Decepciones Constantes© [EN CURSO ]

4. Zorrasenaccion.com [Cloe]

CLOE.

—No deberías ir a clases hoy aun no estás del todo bien —me repite Carlos por quinta vez.

—Ayer tenía que presentar un examen, espero que me acepten el justificante que tú mamá me dio —le explico.

—Esta bien, pero no iras al trabajo.

—Como digas Carlos, ya vámonos o se nos hará tarde. —Tomo mi mochila del sofá.

—¿Llevas las pastillas? —interroga y asiento—, ¿Sabes a qué hora te las tienes que tomar?

—Si Carlos, ya me lo has preguntado cómo cinco veces y ya te respondí que sí, tu mamá me explicó bien todo.

Gracias al cielo y al justificante que Amelia me dio la maestra me dejó presentar el examen que tenía pendiente. Las demás clases se me van demasiado lentas, a la cuarta hora decido salir a tomar aire y tomar las medicinas que me dio Amelia.

Me acerco al escritorio donde la maestra está revisando las carpetas de los demás alumnos.

—¿Puedo ir a tomarme mis medicinas? —pido permiso y me mira como si me hubiera salido otra cabeza, ya que normalmente me salgo sin decir nada.

—Primero deme su carpeta, señorita Miller —me ordena—, espero que esté completa o no volver a entrar a mi clase y estará reprobada en mi asignatura —me advierte.

Regresó a mi banca por mi mochila, saco mi carpeta para dársela, pero como si quisiera hacerme sufrir me hace esperar hasta que revise hoja por hoja de mi carpeta.

—¿Que le cuesta traer todos los trabajos como ahora? Nada, ahora puede retirarse.

Salgo del salón directo a la cafetería para comprarme un batido de vainilla con uva para no tomarme las pastillas con agua por qué saben horribles. Amelia me explicó que tenía que tomarlas a la hora que comiera, pero odio la comida de la cafetería, siempre es un asco.

Compro mi batido y decidido no quedarme en la cafetería ni esperar a Juliette, necesito y quiero tomar estar sola, así que voy hasta el campo de fútbol para sentarme en las gradas.

Observo a Max caminar hasta detrás de las gradas junto a Sheila, así que dejó mi mochila y mi bebida en el suelo para seguirlos. Sacó mi celular y empiezo a grabar cuando se besan.

—¿Me extrañaste? —le pregunta Sheila a Max con voz juguetona.

—Claro que sí, pero esto. —Toca el bulto de sus pantalones—. Extraño más esos maravillosos labios.

« asco».

—Pues no lo hagamos esperar más —réplica la rubia. Se arrodilla frente a él para bajar el cierre del pantalón, baja lo suficiente el bóxer para sacar el miembro y masajearlo antes de llevárselo a la boca en ese momento Max suelta un gruñido de placer.

«Pero qué asco y pensar que Logan besa esa boca».

Decido salir antes de que esto se vuelva algo aún más intenso.

—Pero que escena tan más perfecta para la página Zorrasenacción.com —me burlo asustando a ambos. Sheila se pone de pie rápidamente mientras Max acomoda sus pantalones.