Única Parte

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Es difícil contar todos los detalles, así que mencionaré los más importantes.

Aún recuerdo el día en que se conocieron, todos estábamos reunidos, pero ellos no sabían de la existencia del otro más que por menciones cortas, yo en especial le hablé mucho a Jimin de Yoongi hyung.

Creo que todos notamos que cuando sus miradas se encontraron, entraron a su propio mundo, desde un inicio fué así, y nunca cambió la forma en la que se vieron. La conexión que sintieron fue instantánea.

Era casi gracioso al inicio, cuando ambos llegaban a mi contándome lo que había sucedido entre ellos las veces que los dejábamos solos, o ellos salían, y es que al final, de alguna manera, era yo a quién más confianza tenían. Y les agradezco tanto por eso.

Las miradas brillosas que se daban, llenas de amor y emoción, para mí fue lo mejor verlos juntos y felices, aún si en esos momentos no eran nada más que amigos.

Un día fuimos los tres de campamento, hice lo posible para que en ese momento, en ese día, ellos dieran un paso, así que pensé en dejarlos un momento solos, con alguna tonta excusa

Iba de regreso a la parte donde armamos las casas de campaña, con un poco de leña para la fogata, pero la escena que estaba ahí me hizo esconderme detrás de un tronco que se encontraba a una distancia prudente, que me permitiera ver y escuchar sin que ellos me vean.

—Hyung...— La mirada de Jimin decía todo, era tan transparente.

—¿Si, Minnie?— Y ahí estaba esa cara de bobo que siempre tenía Yoongi cuando estaba con Jimin, aún que él lo negara.

—Es que... Solo me está viendo y no me dice nada— Yoongi hyung en ese momento tomó un poco (por no decir mucho) color rojo en sus mejillas.

—Tu sabes Jimin, me gusta verte.— Ah, pero cuando hyung se disponía a algo lo lograba, casi siempre era así, la única persona que lo hacía flaquear era Jimin. —Eres muy bello.—

Decir que no tuve ganas de gritar de la emoción en ese momento, sería mentir, tuve que morder mi lengua para no hacer el mínimo ruido.

Yoongi hyung...— Mi Jiminnie era lo más cercano a un tomate en ese momento. Parecía que quería decir algo, más las palabras nunca salieron de su boca. ¡Oh, Jimin! Si supieras que con tu mirada le prometías el mundo entero.

Mi rubio amigo se veía decidido cuando se levantó del tronco que estaba sentado, que, por cierto, me dió un indicio de que yo era quien iba a hacer todo, porque bueno, Yoongi hyung era muy flojo, regresando al tema, Jimin tropezó con una pequeña rama que ahí se encontraba. Suerte que mi hyung peli negro fue rápido en reaccionar, sosteniendo al rubio de su cintura, quedando ambos con sus rostros demasiado cerca.

Yo estaba a una distancia considerable, pero aún así fuí capaz de darme cuenta de todo lo que sus miradas decían en ese preciso momento.

"No me sueltes, no lo hagas, por favor". Parecía que decía Jimin.

"No me alejes, prometo quedarme a tu lado". Decía la mirada de Yoongi.

Y yo, bueno, yo me estaba cansando por los troncos que tenía cargados, pero eso no es lo que importaba en ese momento.

Bésense ya, par de ciegos". Eso es lo que quería gritarles yo.

Sus rostros estaban tan cerca, que hasta yo sentía la tensión. Todo parecía ir en cámara lenta, eran solo ellos dos en su pequeño mundo, donde solo existían ellos. 
Realmente no esperé que pasara en ese momento.

Love Story «YM»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora