectora con él y tenía gustos musicales similares por eso compaginaban tan bien, pero con Agoney era diferente.

Agoney era un chico amable y un tanto callado. En persona no se abría mucho con sus amigos, pero a eso a ellos no les molestaba, aunque puede que a Raoul un poco si. 

Raoul se fijaba que a la hora de mostrar sentimientos se cohibía un poco, incluso a veces hacían la broma de que parecía un robot, pero en los últimos fines de semana la cosa había cambiado. Se mostraba un poco más extrovertido y eso a Raoul le hizo feliz, muy feliz.

365 · Ragoney (One Shot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora