Trillizos Sin Limites [EDITANDO]

1. Los Trillizos

En la gran ciudad de Patolandia, como su nombre lo dice la mayoría de sus habitantes son patos y entre ellos esta Rico MacPato, el pato más increíble, valiente, intrépido, aventurero y rico del mundo. Pero desde hace 10 años dejo las aventuras, la razón es desconocida y lo que nadie sabe es que durante ese tiempo aparecieron 3 patitos muy especiales.

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Un bote de la bahía se sacudía como loco por la persecución que había adentro, un pato marinero mayor estaba huyendo de un patito con sudadera verde.

Donald: ¡¡Aaaaaah!!

Luis: ¡Por favor no te muevas tío Donald! -le grito molesto.

El pequeño le estuvo persiguiendo desde hace casi dos horas y ya harto decidió terminarlo de una vez, entonces de repente desapareció y volvió a aparecer sobre la espalda de su tío, con un movimiento rápido le quito la ropa de marinero azul que tenia.

Este cayo de centón en la cocina justa al lado del trillizo rojo que estaba sobre una banca usando la estufa.

Hugo: buenos días tío Donald -saludo mientras hacia el desayuno.

Luis: no uses esto en tu entrevista de trabajo -la tiro en la lavadora, o lo que creyó que era eso y le mostró un traje elegante- tienes que vestirte para el puesto que quieres, no el que tienes, que es ninguno.

Donald: ¡Hugo aléjate de la estufa te vas a quemar! -dijo tratando de sacar su traje solo recibiendo una cachetada de este.

Hugo: pero es un día especial y para eso se necesita un desayuna especial -le entrego un plato con una montaña de deliciosos panquekes con jarabe de chocolate que escribía "confiamos en ti tío Donald."

Luis: *(has mejorado en la cocina)* -pensó el patito verde pero sus pensamientos habían sido transmitidos a su hermano mayor.

Hugo: *(estuve practicando)* -respondió y sus pensamientos fueron transmitidos al menor.

Donald: ¡Niños, pónganse sus chalecos salvavidas, hay que estar atentos por si se hunde el bote! -decía mientras se ponía el traje elegante y los dos patitos pusieron miradas en blanco ante eso.

H,L: sí tío Donald -dijeron disgustados, de mala gana se los pusieron y les quedaban muy grandes.

Donald: -termino de ¿Donde esta su niñera? -la llamo- ¿Donde estas? ... ¿Qué? ... ¿Te dieron la una nueva dirección?

Los hermanos se lanzaron miradas de cómplices.

Donald: ¿A que hora puedes llegar? ... rayos -exclamo y colgó- ¿Dónde puedo encontrar otra niñera? -miro la hora- ¡¡las 10!!

H,L: -escucharon y se impresionaron- ¡Tienes que irte!

Los dos empujaron a su tío fuera del bote, pasando por la cubierta hasta que lo sacaron a los muelles antes de que se dieran cuenta de lo que estaba pasando.

Donald: esperen, esperen, no puedo dejarlos solos -dijo reaccionando.

Luis: sobreviviremos un par de horas -dijo totalmente despreocupado logrando transmitir eso al mayor.

Donald: ¿Un par de horas? -reflexiono sobre eso y luego suspiro más relajado- esta bien, pero usen esos chalecos -comenzó a alejarse pero se detuvo en seco al escuchar como su bote se encendía, dio la vuelta y volvió poniendo una cara enojado- ¿Y Paco?

Luis: durmiendo.

Hugo: ¿Quien es Paco?

Dijeron casi al mismo tiempo, Luis lo miro con cara de ¿Enserio? Su tío entendió lo que pasaba paso entre ellos volviendo al bote.