Si amarte es un pecado.

Capítulo 1

NARRA DANIELA:

Hola! Me llamo Daniela aunque mis amigos me suelen llamar Dani y os voy a contar mi vida aburrida.

 Ahora mismo me encuentro en mi clase de economía toda aburrida y lenta. Que si ahorros, que si los préstamos, blaaa blaaa blaa... Tengo ganas de que acabe esta mierda e ir a ver a una de mis chicas jeje.

- Ey! ¿En qué piensas otravez Dani hija mía? Dijo mi amiga Marta

- He quedado con una chica y quiero que se acabe esto ya. La dije cansada

- Joder, ¿cuántas van ya esta semana? Se ríe

- Puees... perdí la cuenta. Y me río con ella

- ¿Alguna vez piensas tener una relación seria?

Me reí muy fuerte como si me hubiera contado un chiste buenísimo.

- Sabes de sobra que no creo en el amor desde aquello...

- Mmm ya... Dani debes superar a Alicia ya y dejar de estar cada día con una intentando olvidarla. Me dijo Marta un poco mas seria

- Lo sé pero joder la veo todos los días y solo con ver esa sonrisa... 

- Superala

- Qué fácil es decirlo. Refunfuñé. Y justo tocó el timbre y salí un poco molesta. Pero esa molestia me duró poco al ver pasar a aquella chiquilla, si, a Alicia.

Alicia es una chica que conocí cuando estaba en 3º, yo me había fijado en ella desde que entré en el instituto pero tampoco me había orientado en cuanto a sexualidad, yo me creía la típica hetera y mírame ahora, mas bollera que una magdalena. Cuestión que la observaba cual admiradora secreta durante dos años hasta que llegué a 3º. Bendito y maldito curso.
Era el primer día de clase de 3º y nos dijeron cuáles serían nuestros profesores y el horario con las materias que íbamos a tener. La clase había terminado y yo salí al pasillo para buscar a mi amiga Marta. De eso que me dice:
- Hay una chica en mi clase que la gusta el anime, el yuri, Yaoi y BTS.

-No me jodas PRESENTARMELA.

Necesitaba conocer esa chica y para mí gran sorpresa ¿quien era esa chica? Correcto, Alicia.
- Hola. Dijo sonriente. Yo me quedé un buen rato observándola sorprendida, todavía no asimilaba lo que pasaba hasta que me abrazó.

- H-hey!

- ¿TE GUSTA EL YAOI? Gritó emocionada.

- SIIII, VIVA EL YAOI

- Y EL YURI!

Y así empezamos a hablar un rato de mangas yuri y yaoi hasta que se tuvo que ir a clase.
Bueno, pues felicidades Daniela. Me di cuenta de que esta chica realmente me gustaba. Pasaban los días y me atraía más y más, escribía poemas, textos sobre ella, la hice retratos. Sin darme cuenta me había enamorado. Para seros sincera yo era una ilusa total y me creía el típico final feliz con que iba a terminar con ella pero no amigos no. Pasaron varios meses, y estábamos mi grupo de amigos y yo en el recreo haciendo el tonto como siempre. Yo tan sonriente y motivada porque iba a ver a la chica que tanto me gustaba, pero esa sonrisa se me borró del rostro cuando vi aquello. Ella estaba presionando sus labios contra los de otra persona.
¿Habéis escuchado el ruido de un cristal cuando se rompe? Pues así sentí mi corazón al ver aquella escena. Salí corriendo de ahí llorando con las ilusiones rotas, me metí dentro del instituto y decidí esperar a que empiece la clase, no estaba en condiciones pero no podía saltarmela. Tuve suerte y pude llorar sin que me vieran porque había presentaciones y las luces estaban apagadas. Maldito día, lo maldigo con todas mis fuerzas.
Desde entonces dejé de creer en el amor verdadero ¿Qué es eso? Una farsa, era imposible que alguien te ame deverdad. Después de dar todo por aquella chica, ella me lo agradece así, de esa manera. Gracias pero prefiero no volver a pasar por lo mismo.

- Daniela, hey, Daniela. Mi amigo chascaba los dedos. Él era Yoel, casi como mi mejor amigo, siempre me escuchaba y comprendía.

- Eh? Dije despistada

- Estás perdida en tus pensamientos ¿en que pensabas otravez?

- Volví a recordar lo de Alicia. Bajé la cabeza triste

- Es doloroso lo sé, pero tienes que aprender a afrontarlo y superarla. Me abrazó

- Gracias tío. Dije algo triste correspondiendo su abrazo.

- Venga vamos para clase y cuando termine vamos a por comida.

Este chico era de lo mejor que tenía en serio, fuimos y continuamos conociendo a nuestros nuevos profesores, como todos los años, vaya.