Trébol

8°

Otro cumpleaños más sin Gary, estaba feliz pero a la vez ausente, Pikachu jugaba en el césped con sus amigos (los Pokémon de Misty, Brock y Tracey) a la vez que también con sus nuevos compañeros, un Charmander muy obstinado, un Squirtle muy orgulloso y un Bulbasaur muy terco, los cuales Ash había logrado conseguir como amigos.

Misty se sentó a su lado y observó hacía el frente viendo la misma escena que él veía, a la par que ésta le decía:-¿Qué tienes Ash?, estás igual de ausente que el año pasado, ¿te sucede algo?-.

Ash meditó un poco y suspiró:-no pasa nada, yo...-.

En ese mismo instante la pelirroja lo abrazo por sorpresa y sonriendo le dijo:-puedes llorar, nadie te juzgará, tu mamá hace un rato que se fue a comprar más cosas para tu cumpleaños y, tanto Brock como Tracey están muy entretenidos con May y Max, tanto que ni siquiera notaron nuestra ausencia-.

Ash no supo porqué pero se resguardo en aquel abrazo y, aunque luchó por contener las lágrimas, al final no pudo pararlas; cada año que pasaba era más duro, sabía que estaba más cerca de cumplir su meta, pero, temía que tantos años hubiesen creado una brecha extensa entre él y la persona a la que tanto amaba.

-Es tan duro, sé que debo ser fuerte y pensar lo mejor, pero aún así tengo miedo de que encuentre a alguien mejor y...-.

-¿Confías en él?-, Misty lo encaró con aquella pregunta.

A lo cual, Ash contestó sin titubear:-¡Por supuesto que sí!-.

-Entonces, no debes sentir temor, él seguramente está pasando por lo mismo que tú y no debes seguir atormentándote con ello, si están destinados a estar juntos, pase lo que pase lo estarán, ya ves lo que paso con Brock y conmigo, por más que intentamos nadar contra corriente al final ambos aceptamos que nos queríamos y, lo que intento decir es..., si su amor es fuerte resistirá lo que sea y se interpondrá contra quién sea que se oponga-.

En ese momento el pelinegro se secó los ojos y sonrió a la par que exclamó con nuevos ánimos un:-¡Gracias!-.

-No hay de que, para eso estamos los amigos, además..., si sigues así preocuparás a tus pobres Pokémon y..., mira quiénes están ahí, esos bribones seguro tienen hambre-, señaló al otro lado de la cerca y con ello intentó cambiar un poco la conversación y el ánimo de su amigo.

-Jaja, sí...., ¡Oigan, vengan a festejar!, Jessie, James, ¡Oigan!- y, con aquel grito llamó a aquellos rebeldes jóvenes que observaban con grandes ojos y mirada hambrienta la comida que había en aquella celebración.

Al principio se negaron a celebrar el cumpleaños de aquel "campesino" como solían llamarlo, pero al final accedieron y entre risas y juegos se mezclaron con los otros jóvenes que habían sido invitados a aquel festejo, llenando de alegría todo el lugar; por ese día habría una tregua entre el equipo Rocket y ellos, por ese día Ash se permitiría celebrar y, a partir de ese momento no volvería a dudar, pues lo que Misty había dicho era justo lo que necesitaba escuchar, antes había jurado que no habrían más lágrimas y había fallado, pero ahora su resolución era más fuerte que nunca, ya que tenía que mitigar las inseguridades y su falta de confianza si deseaba lograr lo que quería y eso era llegar a Gary.

Quién diría que después de comentarles sobre su "Historia" a aquellos que orgullosamente llamaba sus amigos hace más de un año, llegarían a aceptarlo tal cual era y a ser su mayor apoyo, sus cómplices, confidentes, amigos y consejeros, así pues se permitió creer en la gente y abrir más su corazón, ya que antes de ellos solo tenía a su madre y a Gary, aunque con éste último las cosas habían sido muy extrañas desde el principio y sin embargo, no hubiese querido que fuese de otra forma, ahora sus amigos sabían su secreto y lo aceptaban por lo que era, sin tener que aparentar y como siempre había sido, frente a ellos podía ser el verdadero Ash Ketchum, ese chico que nació y creció en Pueblo Paleta y que sueña con ser maestro Pokémon y ver nuevamente a Gary Oak.