Espías-Elounor

Capítulo 24

Eleanor

No sé cuanto tiempo estuve llorando, pero creo que fueron horas en las que estuve acostada en mi cama sin olvidar el rostro de aquel inocente hombre pidiéndome con la mirada que no lo haga. Estoy rota por dentro. Yo no me dedico a esto para matar gente inocente o robar algo que no es mío. Estoy sacrificando a mi família mas de lo que debía.

Y hablando de ellos. Tenía miles de llamadas y mensajes de ellos preguntándome donde estaba. Y también de Perrie, pero no me hizo falta ver para saber que quería. Iba a preguntarme por Louis, no me hace falta ver los mensajes.

No me di cuenta cuando me acabé durmiendo de tanto llorar, y al despertarme, me di cuenta de que ya era de noche. El reloj digital que tenía en la mesita de noche marcaba las 21:18 pm. Mi estómago rugía del hmabre que tenía. Agarré mi teléfono y suspiré al ver mas mensajes y llamadas perdidas de mi família. Decidí apagarlo y salí de mi habitación. Pero cuando iba a bajar las escaleras me detuve al oír sonidos raros. Mierda, eran gemidos. Miré hacia la habitación de Hank e hice una mueca al saber que el y Meredith estaban ocupados. Bajé las escaleras rápidamente y fui a la cocina. Por suerte encontré a Amelia.

-Hola, Amelia-le sonreí y ella me devolvió la sonrisa.

-Hola, pequeña, te guardé la cena porque sabía que despertarías. Ahora te la caliento.

Fue hacia el microondas y lo enchufó. Minutos después sacó de este un plato de arroz con pollo. Mi boca se hizo agua y mi estómago volvió a rugir.

-Gracias-me senté cuando me lo sirvió y empecé a comer. Dios, si que tenía hambre.

Al rato, Amelia se despidió de mi y yo me quedé terminando mi cena. Cuando acabé, lavé las vajillas y volví a subir a mi habitación. Agradecí eternamente que los ruidos hayan parados. Entré a mi habitación y salí a la terraza. Necesitaba aire fresco. Al salir, apoyé mis brazos en el borde de la terraza y cerré los ojos sintiendo el aire fresquísimo. Por un momento sentí una dosis de paz. Algo que no sentía desde hace mucho. Empecé a pensar en todo lo que ocurre hasta ahora. Esperaba que mi família estuviera bien aunque estuvieran preguntándose donde estoy. Pero sobretodo pensaba en Louis. Tengo claro que me odia y no le doy explicación a eso. De seguro ahora estará revolcándose con alguna prostituta. Tampoco puedo juzgarle, le hice daño. Aunque deseo con todas mis fuerzas que algún día pueda comprender porque hice todo esto y que lo amo mas que a nadie en mi vida. Aun recuerdo cuando fue la primera vez que nos vimos.

Flashback

Brooks y yo íbamos en el coche en dirección hacia nuestro contacto que nos daría aquel archivo para completar la misión. Estaba bastante nerviosa. Faltaba muy poco para terminar mis prácticas y si conseguía ayudar a Brooks en esta podré ir a la próxima misión yo sola.

Cuando llegamos, me fijé que estábamos en el bosque abandonado de la ciudad. Nos bajamos del coche y miré a Brooks que buscaba con la mirada a nuestro contacto. Todavía ni le pregunté quien era.

-¿Quien és?-le dije y me miró.

-Es un espía de lo buenos, es unos meses mator que tú. Lo conozco desde hace poco, pero es de confianza.

Asentí y de un momento a otro me sobresalté al sentir a alguien agarrándome la cintura. Me di la vuelta pegándo un grito y le di una cachetada a aquella persona.

-¿Pero que demonios...?

Cuando me fijé me di cuenta de que era un chicos. Era castaño y de la misma altura que yo. Era bastante guapo en verdad. ¿Pero que digo?

-¡Louis!-Brooks se acercó a nosotros-. Lo siento mucho, ella es mi hija Eleanor. Cariño, es el Louis Tomlinson, nuestro contacto.

Mi cuerpo se quedó helado al escuchar el apellido. ¿Tomlinson? ¿Este chico es hijo del difunto mafioso mas peligroso de Londres.