Todo comenzó cuando empecé a salir con amigas por la calle. Yo solía ser una chica muy alegre,...
Era muy inocente, no me tomaba en serio las cosas que sucedían en las redes sociales, pensaba que no me pasaría nada; yo sólo quería conocer gente nueva. Y eso que mis amigos y familiares me advertían. Mis familiares me lo decían porque no querían que me sucediese algo de lo que sale en las noticias sobre abusos de chicas por medio de las redes sociales. Mis amigas y amigos me advertían cosas como "LLEVA CUIDADO CON LOS CHICOS QUE TE AGREGEN O MANDEN PETICIONES PORQUE AHORALOS ZAGALES VAN A LO QUE VAN", y también que no me dejara engañar fácilmente.
Era muy insegura, me veía gorda aunque no lo estaba tanto, quizás me podía quedar más delgada pero no tenía por qué, me obsesionaba mi físico. Quería quedarme más delgada, quería ser por fin alguien que gustara a la gente, ya que nunca lo había sido. Así que cómo no, dejé de comer, bueno más bien empecé a comer menos; pedía que me hecharan muy poco en el plato, y aun así me dejaba más de la mitad. Mi madre se preocupaba muchísimo por mí, y estaba todo el rato pendiente de que comiese, pero no lo hacía; por muchas cosas que comprasen que a mí me gustaran seguía comiendo poquísimo y empecé a adelgazar, ya que hacía más deporte. Me puse más guapa,y me empecé a desarrollar un poco más.
Todo el mundo me decía que me había quedado más delgada y que estaba muy bien así.
Poco después, un chico me mandó una petición a tuenti (una red social); me metí en sus fotos, y ví que era muy guapo y lo acepté. Estaba deseando saber quien era y, como no, también moría por saber que quería y el por qué de su petición.
Muy feliz, inmediatamente le conté a una amiga lo sucedido. Le dije el nombre y apellidos del chico, y también le pregunté si lo conocía.
Mi amiga me dijo que sí, que ese chico era muy guapo, peero que todo lo que tenía de guapo también lo tenía de golfo.
No me lo tomé muy enserio. Pensaba que sería uno de tantos chicos que hay, pero que este era el triple más guapo. Era tan inocente...
Al día siguiente, empezamos a hablar. Él era muy lindo en las conversaciones. Nos presentamos y me dijo que me había agregado porque le parecí muy guapa. No estaba acostumbrada a que me dijesen cosas así. Hablabamos todos los días tres o cuatro veces, nos pasabamos horas y horas hablando...
Me fuí ilusionando poco a poco sin darme cuenta, y no veía ora cosa que no fuera él. Sólo quería hablar con él, y no me extrañaban preguntas como: ¿eres virgen?, ¿lo harías conmigo?, ¿puedes quedar?, ¿con cuántos zagales has quedado?, ¿tienes novio?, ¿que haremos cuando quedemos?
Tampoco veía un pequeño detalle... Más bien no l quise dar importancia. Fue en una de las primeras conversaciones:
+Él. Hola preciosa que tal?
-Yo. Hola guapo, pues bien y tu?. ¿quien eres, porque me has agregado?
+Él. Me alegro por ti cariño:) puues yo bien. Te ví en una foto y me pareciste guapa y por eso te agregé
-Yo. Yo guapa? Desde cuando? Para guapo ya estás tú.
+Él. Jajajaj. Sí, y además preciosísima.
Nos preguntamos donde vivíamos y dijimos de quedar algún día.
+Él. Tienes novio mi amor?
-Yo. (me quedé *-*, al ver lo lindo que había sido en la conversación y lo cariñoso y bonito que era conmigo, así que le seguía el rollo) yo novio? que va cari, ojalá. y tu qué precioso?
+Él. No? que raro, con lo preciosísima que eres tú. Yo? emm... sii guapa.
-Yo. Me lo imaginaba cielo:(