El origen de las visitas nocturnas

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Tiempo actual

"Definitivamente, esto no puede ser peor"

Bridgette Cheng, vagaba sola por las heladas calles de parís; Estaban a mediados de enero, y el frio era infernal, pero resulta que Hawk Moth poco parece importarle el clima, mucho menos la hora, puesto que un akuma se hizo presente poco después de medianoche, sacando a los héroes de sus calientes y cómodas camas para enfrentarse al villano en aquel tiempo tan tempestuoso.

Afortunadamente, fue fácil, además que el mal humor de ambos era notorio. De hecho, Chat Noir casi no hizo sus usuales coqueteos y se concentró en su trabajo (algo realmente sorprendente para la chica). Pero al final, hubo un pequeño problema con el objeto que le otorgo el Amuleto Encantado, puesto que le costó descifrarlo más de lo normal, perdiendo valiosos segundos antes de su des-transformación.

Trato de combatir contra el reloj, pero la suerte no estuvo de su lado esta vez, puesto que su transformación se acabó a 15min de llegar a su casa. Y ahora, en piyama y ningún abrigo que la cubrirse, frotaba sus brazos en un intento inútil de conservar el calor. Titiritaba con frecuencia para preocupación de su kwami, y caminaba presurosa mientras inventaba una excusa creíble para sus tíos. En eso, una fuerte ventisca le erizo la piel, así como copos de nieve comenzaron a descender sobre a la ciudad.

"Esto tiene que ser una broma"

Bufo la azabache con molestia.

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Horas antes

En su mansión, Félix Agreste intentaba leer tranquilamente sobre su cama.

-¡Quiero quesooooooooo! – si... intentaba.

-¿acaso no acabas de comerte tu ración? – pregunto con frustración.

-¡Con esa pequeña porción intentas matarme de hambre! – chillo el gato negro.

-¡Era una rueda completa! – el rubio le mato con la mirada cuando el pequeño "engendro" comenzó a reír a carcajadas "Claro, solo intenta joderme la vida" pensó en un bufido.

Sabiendo que no podría disfrutar de su lectura, apago las luces dispuesto a descansar, aunque el día siguiente seria de descanso (por primera vez en dos meses) quería aprovecharlo al máximo, por lo que iría con Allan a un evento que habría en el museo, así como al cine y otras actividades. Se colocó sus auriculares para escuchar algo de música clásica y dormir un poco.

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En un hermoso valle, en medio de cientos de rosas, su Lady le esperaba con los brazos abiertos. Beethoven se escuchaba en el aire, corrió don todo lo que le dieron sus piernas, y, cuando llego al lado de su amada, la tomo de la cintura para bailar el vals.

Ambos se miraban fijamente a los ojos, sonrientes por estar juntos al fin de esa forma. La torre Eiffel se postraba imponente sobre ellos, y los colores del atardecer completaban aquel escenario tan romántico.

-¡Oh, Gatito! – Exclamo su princesa en un suspiro – nunca pensé que fueras tan buen bailarin...

-Te sorprenderían todas mis virtudes, Bichito – presumió con una sonrisa.

-Claro que reconozco tus virtudes – siguió hablando con ese tono de tonta enamorada – eres fuerte, valiente, inteligente y muy, Muy atractivo.

-¿de verdad lo cree, My Lady? – pregunto con voz grave y galante.

-¡Por supuesto! –Contesto la azabache de inmediato – Te amo tanto, Félix...

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⏰ Last updated: Mar 17, 2019 ⏰

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