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La brisa nocturna se colaba por las ventanas del dormitorio levantando suavemente las cortinas. En cierto modo, ____ se sentía como esas cortinas. Como si estuviera levantando una parte de sí misma, revelándose para él. Pero era muy arriesgado y, por un momento, vaciló. ¿De verdad quería entregarse a Harry Styles? Por la tarde, en la oficina, le había entregado su cuerpo. Pero si hacía el amor con él, si se entregaba del todo físicamente, ¿qué pasaría? ¿Se entregaría también emocionalmente? En ese momento Harry apretó su mano y ____ lo miró. El deseo que había en sus ojos era tan poderoso que la hizo temblar. Y todas sus dudas desaparecieron. —Te deseó, Harry —admitió. No podía negárselo a sí misma. Pasara lo que pasara después, siempre tendría aquel recuerdo—. Te deseo con todas mis fuerzas. —Pues ya me tienes —dijo él, abrazándola—. Nunca he tenido una mujer más bella entre mis brazos. —Tú me haces sentir bella —murmuró ____. Era cierto. Como si alguien hubiera movido una varita mágica, convirtiéndola en la mujer más bella del mundo. El beso de Harry contenía todo el deseo de aquellas semanas, un beso que le daba a entender cuánto la necesitaba. Un beso que se alargó hasta el infinito. Acariciaba su espalda a través de la tela del vestido y luego empezó a bajar la cremallera para acariciar su piel. Como hipnotizada, ____ se echó hacia atrás para dejar que la besara en el cuello, en los párpados, en el pelo. Al mismo tiempo, Harry sujetaba sus caderas para pegarla a él, para que pudiera sentir su erección. Era su primer contacto auténtico con él como hombre. Y la deleitó. La hizo desearlo aún más. Harry se apartó para quitarle el vestido, que dejó caer al suelo. Pero no se detuvo para mirarla como había hecho en el despacho. El sujetador desapareció enseguida y luego las braguitas. Después, la tomó en brazos y la llevó a la cama, tumbándola sobre el edredón. —Esta noche eres mía, ____. —Sí —musitó ella. 

Harry empezó a desabrochar los botones de mi camisa, que cayó silenciosamente sobre la alfombra, seguida de los pantalones. No tardó mucho en estar sobre ella, gloriosamente desnudo. ____ se quedó sin aliento. Era magnífico, con un cuerpo increíblemente proporcionado que aceleraba su pulso. Los anchos hombros, el torso poderoso cubierto de fino vello oscuro, las caderas delgadas, las piernas musculosas... y una erección que magnificaba su masculinidad. Harry se tumbó a su lado en la cama y ____ se rindió al momento, a él, a ella misma. Lanzó un gemido cuando él tomó un pezón con la boca mientras con la mano buscaba el interior de sus muslos. Sus dedos se deslizaron dentro de los pliegues femeninos, haciendo círculos alrededor del diminuto capullo. El mundo dejó de existir para ____, que sólo podía sentir su boca y sus dedos... Pero entonces, justo cuando estaba a punto de llegar al final, Harry se apartó. —¡No te pares! —Calla. Esta vez haremos el amor juntos —dijo él, buscando algo en la mesilla. Después de ponerse el preservativo se colocó entre sus piernas. Y ella se derritió, dispuesta a recibirlo. Deseando recibirlo—. Ábrete para mí —murmuró, abriendo sus piernas con las manos. Y ella obedeció. Harry la penetró despacio, sin dejar de mirarla a los ojos. Su angostura confirmaba la historia que le había contado. Ningún hombre la había llenado de esa forma. Harry la miró con ternura, una ternura que le robó el aliento. Luego la llenó por completo, despacio, deteniéndose sólo cuando no pudo llenarla más. Se quedaron parados un momento, cada uno estudiando al otro, conectados en cuerpo y alma. 

Fue el momento más profundo que ____ había experimentado nunca. E intuyó que él sentía lo mismo. Como si hubieran llegado a un silencioso acuerdo, Harry se echó hacia atrás y luego volvió a empujar. Respirando profundamente, volvió a apartarse y a entrar en ella. Siguió repitiendo este movimiento mientras ____ levantaba las caderas para recibirlo mejor, sintiendo que algo crecía dentro de ella, algo tan eléctrico que tuvo que cerrar los ojos.

—Mírame —dijo Harry con voz ronca. Y, gimiendo, ella hizo lo que le pedía, encontrándolo increíblemente erótico. Harry aceleró el ritmo, tomándola, haciéndola sentir el peso de su cuerpo, llevándoselo todo. —¡Harry! —gritó ____ cuando él murmuró su nombre con voz ahogada. Entonces la besó. Un beso profundo que fue seguido de una nueva embestida, más fuerte que las anteriores. Llegaron al final juntos, en total sincronía. ____ se dejó ir, como mareada, hasta que, unos momentos después, sintió que Harry se tumbada a su lado, llevándola con él, jadeando hasta que su respiración volvió al ritmo normal. Enseguida lo vio levantarse para ir al baño. ____ cerró los ojos. Tenía que hacerlo porque si no, cuando volviera, Harry vería lo que acababa de pasar. Se había enamorado de él. Amaba a Harry Styles. Lo amaba aunque sabía que él no se conformaría sólo con una mujer. No podía ser, pero sabía en su corazón que así era. —¿____? Ella lo miró, intentando con todas sus fuerzas que no viera en sus ojos lo que estaba pasando en su corazón. 

Seductora Venganza |Harry Styles|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora