Aventuras Sin Límites

¿Somos especiales realmente?

Muchas veces tenemos una visión tan mala sobre nosotros mismos, que nos parece imposible creer que seamos especiales para alguien. Al menos ese fue mi último pensamiento antes del accidente.

Me desperté con mucho dolor en el cuerpo otra vez, hace una semana que sueño lo mismo, y eso no suele ocurrir en mi.
Ya pasó un mes de la muerte de los padres de Mateo y la verdad creo que debi abrazarlos unos segundos más antes de lo ocurrido, aunque ni siquiera creí que nos pasaria todo esto.

Decidi levantarme de la cama, fui hasta el baño, me cambie y lave mi rostro, recogi mi cabello en una coleta y bajé las escaleras.

-Mamá, ¿Estás ahí?

No escuche ninguna respuesta, así que supe que estaba sola.
Encontré una carta en la puerta de la heladera. -¿Qué hora es? Me pregunte a mi misma_-.

Carta:
¡Mi niña! Tu padre y yo hicimos un viaje afuera del país, volveremos en un mes. Te amamos, cuidate mucho.

Di un suspiro y me puse a preparar algo para desayunar. Estaba completamente sola en una mansión. -¿Qué prodria hacer ahora?- Me fijé la hora y era muy temprano para llamar a mi mejor amiga, que seguramente estaba durmiendo.
Decidi ir a ver una pelicula en mi habitacion con unos chocolates y una soda.
Me gustan las peliculas de horror, así que puse todo en su lugar y decidi pasar el tiempo así.

Luego de ver la pelicula y acomodar todo, llamé a mi mejor amiga para saber si estaba dispuesta a hacerme conpañia para comer. Despues de todo estaba sola.
La llamé a su movil, tardó unos segundos en atenderme.

~¡Hola Nena!

-Oye! ¿Puedes venir a mi casa y asi comemos algo?

~Claro que si, dentro de 10 minutos voy para allá.-Y me colgo-

Por más que trataba de evitar pensar en el sueño de esta mañana, no podia. Pensar en que todo paso hace 1 mes, no podia para de pensar en lo mal que la deberia estar pasando él... -Estaba en la sala, hasta que la voz de Rosario me saco de mis pensamientos-

-¡¿Señorita Sanchez?!

~¿Sí?

-¡Su mejor amiga está en la entrada!

~Dejela pasar, por favor.

La mucama asintió y se fue. A los minutos entro mi mejor amiga y la recibi con un abrazo, ya que hace mucho no nos veiamos.

-Hola Nena! ¿Como has estado?

~Masomenos, ya tú sabes por todo lo que estoy pasando...

-Te entiendo...¿Cómo está él? ¿Lo viste después de lo sucedido?

~Él.... -Recorde otra vez aquel sueño de esta mañana, me dio un escalofrió en todo el cuerpo y por un momento creí que estallaria en lagrimas- Pues no lo vi desde lo que ocurrió y solo espero que no vaya a hacer una locura.

- Debes hablar con él, creo que es mejor si puedes lograr que se quede aquí con vos, ¿Qué opinas?

~He estado tratando de contactarme con él, pero no pude.

-Ah...¿Crees que....esté bien?

~No lo sé. Pero me preocupa bastante.

-Deberíamos cocinar algo juntas, ¿Quieres? Y asi te distraes de todo por un rato.

~¡Está bien! -Dije con el poco animo que me quedaba y la acompañe-.

Luego de haber almorzado, le dije a las mucamas que me ayudaran a limpiar un poco ya que con Valentina hicimos un verdadero desastre, hace mucho no estaba con ella, la verdad hacia mucho, mucho tiempo. Y hace mucho tiempo, no sonreia de esta manera.