Aulus

13 1 1
                                    

Hace 22 inviernos, en las frías montañas, en una cabaña no muy grande, nacimos yo y mi hermano, Aulus y Doulus, eramos como el sol y la luna, yo era más calmado y él era más hiperactivo, uno yo la bondad, y él la maldad.Eramos inseparables, formábamos un gran equipo, yo era la mente y él los músculos, el era bueno en el combate y yo en la magia, en fin, cosas de los hermanos gemelos, nuestras carencias las compensa el otro, como todos los hermanos nos peleábamos pero rápidamente hacíamos las paces... 

Siempre hemos estado juntos, en las buenas y en las malas... pero aún recuerdo un día... posiblemente el peor día... hace 7 años, mientras estábamos en una taberna hablando de nuestras cosas, un grupo de personas, de unos treinta y tantos, con capas y espadas, entraron y vinieron a por Doulus, mi hermano, sin que yo pudiese hacer nada, esos hombres se lo llevaron, salí corriendo de la taberna, intenté perseguir a esos hombres, pero no lo logré, se lo lo llevaron y no pude hacer nada.Poco después empecé a escuchar rumores, sobre Doulus y una gema robada, o sobre una maza de cristal y que esto al parecer le acarreó consecuencias, intenté superar la pérdida de mi hermano, nadie nunca más lo ha visto, pero yo lo sigo buscando. 

Partí hacia las montañas, donde el frío está presente y por imbécil caí inconsciente en el camino por el cansancio y por que llevaba 2 días sin pegar bocado de algo... Cuando volví en mí desperté en una habitación, cálida y acogedora, decidí levantarme y coger mis pertenencias que estaban puestas sobre una silla, me vestí y me senté en la silla y apoyé mi mapa en la mesa para intentar localizarme, pero no supe deducir donde estaba, en ese mismo instante, la puerta se abrió y una persona tapada hasta arriba por una capa y una capucha de color negro me pregunto por mi estado, yo estaba bastante extrañado pero aun así le dije que estaba bien, le pregunté su nombre y me dijo que le acompañase. 

Estuvo hablándome sobre como me encontró y que el fue quien me rescato, y que ha decidido dejarme en este sitio porque siente un aura en mi interior, le pregunté sobre que es lo que sentía en mí, y el dijo: "Magia" Me reí y le pregunté sobre si se refería a que puedo hacer trucos de magia como mi truco favorito, hacer aparecer limones y exprimir su jugo con mis manos, viene genial para echárselo a los ojos de alguien mientras gritas "¡Nos vemos con limón!" 

Insistió el señor sobre que debería quedarme y aprender, así que yo, en muestra de agradecimiento, me quedé, no sabía donde estaba, hasta que al salir al exterior me di cuenta de que era lo que estaba pisando: La escuela druida del Ártico, un lugar donde muchos sabios se han formado. 

Pasaron dos semanas desde que me empecé a formar y recuerdo que en la escuela no había muchos Kalashtar como yo, solo estábamos dos, yo y una chica, Atia Black, al ser solo nosotros dos, pues hicimos piña e íbamos juntos siempre a clase, no nos separábamos, de hecho, como somos Kalashtar, siempre estábamos jodiendo al resto de nuestros compañeros, como nos podemos meter en sus sueños, pues a veces cotilleábamos, nos van el morbo y los chismes...

Terminamos nuestros estudios en la escuela de los druidas del Ártico, fuimos de los mejores y nos ganamos tanto Atia como yo, la confianza de los maestros del lugar, y bueno, empezaron a ponerse las cosas chungas, corrían rumores de asesinatos en las aldeas de la montaña, no sabían quién era el culpable, además eran aldeas de cómo mucho 10 habitantes, así que todos se conocen, así que seguramente serían de fuera de la zona, cómo los aldeanos estaban preocupados, fueron a pedir ayuda al gran maestre de la escuela de los druidas, los druidas expertos eran viejos y rehusaban de ayudar, así que como alternativa, nos mandaron tanto a Atia como a mí a resolver el caso, así que partimos de aldea en aldea buscando pistas...

Llegamos a un poblado, el ambiente estaba muy cargado y recuerdo que llegamos de noche, un otoño de hace un año, así que entre el frío y la noche decidimos ir a una posada a descansar, pero esa noche, decidí aprovechar e investigar e hice un descubrimiento... ¿Os acordáis de Doulus? Bien, mientras el posadero dormía, entré en su mente y descubrí que había visto a Doulus, cargado de preguntas, bajé a la habitación del posadero y arramplé con su puerta, le interrogué toda la noche pero no soltaba prenda, decidí dejarle descansar un tiempo, y a la mañana siguiente vi a un grupo de personas, con espadas y para mí desgracia, capas largas... En ese momento desperté al posadero y le pregunté si los conocía, dijo que eran clientes habituales y que si que había visto a una persona igual que mi hermano, en ese momento deje al posadero y empecé a seguir a los capas largas, pero no les encontré, ahora me hallo perdido y sin rumbo, sobrevivo a base de lo que me otorga el bosque que atravieso y lo peor de todo me he marchado sin avisar a mi buena amiga Atia, ahora no sé qué es de ella, llevo meses buscando a los capas, ver vuelto a cometer el mismo error que hace tiempo y tengo que arreglarlo, ojalá encontrar civilización y poder descansar y volver a encontrar a mi hermano y a mi amiga Atia, la soledad del bosque me ha permitido meditar y tengo que seguir buscando y perseguir a los capas largas...

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Feb 24, 2019 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Aulus AmatWhere stories live. Discover now