Capítulo único

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Peter lo sabía... la había cagado.
No era la primera vez que metía la pata, sin embargo, era la única ocasión en la que la había CAGADO en mayúsculas, en cursiva y con negritas.
Peter estaba en el altar, con su prometido a su lado y los ojos de todos sus familiares y amigos sobre él.
Logan, con su muy elegante traje negro, lo miraba con una ceja alzada. Peter tragó hondo, pues no solo la había CAGADO, sino que seguía haciéndolo; no recordaba una sola palabra de sus votos.
Recordó cómo Charles y Wanda pasaron semanas ayudándole a poner en palabras lo que sentía por su futuro esposo, pero en esos momentos Peter no podía pensar en otra cosa además de que debería intentar respirar hondo para no morir de nervios.
Lo que le parecieron horas (no más de un par de segundos, en realidad) bastaron para que Logan se diera cuenta de lo que estaba sucediendo. Peter estaba rojo hasta las orejas, y movía su pié rápidamente, casi deseando escapar. Sin embargo, él sabía que no se arrepentía de la boda, era algo que ambos planearon durante meses, y Peter parecía incluso más emocionado que él. ¿Qué era, entonces?
No fue tan difícil descublirlo; no recordaba sus votos. Peter tenía una memoria promedio, pero se ponía muy nervioso a la hora de hablar en público acerca de sus sentimientos. Puede que esa fuese la razón.

Logan tomó su mano, y el más joven dejó de temblar un poco. Por su cabeza solo pasaban algunos de los momentos que pasó junto con Logan, momentos que le habían ayudado a planear sus votos.

Estaba
En
B l a n c o

Peter recordó un episodio de Friends (una de sus series favoritas), donde Ross dice accidentalmente el nombre de Rachel en lugar del nombre de Emily durante los votos el día de su boda. No era el mismo error, pero se sentía igual de estúpido.

Por su mente solo pasaba la tonada de algunas canciones que había escuchado antes de la boda para tranquilizarse, sin embargo, no estaban haciendo mucho efecto hasta el momento en disminuir sus nervios.

Hasta que...

Oh.

— Eres mi fuego — comenzó, y su voz sonó más segura de lo que imaginó, haciéndolo sonreír. — Mi único deseo
— presionó más fuerte la mano de Logan, que lo miraba un poco extrañado.

— Cree cuando lo digo, que yo lo quiero de esa forma.

— ¡Di por qué! — Escuchó el susurro de Warren, que estaba al lado suyo como padrino, y Peter tragó en seco.
El maldito de su amigo lo había descubierto.

— Tú me haces sentir como una virgen tocada por primera vez. — dijo, y Logan mordió su lengua, intentando mantenerse sereno y no reír. Esa frase había confirmado sus sospechas; Peter había olvidado sus votos y los reemplazaba con letras de canciones.

— Podría morir todos los días esperando por tí. Cariño, no estés asustado, te he amado por mil años, te amaré por mil más. — Dijo Logan, y Peter lo miró con ojos muy abiertos.

Un par de segundos después, ninguno de los dos pudo contenerse, y comenzaron a reír frente a la mirada atónita de sus familiares y amigos. La mayoría los acompañó y riéron juntos, aunque hubieron unos pocos que no entendieron qué era lo que estaba sucediendo.

Peter juraría que se trataba del mejor día de su existencia, no solo por el hecho de casarse con el amor de su vida, sino porque, una vez más, Logan le demostraba que lo amaba con todas sus virtudes y sus defectos (como olvidar sus votos en pleno día de su boda). La cereza del pastel había sido escucharlo citar un fragmento de "A thoasand years", esa canción melosa de la saga de películas que tanto él como Wanda amaban (de manera irónica, obviamente) y que habían visto completas con el único objetivo de fastidiar a Logan y Peter Quill, el novio de su hermana.

Ambos se abrazaron, y Logan le susurró que estaba bien, que no importaba si había olvidado sus votos.

Al final lo más importante no era lo que tenía que decir, sino lo que ambos sentían y el amor incondicional que se demostraban todos los días, desde que se vieron por primera vez.
















×××
Cortito y bonito, creo. ¿Les gustó?

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