Hola, soy T/N, soy una sirena, en realidad la princesa del reino sumergido Atlántica. Cuando tenía 13 años de edad me escapé con mi mejor amiga Lía para viajar porque no quería vivir encerrada en las frías y sucias paredes de un viejo Castillo. Aquí...
XXX: ¿Tú eres T/N, la princesa del reino sumergido Atlántica?-preguntó una voz femenina detrás de nosotras-.
~Actualmente~
Al escuchar esa voz nos dimos la vuelta y vimos a una chica muy linda...
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T/N: ¿Y tú quién eres?-seria-.
Jenn: Soy Jennie y tu eres T/N y tu Lía ¿No?
Lía: Si ¿Cómo nos conoces?-Dijo en un tono tímido-.
T/N: Eres una sirena también ¿cierto?-seria-.
Jenn: Si, como se pueden dar cuenta.-nos enseñó su anillo lunar, que es uno que nos dan al terminar la escuela de sirenas-.
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Jenn: También soy una sirena. Y puedo notar que están perdidas ¿o me equivoco?-sonrió y cruzó sus brazos-.
T/N: Bueno, eso es muy cierto.
Lía: No tenemos en dónde quedarnos.-dramatica-.
Jenn: Pueden quedarse en mi casa y así me cuentan ¿por qué están aquí?
~Narradora~
Jennie las llevó a su casa. En cuanto entraron a la casa se quedaron muy sorprendidas, era todo muy diferente a lo que estaban acostumbradas, pensaron que todo lo que allí había era muy raro para ustedes. Estaban viéndolo todo detenidamente para analizar la habitación, pero escucharon un pequeño ruido...
-¡Nya~~!-miraron al suelo y gritaron al ver un pequeño gatito-.
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T/N: ¡KYAAA! ¡Un gato!-gritas asustada y levantas un poco tu pierna derecha-.
Lía: ¡Cosa del diablo!-se trepó en el sofá de un salto-.
Jenn: -muerta de la risa-. Esto no es diabólico. Burbuja es buena chica.
T/N: ¿Estás segura?- algo insegura-.
Jenn: Claro que si. No tienen nada de que temer.-dijo aguantando la risa la chica de cabello castaño-.
Lía: Vale. Pero ahora que la veo mejor ¡que tierno!-dijo bajando del sofá-.
Jenn: Bien, ahora cuéntenme todo.-se sentó en el sofá y las invitó a que hicieran lo mismo-.
Ustedes se sentaron y le contaron todo. Ella les contó que era muy buena amiga de tu madre, pero que un día hace dos años se enamoró de un humano y fue por eso que está en la tierra. Les dijo que podían quedarse cuanto quisieran allí pero que ella les iba a enseñar a comportarse correctamente.
Jenn: Bueno, ahora les mostraré donde dormirá por ahora.
~Narra T/N~
Jennie nos llevó a un lugar de la casa donde habían tres estanterías de libros, jaló un libro de la estantería de la derecha y la del medio se movió dejando a la vista un pasillo secreto.
Jenn: ¡Voila! Síganme.
La seguímos y entramos a un tipo de cueva que se parecía mucho a una casa de sirenas. Había muchos objetos de sirenas, pociones, doblones de oro, muchos corales y caracoles de decoración, objetos antiguos como jarrones y esas cosas, medallones, etc. Era todo muy sorprendente...
Jenn: Aquí dormirá por ahora, no es una habitación de lujo, pero es lo que tengo.-bajó si rostro-.
T/N: No, no, no te preocupes, así está bien, es perfecto. Dije sincera y moviendo mis manos en forma de negación-.
Lía: Si, es perfecto.-dijo embobado mirando a todos lados con la boca abierta como una niña pequeña-.
Jenn: Bueno, entonces, hasta mañana.-dijo con una hermosa sonrisa-.
Jennie se fue dejándonos solas a mi y a Lía. Lía se durmió enseguida y yo me quedé pensando...
T/N: ¿Qué nos esperará a partir de ahora?-Dije en voz baja y me quedé dormida-...
