Mʏ ᴏɴʟʏ ʟᴏᴠᴇ

❁ my sweet Jim ❁

Soy Jim, Jim Hutton.

Esas palabras saliendo de su boca aquel día no dejaban de pasar por mi mente, esa forma de hablar, tan dulce, tan clara y firme, imposible olvidar ese día.

Para ser honesto, nunca logre imaginar por lo menos si quiera que aquel hombre de cabellos negros y bigote, nunca lograr imaginar que no pudiera pensar en volverlo a ver, dejando a un lado mis problemas y enfocarme en la esperanza de volver a encontrarlo de nuevo, poder oírlo, pero no por mis pensamientos, si no por mis propios oídos y verlo con mis propios ojos de nuevo,
sería un deleite majestuoso.

—Freddie, amigo, ¿Estás bien?

Al parecer estaba tan viajando en mi mente que no tenía ni la remota idea de estar presionando las teclas del piano.

—Perdón..

Se que en verdad ya debo hacer algo al respecto.

—¿A donde vas?

Tome mi chaqueta y salí a mi objetivo, si o si tenía que hacer lo que debía hacer desde ya hace un largo tiempo atrás.

Llegando a casa, salude a cada uno de mis mininos y me dirigí a el directorio que estaba en mi habitación, Delilah estaba acostada junto a Romeo en mi cama.

Jim Hutton... Jim Hutton..

Sentía nerviosismo, no dire que no;

Cuando llegue ala sección a buscar su nombre me percaté de que claramente, como mi subconsciente no pensó antes lo cual complicado sería encontrar a ese Jim Hutton, si en la ciudad había infinidad de personas llamadas así..

Pero no, no me daría por vencido, si no lo hacía me perduraría loco.

—Meoww. —Jerry se paró frente a mí y se acerco a ronronearme.

Tan lindo mi querido Jerry.

—Jerry, Querido, estoy ocupado, ahora bajo con todos para mimarlos, ¿Si cariño?

Me miro con sus tiernos ojos, y se va de la habitación.
¿Qué más da llamar al primer número?

—¿Bueno? —Mi emoción estaba a una gran escala, no lo podía evitar.

—¿Con quien desea hablar?..

Mis expectativas estaban por el suelo al oír a una voz de mujer, pero por otro lado podría no ser el número correcto.

—Lo siento querida, me equivoque de número, adiós.

Deje a un lado él teléfono descolgado y continué por horas, busque y busque sin ningún resultado aparente del ladrón de mis suspiros..

¡Pero no me daré por vencido.!

;;

—Lamentó irme así como así ayer.. no lo volveré hacer. —Todos me miraban y me incluyeron a la nueva idea que tenían aquellos mi familia.

Ya se había conseguido un grandioso riff, muy armonioso y pegajoso que podría asegurar que a todo el mundo le va a fascinar.
Cada vez que se crea una nueva canción da nacimiento a una nueva armonía para todos, que claro, con esfuerzo de nosotros, pero con el propósito de que las personas logren disfrutarlo tal y como fue pensado.