Mi... ¿Princeso? / Nuestro Secreto.

.El secuestro de Monoma.

En un reino muy lejano, bueno, no tan lejano nació un pequeño bebé, era el más lindo de aquél reino, él heredaría el trono cuando se casara, todos los habitantes del pueblo hablaban de la belleza de ese niño "Es un niño muy lindo" "Se parece a la reina" "Claro que no, se parece al rey" decían algunos.

Una noche fría, el pequeño Monoma dormía en su cuna, ¡De repente!
Un joven de cabello verde que llevaba una capa cubriendo su rostro, se escabulló por todo el castillo, entró a la habitación de Monoma, lo cargó y con unas palabras frías dijo.

- Pequeño Monoma, eres demasiado perfecto para que tengas este tipo de vida... Alguien más debería tener esta oportunidad ¿No crees?

El joven de cabello verde sacó a su lado a un bebé rubio y lo puso en la cuna de Monoma, el pequeño bebé Monoma abrió los ojos asustado al ver a aquél desconocido cargándolo, empezó a llorar tan fuerte que despertó a todos los que habitaban en el castillo, los guardias rápidamente se dirigieron a la habitación del pequeño bebé para averiguar cuál era la causa de aquél llanto, al llegar a ese lugar solo encontraron a otro bebé en la cuna de Monoma, el joven de cabello verde... Desapareció con el pequeño bebé Monoma...

- ¿¡ Como es esto posible!? -dijo uno de los guardias totalmente sorprendido y a la vez asustado, su expresión era realmente devastadora-. Esto no puede ser posible.

- ¡Toquen las campanas, hay que encontrar al joven Monoma!

- ¡Enseguida!

Dos de los guardias salieron de la habitación dirigiéndose a la parte más alta del castillo, tomaron una cuerda para tirar de ella y hacer sonar la campana, el rey y la reina despertaron rápidamente dirigiéndose a la habitación de Monoma, ahí fue cuando "el rey sintió el verdadero temor" los dos rompieron en llanto al notar que no estaba su pequeño bebé, en cambio, solo había un bebé con los cabellos desordenados y rubio, los habitantes del pueblo fueron a la puerta del castillo intrigados y molestos.

El rey y la reina se asomaron a una de las ventanas y anunciaron la desaparición de Monoma y el reemplazo de otro bebé.

- ¿¡ Como es eso posible su majestad!?-dijo una de las niñas de cabello rojo sostenido con una liga-.

- Eso no es posible, ¿ Cómo sucedió eso? -dijo un niño de lentes haciendo mimicas con los brazos-.

- No sabemos nada de Monoma, solo desapareció, así que esto es una orden ¡Buscaremos por aire y tierra hasta encontrarlo, sin descanso!

Dijo el rey alzando un puño hacia el cielo estrellado, todos los habitantes dieron un grito de esperanza, ya querían al pequeño Monoma en casa.