Hanna, 17 años, famila perfecta o bueno, con sus dos padres juntos que ya es mucho para esta sociedad.
Una niña tan linda, diferente, callada,tan ella, pero para el mundo esto era malo.
Ella se preocupaba por su aspecto físico, para la sociedad era la niña superficial y nada más que eso.
Pero no, solo quien tenía la fortuna de conocer sus facetas sabían que era la persona de mejor corazón que existía, el problema es que ella le daba la oportunidad a muy pocas personas.
Hanna tenía "amigos", sí si no era tan antisocial como parece, pero estos no se tomaban la molestia de ser uno en realidad o talvez toda la culpa no era de ellos, quizás era ella la que no los dejaba entrar del todo.
Pero ¿Porqué?
Era la pregunta que todos hacían,y cuando me refiero a todos también habló de Hanna...Y sí mucho gusto,Hanna soy yo.
Soy compresión,siempre pretendo tener un buen consejo,una sonrisa, un si puedes, para los demás, creo que esa es mi mayor virtud.
Y supongo que la peor es que de tanto entender a los demás, de tanto ponerme en la posición del otro, creo que nadie me entiende, considero que la gente me busca por interés,pero no les intereso yo en lo más mínimo.