Bajo la luna 🌙 [Caché] || One Shots [TERMINADA]

Moonlight [parte 1]

Los Ángeles - California.

Pov. Poché.

— amooor — me quejé sonriendo mientras Calle me guiaba a través del pasillo subiendo al segundo piso de la casa — ¿A dónde vamos?

— shhh — me calló — tú solo sigueme

Aguanté una risa. Cada vez que mi novia tomaba un poquito de más se ponía a inventar cada cosa.

Tanteó una de las puertas del final y nos adentro en ella. Era una habitación bastante espaciosa y muy brillante. Estaba empezando a imaginar lo que quería que hiciéramos aquí.

— Calle... ¿Qué hacemos aquí? — le pregunté un tanto desconfiada 

Ella estaba parada al frente mío con una sonrisa ladeada y con los brazos en la espalda escondiendo algo. Sonreí mientras cruzaba los brazos. — ¿Tú crees que nadie se dió cuenta que te trajiste esa botella?

— amoor.. Pero es sólo un vinito — se excusó ella mostrándolo al frente junto a dos copas. No se veía culpable — además, Sebas es nuestro amigo y no creo que le moleste.

Sonreí. Sus ojitos estaban un poco achinados y sus mejillas sonrosadas por lo que ya había tomado, era tan tierna que se me hacía imposible dejar de mirarla. Sólo ella podía provocar tantas cosas en mi, con un solo gesto.

— ajam... ¿Y qué hacemos aquí? — volví a preguntar acercándome lentamente hasta tenerla a centímetros de mi — ¿Para qué me trajiste? Tú como que quieres emborracharme. Ay Calle yo te conozco....

Se mordió el labio — ¿pues para qué tu crees.. ? — respondió sonriendo mientras dejaba el vino y las copas en la mesa de noche.

Se acercó lentamente y me tomó de la cintura y se inclinó para repartir besos a detrás de mi oído y el cuello.

Solté un pequeño gemido por la impresión. Su lengua estaba fría y mi cuerpo se escarapeló. La corriente eléctrica se inició y me recorrió por completo. Yo no podía resistirme a sus caricias, toda mi piel reaccionaba al instante.

Mi respiración se volvió irregular mientras ella seguía torturandome con sus besos, profundizandolos cada vez más. Sentía las piernas temblorosas y por un momento me dejé llevar hasta que recordé donde estábamos.

— Calle... — Jadeé casi sin voz. El calor me estaba invadiendo y si seguíamos tal vez no podríamos parar después — Calle.. — volví a intentar pero mi voz sonaba tan ronca que dudaba que me hiciera caso.

Así que decidí juntar toda la poca fuerza de voluntad que me quedaba y me le escapé en un segundo.

— oyeee...— Se quejó audiblemente.

— amor, no podemos. no aquí. — expliqué aún algo agitada.

— por qué.. — se quejó con un puchero volviéndose a acercar a mi peligrosamente

Retrocedí lentamente

— pues por que cualquiera puede entrar. No sabemos ni de quien es este cuarto....— me choqué con la pared.

Sonrió maliciosa y no se detuvo hasta encerrarme otra vez. Respiró en mi cuello y puso sus brazos a cada lado de mi.

— nadie vendrá. — Aseguró buscando mi boca. Provocándome despacio.

Cerré los ojos tratando de controlarme, no me podía dejar llevar pero es que era tan difícil con sus labios suaves, dulces y adictivos sobre mi. Le seguí el beso indecisa. Necesitaba calmarla, o más bien calmarnos porque yo también estaba a punto de perder el control.