En busca de la estrella. (Louis Tomlinson)

Capítulo 21

Capítulo 21

No me faltaba demasiado para babear el libro de historia. Viernes, última hora. Dios, líbrame de esto porque no es normal dormirse a las 2 de la tarde.

-¡Amstrong! ¿Está durmiendo de nuevo en mi cl... -Robinson fue interrumpido por alguien tocando la puerta. Que se diese prisa, que me esperaba bronca.

Toda la clase se giró y no fue hasta que oí la voz de Rose, que yo también me giré.

-Buenos días, señor Robinson. Busco a Lilly Amstrong, la requieren. -sonrió.

-¿Quién la requiere?

Vi como Rose se acercaba a ese cascarrabias y le susurraba algo al oído. Muchas miradas estaban fijas en mí, por lo que me estaba poniendo atacada de los nervios y con la bilis subiendo. Me oculté tras mi pelo.

-Amstrong. -me llamó el profesor. -Ve con Rose a dónde le esperan y que no vuelva a verle distraída en mi clase.

-Y recoge tus cosas cariño, no vas a volver en lo que queda de hora. -añadió Rose sonriéndome.

Felizmente recogí mis cosas y las guardé en la mochila para salir tras Rose de clase. Me había librado de bronca. Ole yo.

Lo que no quitaba que la gente murmurase cosas como ¿A dónde irá? ¿Qué habrá pasado? Y así. Claro, Rose, es que no puedes venir así de guay y decirme que me buscan pero no decir dónde.

Iba siguiendo a Rose por los pasillos con la mochila sobre mi hombro. Ella iba tan feliz en vete tú a saber qué dirección. Yo salgo de clase tan feliz, pero ni puñetera idea de a dónde iba.

-Oye Rose... ¿quién quiere verme? ¿El director de nuevo? -le pregunté flojito. Ella volteó sonriendo aún. Otra como Louis y Trish. Ay, señor. Por lo menos Rose era agradable. Louis me irritaba. Y Trish... bueno, Trish era Trish. A la cual debería ver porque le he estado dando esquinazo todo el día.

-Oh no cariño, Robert no quiere nada contigo hoy. Te llama Louis.

Me paré. ¡Y lo dice tan feliz! Yo no quiero ir con ese a vete tú a saber qué hacer. No me toca terapia, no tiene motivos para llamarme. ¿Va feliz de la vida o qué?

-¿Qué pasa? -me miró extrañada.

-¿Louis para qué?

-Pues no sé cielo, supongo que te toca psicólogo.

-De eso nada, me tocaba ayer, y aguanté más de una hora con él.

-Sígueme tonta. -me incitó.

-No que va. Me vuelvo a historia.

-Cielo -me cogió de la muñeca cuando estaba dándome la vuelta. -, Louis ha estado preguntando a todo el mundo por ti, de verdad creo que quiere verte y no sé para qué, pero se ha estado preocupando mucho. No le he querido decir que prácticamente todos los profesores se llevan genial contigo -se le escapó una risilla. -, pero supongo que él será uno de los próximos.

-No, de eso nada.

-¿No te cae bien?

-¡No! ¿Por qué nadie lo entiende?

-Creo que eres la única persona a la que no le cae bien. -sonrió. Estábamos andando en dirección al aula del psicólogo escolar y yo ni me enteraba con tanta charla. Rose es así.

-De verdad Rose que no quiero ir... -medio hice un berrinche.

-Cariño no sé qué problema tienes con él. Es joven, simpático, muy guapo... -levantó las cejas al decir esto.