capitulo 19

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hola mis bellos lectores!!

aquí con otra actualización, bueno les dejo leer...


Capitulo 19

Al día siguiente tuvo lugar en Longbourn una nueva escena: Collins se declaro formalmente. Tras decidir hacerlo sin pérdida de tiempo, puesto que su permiso se extendía solo hasta el sábado siguiente y puesto que no abrigaba sentimientos de desconfianza, se puso a ello con toda la circunspección que el suponía había de contribuir al feliz éxito de su empresa. Así, cuando después del almuerzo encontró juntas a Mrs. Rojanapat, a Arthit y a una de las menores, se dirigió a la madre de Arthit con estos términos:

-¿puedo confiar en que accedas, dado tu interés por tu bello hijo doncel Arthit, si solicito el honor de una conversación a solas con él esta mañana?

Antes de que Arthit hubiera tenido tiempo de otra cosa que sonrojarse de sorpresa, Mrs. Ronajapat contesto de inmediato:

-¡oh!, querido, por supuesto! Estoy segura de que Arthit se considerara dichoso. Ven, Kitty, te necesito arriba.

Y tomando sus cosas se apresuro a partir, mientras Arthit exclamaba:

-querida mamá, te suplico que no te vayas. Nuestro primo nada tiene que decirme que tú no puedas escuchar. De lo contrario, yo también me iré.

-no hagas tonterías, hijo mío. Deseo que te quedes aquí (y al ver que Arthit, apenado y azorado, de verdad se disponía a retirarse) insisto en que te quedes y escuches lo que Collins tiene que decirte. (huye Arthit...run... run ...ok me calmó)

Arthit no pudo oponerse al mandato, y cuando tras un instante de reflexión le hizo saber que sería más prudente que lo que tuviese que ocurrir ocurriera cuanto antes, volvió a sentarse, tratando de ocultar sus sentimientos que oscilaban entre la pena y el deseo de lanzarse a reír. Mrs. Rojanapat y kitty se fueron, y en cuanto eso ocurrió Collins comenzó:

-creo, querido Arthit, que tu modestia, lejos de perjudicarte, se suma a tus otras perfecciones. Habrías sido menos amable a mis ojos si no hubiera mostrado renuncia, pero permíteme asegurarte que tengo de tu respetable madre para esta entrevista. Apenas podrás dudar del objeto de mi discurso, pero tu natural delicadeza acaso te lleve a disimularlo; mis intenciones son demasiado claras para dar lugar a error. Prácticamente desde que entre en esta casa te elegí como compañero de mi futura vida. (miente con todos sus dientes, había elegido a tu hermano, no le creas....:/ ) pero antes de hablar de mis sentimientos quizá sea mejor para mi apuntar las razones que tengo para casarme, y más aun para venir al condado de Hertford deseoso de buscar acompañante es este caso esposo, como en efecto de hecho.

El que Collins hubiese expuesto su pretensión con tanta solemnidad casi hizo reír a Arthit, que no pudo aprovechar la corta pausa que le concedió para intentar detenerlo, de modo que Collins continúo:

-mis razones para casarme son: primero, que tengo por obligación de todo clérigo en circunstancias favorables (como son las mías) dar ejemplo de matrimonio en su parroquia; segundo, que estoy convencido de que eso contribuirá poderosamente a mi felicidad; y tercero (lo que acaso debería haber mencionado antes), que el hacerlo es advertencia y recomendación particular de la muy noble dama a quien tengo el honor de llamar mi protectora. Dos veces se ha dignado darme su opinión, aun cuando no se lo pedí, sobre ese punto; y el mismo sábado último por la noche, antes de abandonar Hunsford, durante nuestro juego de cartas, y mientras Mrs. Jenkinson arreglaba el asiento de Miss de Bourgh, me dijo: "señor Collins, tiene que contraer matrimonio. Un clérigo como usted debe estar casado. Elija usted bien, elija un verdadero acompañante, por lo que a mí me toca; y por lo que a usted atañe, procure que sea de buena familia, pero capaz de saber emplear bien ingresos modestos. Ese es mi consejo. Busque usted lo mejor que pueda y después vengan a Hunsford y los visitaré" permíteme de paso observar, mi bello primo, que no estimo como la menor de las ventajas que están en mi mano contar con la atención y la bondad de lady Catherine. Tendrás ocasiones de juzgar su carácter y sus exquisitos modales, y comprobar que son más exquisitos de los que yo acertara a describir, y creo que tu ingenio y tu viveza serán bien recibidos, especialmente al templarse con el respeto y la humildad de su rango impone inevitablemente. Todo esto en cuanto a mis propósitos de matrimonio, en general; resta por decir por qué me he dirigido a Lonbourn en lugar de permanecer en mi propia parroquia, donde hay muchos muchachas y donceles amabilísimos. Pues el hecho es que siendo el heredero de esta hacienda cuando tu honorable padre fallezca, y que conste que le deseo larga vida, no quedaría satisfecho sin elegir acompañante de entre sus hijos, para que la pérdida de estas sea la menor posible al sobrevenir el triste suceso. Tal ha sido el motivo, querido primo y espero no desmerecer por ello ante ti. Y ahora no me resta sino asegurarte, del modo más vehemente, la sinceridad de mi afecto. En cuanto al pago, me es por completo indiferente, y nada he de pedir a tu padre que sepa que no puedo cumplir; y así, las mil libras al cuatro por ciento, que no han de ser tuyas hasta la muerte de tu madre, es todo lo que has de aportar. Pero en cuanto a eso, nada diré, y puedes estar seguro de que ningún reproche sobre el particular saldrá de mi boca una vez que estemos casados.

Al llegar a este punto, se imponía, para Arthit, interrumpirlo.

-vas demasiado rápido (exclamo Arthit) olvidas que yo no he contestado. Permíteme hacerlo sin mayor pérdida de tiempo. Acepta mi agradecimiento por el cumplido que me haces. Agradezco mucho el honor que significa tu proposición, pero me s imposible dejar de rechazarla.

-no es nuevo para mí (replico Collins con gesto solemne) que los jóvenes tienen la costumbre de rechazar proposiciones que en secreto piensan aceptar más tarde, y que en ocasiones no me siento desalentado por lo que acabas de decirme, y espero conducirte al altar dentro de poco. (este está loco...cu-cu cu-cu)

-después de lo que acabo de decir (exclamo Arthit) me parecen inexplicables tus esperanzas. Te aseguró que no soy de esos jóvenes, si es que existen, que osan arriesgar su felicidad al azar de que se les declaren una segunda vez. Procedo con la mayor seriedad en mi rechazo. No puedes hacerme feliz, y estoy convencido de que yo tampoco puedo hacerte feliz a ti. (uyyy!!! Eso dolió pero se lo merece por andar de adelantado).... además si tu amiga Lady Catherine me conociera, estoy seguro de que me encontraría, desde todos los puntos de vista, poco adecuado para ser tu esposo.

-si fuera cierto de que lady Catherine pensara de ese modo...(dijo con mucha gravedad Collins) pero no puedo imaginar, de ningún modo, que lo desaprobara. Y puedes confiar en que cuando yo tenga el honor de volver a verla le hablare en los términos más elogiosos de tu modestia, sentido de la economía y demás excelentes cualidades. (no pues no entiende este)

-en verdad, Collins, que tus alabanzas serán innecesarias. Permíteme juzgar por mí mismo y hazme el favor de creer lo que te digo. Te deseo felicidad y riqueza, y al rehusar tu mano hago cuanto puedo para que lo consigas. Así, podrás tomar posesión de la hacienda de Longbourn cuando llegue el momento, sin reprocharte nada. Por lo tanto, demos esta cuestión por definitivamente resuelta.

Arthit se puso de pie, y habría abandonado la sala si la voz de Collins no lo hubiera obligado a detenerse.

-cuando próximamente tenga el honor de hablarle de nuevo sobre este asunto (dijo Collins) espero recibir respuesta más favorable que la que acabas de darme. Aunque estoy lejos de considerar cruel tu actitud, pues bien sé que es costumbre de los jóvenes rechazar las proposiciones a la primera de cambio, y quizá hayas dicho todo eso para animarme a insistir, todo lo cual es muy propio de la delicadeza del carácter de los propios donceles.

-la verdad, Collins (exclamo Arthit con vehemencia) me confundes. Si lo que he dicho hasta ahora puede ser considerarse como un estimulo, no sé de qué modo expresar mi rechazo para que te convenzas de el....... ( me confunde a mi también, un rechazo es un rechazo, este men está loco, jajajajaja pobrecito)

-permíteme, querido primo, que siga creyéndolo así. Mis razones para ello son estas: no creo que mi mano sea indigna de tu aceptación que la situación que te ofrezco deje ser altamente apetecible. Mi posición social, mi relación con la familia de Bourgh y mi parentesco contigo son grandes circunstancias en mi favor, y habrás de considerar, además, que aceptar de tus numerosos atractivos no es seguro que se te haga otra proposición de matrimonio. (yo si le doy con la silla en la pura cara...:/ ) Tu fortuna es, por desgracia, tan escasa que con toda probabilidad anulara los efectos de tu amabilidad y gratas cualidades. Y dado que por eso deduciré que no procediste con sinceridad al rechazarme, optare por atribuirlo al deseo de acrecentar mi amor con este fracaso, de acuerdo con las normas habituales de las mujeres elegantes.

-puedes estar seguro de que nunca he pretendido hacer ostentación de semejante clase de elegancia, consistente en atormentar a una persona respetable. Antes bien, te pido encarecidamente que me juzgues sincero. Te agradezco el honor que me has hecho con tu proposición, pero en modo alguno puedo hablar con mayor franqueza. No me tomes por un doncel elegante que pretende atormentarte, sino por un muchacho doncel que dice la verdad de corazón.

-siempre resultas encantador (exclamo Collins, con aire de espontanea galantería) y, estoy firmemente convencido de que mi proposición será aceptada cuando obtenga la sanción de la autoridad de tus excelentes padres.

Ante tal perseverancia en querer engañarse a sí mismo, Arthit no contesto, y se retiro sin decir palabra, decidido a que si persistía en considerar sus repetidas negativas como un modo de animarlo, recurriría a su padre, cuya negativa habría de quedar expuesta de tal modo que resultase decisiva, y cuyo proceder, por lo menos, no podría confundirse con la afectación y coquetería de un doncel elegante.


se viene el otro cap.  

Orgullo y Prejuicio (kong y Arthit) SOTUSWhere stories live. Discover now