Ahí me encontraba, en una sala de Hospital no podía moverme.. Vi entrar a una Enfermera, no podía hablar ni siquiera tenía fuerzas, la miré y me inyectó, dijo que no dolería tanto pero.. sentí ardor en todo mi cuerpo, fue muy doloroso, recuerdo que lo último que Vi fue cuando cerró la puerta.
Cuando volví a despertar comencé a llorar, mi cuerpo ardía por dentro y mis fuerzas estaban por el suelo.. Qué estoy haciendo en este lugar? Me comencé a preguntar.
por qué me hacen esto? Dónde está mi padre?.. Intente preguntar , pero volví a quedarme dormida, otra vez..
No se cuantas horas después volví a despertar, pero mi padre se encontraba allí , intente moverme, me miró
-Ámbar, despertaste!!, Cómo te sientes?
- Papá, Qué hacemos Aquí?¿Por qué me inyectan?-Le pregunté
-Recuerdas que te dije que no subieras al altillo porque habían cosas viejas del Laborartorio? - Comenzó a contarme
-Pero no entiendo.. eso que tiene que ver con esto?..
- Cuando llegué a casa te encontré inconsciente, llamé al ambulancia , desde que llegamos aquí están haciéndote análisis, puede ser que tengas algún virus, por eso el cuerpo te duele, Todavía espero resultados, no quiero verte así, pero Papá va a estar aquí, no voy a dejarte
Pasaron días, semanas y logró completarse el mes, a las dos semanas allí dentro las agujas se quebraban con mi piel, mi cuerpo no ardía, e intentaron de mil formas seguir haciendo estudios, no entendían que sucedía, Mas llegó el día y llamaron a Papá
-Señor Miller, venga un segundo, necesitamos mostrarle algo..
