🍒|| Dulce Como El Caramelo. ·•||•· Novela. (,,,-...

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Sonaría la alarma de despertador a las 6:30. Y la chica se levantaria algo cansada, pero no del todo. Ha si que estaría acostumbrada a ello. Sin hacer tanto ruido se levanta e iría al baño.
Después de hacerse del todo, se dirige hacia el closet. Donde ponía su uniforme de estudio, empezaría a ponerselo con calma, en ese entonces sentiría algunos ruidos abajo como platos y cosas así. Se dio cuenta que su madre ya se habría levantado para hacer el desayuno así que no debía apuntarse demasiado.
— ¡ Hija, está el desayuno listo ! No demores. — diría la madre desde abajo.
— claro ma, ya bajo. — diría ella alterando un poco su voz y se daría un vistazo al espejo y bajaría con su bolso para desayunar. Al bajar notaría que su madre estaba lavando la loza. Mientras su padre leía un diario y tomaba el té, ella llegaría con una gran sonrisa.
— Hola pa, hola ma. Buen día. — diría ella tomando un pan y lo abriría para echarle algún ingrediente cotidiano.
— ¿ Estás nerviosa por tu nuevo colegio ?, — diría el padre dejando de leer el diario para disponer a conversar con ella.
— puede que si, pero ya saben. Me an enseñando aún que sea tímida. Debo ser muy presentable...y poder hablar con alguien. — diría con una dulce sonrisa aun que de igual manera se sentiría algo nerviosa
— espero que sea así hija, aveces siendo pequeño y resistiendo el miedo. Uno puede hallar la verdadera belleza, como alguien como tu. — diría su padre muy orgulloso de su hija aggie.
— padre eso es un halago muy grande, de todos modos mucho gracias. — diría feliz.
— de igual manera, debes tener cuidado, quizás que te puede suceder. Estas en secundaria segundo grado. Tienes que ser muy cuidados, ¿está bien hija? — diría su madre sentándose ya que había terminado de comer. La chica asiente suavemente con su cabeza y empieza a comer mientras come con sus padres.
— madre, padre. Ya me debo ir o llegaré tarde. —
— claro hija. — diría su madre; — es hora que ya debas ir, cuidate. ¿Estás segura de que no quieres que te lleve? —
— me encantaría ma, pero me deje llevar por el tiempo y creo que llegaré a la hora, y no quiero que llegues atrsada a su trabajo.— sonríe dulcemente. — está bien, cuidate. Pueded llamarnos si sucede cualquier cosa, ¿Ok?.—
— está bien ma, adiós. Los amo. —

Esa sería la últimas palabras y se iría a la puerta para irse al liceo, después de minutos de caminar llega a aquel y lo miraría por fuera. Y daría un gran suspiro. Da un paso para entrar pero en ello una chica rubia de rulos pasa por su lado que la empuja, y no se devuelve ni a pedirle perdón. aggie la queda mirando con su rostro super interrogante, pero no tomó importancia, en ese momento toda la emoción que sentía se le había bajado. A sentirse muy incómoda y tímida. Caminaria hacia dentro del liceo. Era mucho más grande de el que había ido antes, incluso al colegio que había ido en primaria no era tan grande. En ese entonces, la chica se pierde y se sentiría muy incómoda más de lo que estaba sentía un hormigueo en su estómago incontrolable, muchas puertas y no sabía cuál era la que le tocaba. En ese entonces una señora se la queda viendo y vería su rostro de preocupación y se acerca a ella.
— chica, ¿puedo ayudarte?, ¿Eres nueva?. — le decía ella a la chica. Aggie, le responde con ternura.
— lo siento es mi primera vez y...No se donde es mi sala. —
— oh, ¿ya veo que curso eres tú linda?ya. —
— 2 ° H, — diría aggie. La directora se queda pensado un momento.
—sigueme. — diría ella y empieza a caminar y ella la sigue sin más poder, ya que era su única guía. La directora llegaría a una sala en la que habrían personas.
— disculpe profesor, ¿que sala es esta? — diría la directora. — este es 3 ° E. — la directora se sentiría frustrada por el fallo, e iría a donde el profesor para hablar discutir aquel asunto que era mío, me sentiría algo incómoda, sentía que no era necesario que la ayudarán y de pronto miro a los chicos que estaban sentados. Y notaría que un chico la estaba mirando con mucha seriedad y no deja de verla, aggie se sentiría algo intimidad y trataría de no verlo. Pero era muy provocante sus ojos...eran muy fijosos y se notaría que no era muy alegre...se notaba muy maduro y serio... a su lado estaba sentada aquella chica rubia rulezca. Me pareció muy sorprendente verla de nuevo. Se veía muy creída, pues estaba haciendo manicura. La cuál ¡ No se puede hacer ! Tenía los labios pintados de un color rojo intenso....pero era muy bonita, la chica empezó a hablar con aquel chico. A aggie se le había olvidado aquel chico, y todo el tiempo se había fijado en ella y eso le haría que se pusiera colorada. La chica de rulos se da cuenta que no le habla y que no miraba a otro lado que no sea a aggie. La chica me miro y yo mire rápidamente a otro lado. Pero la tentación lo impidió. De igual manera, mire para ver que sucedía. Y la chica me miro con odio y eso me dio miedo, y no hice nada más que mirar a la directora mientras charlaba con aquel profesor.
— gracias profesor. — en ese entonces la directora iría donde, Estoy yo. - bien ya podemos irnos. Se donde está la sala.- diría con una agradable sonrisa. Ella le contesta de igual manera.
— su sala es la a13, es llegando al comedor eso es la la derecha y luego camina el pasillo largo y... — la directora se daría cuenta que ella no entendía nada y se quedaría callada y mira a los alumnos.
— kaito, ¿serias amable de acompañar a está alumna nueva a su destino? serias. —
Aggie quedaría mirando a todos para saber quién era, y no... ¡ Era el chico que la miraba ! Aggie no podía creerlo pero dejó sus sentimientos dentro y sólo espero a que se levantará. El chico se levanta sin hacer ni un ruido sólo el sonar de la silla y cambiaría hacia la pequeña chica, oh así era tal vez...Era lo que sentía ella, al pararse todos se quedan callados, se notaba muy alto. Hasta el fin de llegar a su lado, el chico queda mirando a aggie y ella lo miraría con algo de incómodidad.
— sigueme. — diría el con una voz ronca y muy seria. Saldría del
Al ver que no se movía el sale primero de aquella sala y ella lo sigue detrás. Al salir de allí, el chico pondría sus manos en los bolsillos de su pantalón, y ella caminaria a su lado con unos libros en sus brazos. Trataría de mirar a otro lugar pero aggie lo miraba muchas veces. Hasta que se armó de valor y pregunto — Hola...eh, ¿Cómo está ? — diría con timidez.
El chico la miraría con seriedad y mira Al frente cierra sus ojos, aggie sentirá una vergüenza enorme. Al ver que no le respondió por un largo tiempo hasta que el chico que habló. — no me hables, no habló con ardillas. — mira a otro lado mientras caminaba. — ¿ardilla?, ¿Ah quién le dice arrdilla?. Yo no soy una ardilla. — diría algo molesta pero no se notaría. Pues ella no era de molestarse. — ok, entonces no hables, Eres muy ruidosa. — dice aquel chico. — ¿Ruidosa? Simplemente le dije eso, ¿y me dice ruidosa? —. Dice ella tratando de mostrarse fuerte pero sólo se veía muy débil. — sólo estoy molestando. — diría el aún estando serio. — la mira y daría una leve sonrisa casi no se veía notoria. Ella queda algo impresionada, y trata de dar un paso más adelante. — una pregunta...por qué, cuando...¿Se levantó todos se callaron? —
— me tiene miedo, pues soy algo así como el rudo de este lugar, obviamente de una familia muy alta .—
— uh....yo, soy aggie shute, pero...no soy de una familia alta, y en realidad. Para mí eso no me importa, mis padres y yo vivimos en casas pequeñas, bueno no tan pequeñas. Pero gracias a mamá lo pequeño lo convierte en un lugar lugareño y muy llamativo. Con cosas echas en casa. Mi padre dice, que sali a ella. Realmente me e esforzado mucho para entrar a este lugar. Es lo que quería desde la primaria. — diría ella con una tierna sonrisa, pero al verlo su expresión seria había desvanesido y se veía en su rostro una cálida sonrisa, y ella lo miraría confusa. Se notaba muy diferente a como lo había conocido, enserio ese entonces. El chico reacciona y tose y mira Al frente dando su misma expresión.
— ya veo, no eres de clases altas. Supongo que vives en ruinas. —
— ¿eh?, ¡como puede decir algo así!, no por que simplemente viva como la gente común, no significa que no pertenezca aquí...las clases todas son iguales, ¡ Todos somos iguales !. — diría con tristeza. Ya que aquellas palabras del oponente para ella le dieron un gran dolor e su corazón.
— bueno...entonces, supongo que...no le hablaré. — diría ella y daría un suspiro y caminaria mirando el frente algo triste, al contrario, kaito, le daría un vistazo y sin decir nada seguiría caminado.

Pasaron el comedor, era muy grande y lindo. Sus sillas eran muy lindas y hacían conjuntos con las mesas, se notaba que la comida de allí que estaba a la muestra estaba muy deliciosa, y a aggie se le revolvió el estómago. saliendo de allí, pasaron un pasillo enorme al cual era muy largo kaito adelanta un poco a aggie, y ella trataba de andar a su paso, pero sus pequeñas piernas comparadas las de el eran muy cortas. Al llegar a la sala el chico para y la mira. — este es tu salon espero que no vayas a buscar a otra persona para decirte donde es el lugar. — aggie sólo mi escuchaba mientras lo miraba. — puedes buscarme si necesitas algo. —
Ella quedaría impresionada, sin más que decir le daría las gracias, y kaito se iría devolviendo hasta el lugar donde debía estar. Aggie lo miro por detrás unos segundos.
— espera... acaso me dijo que, ¿Podía hablar con el ? —.

......