Playmate ; minv

℗rólogo

—Asi que, quieres convertirte en un playmate. No me digas que quiera escupir en tu cara de la gran broma que me estas haciendo, chico.

—¡No es una broma! ¡Se lo ruego, señor Park! mi única oportunidad para salvar la vida que tengo y a mi familia es poder trabajar en esto.

—¿Es que no te has dado cuenta del golpe de cabeza que te has dado? Eres un hombre, aquí solo se permite trabajar mujeres.

─Sé que las personas más famosas han trabajado para esta gran organización de revistas, pero... —suspiró— ¿no ha pensado la idea de crear una nueva imagen para el futuro de PlayBoy?. Si acepta, tengo la seguridad de que su economía mejorará en el tiempo en el que está más que ahora. Y también, debo confesar que he escuchado que a los hombres les gustaría la idea. "¿Un hombre exponiendose en las revistas PlayBoy?", pensarían lo primero en su cabeza, pero así es, mataría como dos pájaros de un tiro la curiosidad de los tipo de poses, las vestimentas que me harían, las entrevistas que me realizarían. Y sobretodo no debe faltar, el contenido sexual ante el poder de la lujuria. ¿No lo cree, Sr. Park?.

El rubio escuchó cada palabra del muchacho que se encontraba al frente suyo de la gran oficina de su mansión. Sonrió malicioso. Al parecer de lo poco que lo conocía, sus pretenciones son imparables de la confianza y la valentía que le estaba proponiendo aquello.

Porque Park JiMin le gusta jugar con las personas, y con Kim TaeHyung problablemente sería ya su víctima.

—Vaya muchacho, me impresionas con las cosas que dices. —se levanta de su asiento dirigiendosé hacia TaeHyung, se detiene, mirando el traje elegante que lleva éste. (No era una persona cualquiera mientras estás charlando con el dueño actual de PlayBoy)— Si acepto esa propuesta tuya, no te vayas a arrepentir nada de nada sobre las cosas que vayas a hacer luego de que trabajes en esta empresa.

Se puso a su lado luego de que ambos se miraran de cara en cara. JiMin sonrió más de lo que también estaba aprovechando de sus intenciones .

—Y también de que tendrás noches conmigo a solas...—susurró cerca de su oido— Cada playmate tiene la misma regla que hacer y jamás puede negarla... Ahora, ¿no te tinca la idea de convertirte en una?.

TaeHyung ya pensó antes de lo que haría tales obstaculos, no le importaría si perdería la virginidad por el trabajo. Si el dinero es lo que únicamente tiene el objetivo de necesitarlo, lo haría. No le importaría si estaría sufriendo.

—Sr. Park, con el tal deseo de ser suyo una noche no habría problema. Si es por trabajo, bien. Los sentimientos están prohibido de todas maneras, ¿no es así?. —mostraba su tal sonrisa sincera, amplia, sin ningún problema— ¿Y bien, me acepta ser su nueva estrella?.

Si las cosas iría mal para la empresa por culpa del chico, solamente tendría que echarlo y fin del asunto. Las polémicas volaría por cada parte del tal hecho que por primera vez en la historia del PlayBoy, va a integrarse un hombre a poder exponer su cuerpo en portadas para el glamour.

A Park JiMin no le importaría eso, le gusta experimentar  lo nuevo que se le ponga encima.

—Debes aprovechar que tienes una bonita cara y un cuerpo admirable para mostrar durante las horas de fotos, muchacho. —le miro nuevamente de reojo desde los pies hasta la cabeza, fascinado.

De verdad, estaba ansioso por lo que va a pasar las cosas de ahora en adelante.

Estrecharon finalmente las manos dando por conocer el contrato.

—Bienvenido a la mansión PlayBoy, conejita.

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No se que acabo de escribir pero las ideas que tengo en mi cabeza me estan gustando, espero poder continuar lo más pronto posible.
Y AMO LA PORTADA QUE HICE ESO BAIS.
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