Team Pepinillos

1- Pequeña presentación

- ¡Hola, mis queridos huéspedes! - Decía aquel chaval de apariencia extremadamente delgada. Parecía un palo, por lo que sus colegas lo apodaban con el apelativo de "Palito". - ¡A día de hoy, nuestro team se fue a tomar porculo! ¡Pero por suerte no todo está perdido! ¡Necesitamos reclutamientos!

- ¿Y tenés alguna idea, puto? - Comentó con tono desconfiado una papa parlante. Sí, no han leído mal... ¡Una jodida patata que habla! Ésta siempre llevaba puesto un gorro ushanka de color verde, ya que le gustaba vestir como el personaje icónico de Kyle Broflovski (South Park).

- ¡Como vuelvas a llamarme así juro que te expulso del grupo, tubérculo culiao! - Cada vez que le decían algo despectivo a Palito, el mismo mencionado se enojaba. ¿Cómo podían faltar al respeto a tan prodigioso líder?

- ¡Sólo estoy siendo realista, BB! - Expresó nerviosamente.

- ¡NO ME LLAMES ASÍ, CABRONA! - Los comentarios de ella lograban irritarlo de forma exagerada. Siempre le había agarrado manía.

- ¡¿Quieren dejar las peleas matrimoniales para otro momento?! ¡Ésto es serio! - Exclamó Repollo, la tía de Patata.

- ¡Cállate, esposa de Oreo! - Respondió aún más emperrado el anoréxico.

- ¡SOMOS AMIGOS CON DERECHOS! ¡CERRA EL ORTO! - Gritó con mala ostia la pelirroja.

- Ay, Dios... - Suspiró la joven damisela de alta gama. Señorita, un nombre perfecto para una chica tan dulce como ella. Simpática, pero de carácter rudo cuando las cosas se tuercen.

A su lado se encontraba Serenity, o "Sere" para abreviar. La muchacha dormía plácidamente, ya que la marihuana que había consumido anteriormente la había dejado totalmente atontada. Sere y Seño son pareja desde largo período, por eso andaban juntas la mayor parte del tiempo.

Detrás de la fila de sillas, se situaban unos pocos miembros del equipo al cual pertenecían todos: El Team Pepinillos. Sólo los más fieles al mismo han sobrevivido sin llegar a traicionar a su creador innato (Palito).

Mientras los tres miembros discutían por boludeces (como siempre), PSN se encontraba en el último puesto, ligando con una mujer llamada Tula. Ese era el nombre de su bebida favorita, así que no es de extrañar que el pobre hombre se quedase embelesado ante una belleza de palabra.

Ésto afectó a Mantequilla (tenía como crush a PSN). Pese a ser más que apreciable lo que sentía por él, la zagala no quería confesar aún sus sentimientos (era muy tímida).

Por último, McLongDick cuidaba de sus nietos: Eric y Trent. Ella era la madre de Patata (de una manera u otra todos eran familia). También pasaba completamente del discurso semanal de Palito. ¡Era demasiado aburrido!

Mientras Repollo, Patata y Palito discutían sin rumbo alguno, los demás pasaron HORAS aguantando el festival de insultos.

- ¡NO AMO A OREO, CTM! - Ya, enfurruñada, optó por molestar al enano de suma delgadez. - ¿Y para cuándo tu boda con Patata? ¿Uh? ¡Que yo sepa están casados! Pero... ¡¿DESDE CUÁNDO?!

- ¡Eso no te incumbe!

- Él se autoproclamó mi marido. - Confesó la moza con aspecto de papa.

- ¡HIJA DE PUTA! ¡NO SOMOS NADA! ¡JAMÁS LOS SEREMOS! ¡TE ODIO! - Se cruzó de brazos y resopló insistentemente. Parecía un crío.

- Bueno... - Eso la ofendió, pero ya estaba acostumbrada a tener que tolerar este tipo de comportamientos en los demás.

- ¡Pff! ¿Es en serio? ¿Entonces por qué dijiste que era tu mujer?